Revista Literatura

39-Continuación Capítulo 27 “Semifinales”

Publicado el 14 junio 2016 por Cronicasdmm

Los hermanos Astorga caminaron por un camino rocoso, rodeado de un césped muy verde y muy cuidado, después bajaron la colina de donde está el castillo, bajaron por unas escaleras de piedra que estaba rodeada de moho hasta llegar a una torre alta de unos 10 metros, está estaba hecha de piedra solida sin ni un color en especial, corroída por los años y con el escudo de Vanscint en su frontis. La torre tenía detalles que semejaba a las características del elemento del agua. En eso René le dice.

 –  Este es la torre Vanscint, acá se hacen las reuniones cuando pasan cosas serias o se reúnen los jefes de cada rama deportiva y también se almacenan las copas ganadas, está el Salón de Campeones, es solo un lugar para los Vanscint. –Alexis quedo maravillado, no pensó que había algo así solo para la alianza. Los dos llegan a la puerta principal y René un poco ruborizado dice a viva voz.

–  Cara de gallina. –Alexis mira a su hermano que a verlo también le dice. –Así es, la clave es la misma que en el salón. –La puerta se abre y los chicos entran a un solo pasillo de piedra pero que a pocos pasos de caminar cambia a una alfombra de color celeste y azul. El pasillo estaba iluminado por unas pequeñas antorchas. Alexis noto que a diferencia del castillo, esta torre tenía un aspecto más bien medieval pero su ambiente era más bien cálido, en eso su hermano le pregunta.

–  ¿Alexis tú sabes por qué la alianza del agua tiene por nombre Vanscint? –Alexis le contesta que no a lo que René se sorprende diciendo.

–  Vaya pensé que ibas a decir que era uno de los fundadores de la Academia.

–  ¿Y por qué pensaste eso? –Pregunto Alexis a lo que su hermano contesta.

–  Porque muchos caen en eso. –Alexis le dice.

–  Bueno eso pensaba yo pero tengo entendido que Rosswood es el fundador de la Academia ¿O me equivoco? –René sonríe y le contesta.

–  No te equivocas. El castillo, las torres y los estadios, todo fue obra de Vladimir Rosswood pero los nombres de las 4 alianzas son por los 4 primeros discípulos de Rosswood. Vanscint y Vardein llevan los nombres de los dos discípulos hombres mientras Asgloub y Alinsef de las dos primeras discípulas. Evans Vanscint se convirtió en el maestro del elemento del agua por ello nuestra alianza del agua lleva su nombre. Ahora, nuestra academia se sale de otras Academias o Escuelas conocidas. Las más famosas han sido fundadas por dos, tres o cuatro magos o magines, en cambio nuestra Academia fue fundada por un solo mago magín muy poderoso pero también de muy bajo perfil tanto así que su única gran obra fue esta Academia y, también, que tomo a dos chicas y las hizo sus discípulas pero sabes una cosa hermanito. –Alexis estaba muy interesado en la historia y solo responde con un “que” para que su hermano prosiga.

–  Rosswood fue el único que tomo como discípulos a un elfo y una descendiente de sirena. En esos tiempos era como un pecado pero él no pesco. Vanscint es un elfo y extrañamente Alinsef era la descendiente de una sirena. –Alexis le llamo la atención lo de Alinsef y pregunto.

–  Pero René, Alinsef es la alianza del fuego, ¿Cómo pudo ser eso si ella era una descendiente de una sirena? –René le contesta.

–  Bueno nadie lo sabe. Además Vanscint que era un Elfo tenía más compatibilidad con la tierra o el aire, pero vez, era un maestro del elemento del agua. Creo que Rosswood tenía fe en el dicho, las apariencias engañan como también tu descendencia.

–  Quieres decir que no importa de dónde vengas, ¿tu propio camino lo haces tú? –René le contesta que así es. En eso los dos llegan a un salón circular con doce puertas, según René era el salón del reloj ya que cada puerta, arriba, tenía un número del 1 al 12, a excepción del 6 que pasaba a ser el pasillo por donde habían entrado pero no solo el número las identificaba sino también un letrero que colgaba en la puerta. El salón tenía dos sofás de media luna que no se unían sino que dejaban un espacio para entrar y sentarse. Hacia el lado derecho estaban dos personas mayores conversando mientras que nadie lo hacía al lado izquierdo. Al centro de todo estaba una mesa cuadrada rodeando la estatua de Vanscint que era un joven con unas orejas puntiagudas vestido con una capa, de pelo largo y liso. Los chicos que conversaban, uno era de piel de color negro pero muy maceteado mientras el otro era caucásico de cabello negro, los dos con ropa informal. Estos ven a los hermanos y el de color se dirige a René, diciendo.

–  Vaya, por fin lo trajiste eh. –René saluda al chico, que al parecer, era mayor que él y le dice.

–  Es que se me olvidaba traerlo. –Alexis pensó que hablaban de él y bueno en eso, estos se ponen de pie y se acercan a los hermanos Astorga, saludan primero a René y luego saludan a Alexis, diciendo.

–  Hola Alexis, mi nombre es Leandro Martínez de octavo año y él es mi amigo José Santos de Séptimo año. –Alexis saluda a ambos y en eso escucha a su hermano René decir.

–  Leandro veo que hay poca gente en la torre. –Este le contesta.

–  Bueno la mayoría vienen después de la cena, casi nadie viene después del desayuno. Alexis espero vengas más seguido, los de primer año hay que traerlos sino no vendrían nunca. –Alexis pregunta el motivo de ello a lo que José contesta.

–  Simplemente porque no saben llegar. –René le dice.

–  Además que también se preocupan de aprenderse los innumerables pasillos del castillo. –Alexis se sonroja ya que se había sentido identificado. Luego oye como Leandro le pregunta a René.

–  ¿Le mostraras el Salón de los Campeones? –René dice que si a lo que Leandro y José se miran y dicen.

–  ¿Los podemos acompañar? –Alexis mira a su hermano y ve que este solo sonríe. Los 4 chicos tomaron la puerta número 11 que esta hacia el lado izquierdo, en la puerta decía “Salón de Campeones”. Al entrar ve que hay diversas mesas alfombradas en cuya superficie habían muchas copas de diferentes formas y de oro, plata o bronce, también unas de vidrio y medallones, todos, estaban cubierto por un vidrio que solo limitaba a apreciarlas con la vista. En las paredes habían cuadros de honor, fotos en movimiento de algunos equipos famosos de Vanscint. En eso René le dice a su hermano.

–  Acá están todas las copas de equipo de cada una de las ramas deportivas. –Alexis camina entre las diversas mesas llenas de copa hasta que en la pared ve un gran cuadro que ocupaba casi la pared entera que dice “Honor a las leyendas” Leandro se le acerca a su lado, al igual que José y René, pero es el primero, que le dice.

–  Acá, como dice el nombre, solo están aquellos que hicieron grandes victorias o reinaron por años por ser los mejores de la rama deportiva. Solo están los campeones que se repitieron más de una vez durante los 8 años en Rosswood. –Alexis se fijo que el cuadro se dividía en 8 listas. La octava lista era superior a todas y era la que menor personas habían. Según René era la lista de las súper leyendas que reinaron por 8 años consecutivos y que por eso era la que tenia menor cantidad de alumnos, solo tenía 7 personas. Nombres que no conocían hasta que dio con uno que era conocido, no solo para él sino para todos ahí presentes.

–  ¿No es el director, ese último? –René le contesto.

–  Ahí dice Aldebarán Ludendorff pues sí, es él. –Alexis solo dijo “guau” 8 veces campeón consecutivo pero en dos ramas deportivas que eran el Wingpis y el Aurinnis pero de pronto viendo la cantidad de nombres. Sus ojos se centraron en un nombre de alguien muy especial, una de las pocas mujeres que había en la lista que estaba más abajo; de los campeones 7 veces consecutivas, una mujer que gano consecutivamente la Copa Master de Aurinnis, 7 años consecutivos a excepción del octavo año que fue subcampeona. Su nombre era tan distintivo para él que hasta quedo boquiabierto de solo ver tal nombre. René, extrañamente ve que su hermano indicaba hacia dicho nombre y le pregunta.

–  ¿Qué pasa Alexis, se te hace conocido el nombre de Ana Hernández? – Alexis lo mira y luego despierta de sus pensamientos y solo se ríe diciendo.

–  No para nada pero que una mujer haya ganado 7 veces consecutivas la Copa Master, me hace pensar que las mujeres eran malitas en ese año. –René ríe al igual que José pero para Leandro no ameritaba risa y le dice al chico.

–  En ese tiempo el Aurinnis se jugaba contra hombres y mujeres por igual. Claro que después se dividió en categorías femeninas como masculina pero esta chica debió haber sido muy fuerte para ganar 7 años consecutivos la Copa Master en tiempos donde la mayoría de los campeones eran hombres.

–  Sabes mucho de historia Leandro. –Decía el hermano mayor de Alexis a lo que este modestamente, le contesta.

–  Para nada, esto que dije sale en el libro deportivo de Rosswood, ahí sale esta chica. –José le dice.

–  Siempre tan buen lector de historia tú. –Leandro, René y José ríen mientras Alexis seguía mirando ese nombre, pensó que podía ser pero solo estaba su nombre y apellido, ¿Sera ella? Pensó, o solo una coincidencia. Sus pensamientos de ahí en adelante lo sacaron un poco del interés de conocer más del Salón deportivo y una sensación extraña lo invadió, quería comunicarle a sus amigos esto pero no podía dejar a su hermano mayor botado ni a los amigos que le contaban cosas que no pesco mucho ya que su mente y su cuerpo querían estar en otro lado. Paso media hora, una hora hasta que su hermano le dijo.

–  Alexis si quieres te vas, digo solo si deseas. –Alexis tomo la oportunidad para irse y dijo.

–  Bueno, me acorde que tengo una tarea que hacer… –Se despidió de los amigos y agradeció por todo y luego se fue y salió de la Torre Vanscint lo más rápido posible. Regreso por el mismo camino que llego y estaba llegando al castillo cuando en eso ve a Gustav, junto con dos amigos, molestando a alguien de Vanscint y Alexis se da cuenta que es…

–  Nicolás… ¡¡¡Ey Gustav, déjalo tranquilo!!! –Gustav se da vuelta y al ver que es Alexis, suelta a Nicolás que es sujetado por los amigos. Alexis llego hacia ellos y Gustav le hace frente colocando una mirada de no conocerlo aunque su sonrisa aparentaba lo contrario.

–  Pero si es el gran Alexis Astorga. –Luego de esas palabras su mirada se vuelve intensa, y su sonrisa desaparece dando lugar a una seriedad para luego decir. – ¿Vienes a detenerme? Atrévete y quedaras expulsado del torneo. –Alexis muy sereno lo ve y luego le dice.

–  ¿Quieres decir que no quieres enfrentarme en el torneo? –Gustav no sabe que decir y evitar mirarlos a los ojos y Alexis se acerca a él hasta estar frente a frente y le dice.

–  Si es así, entonces tienes miedo a enfrentarme. –Gustav muy molesto le replica viéndolo a la cara.

–  ¡Yo no tengo miedo a enfrentarte! –Alexis alza la voz y le ordena.

–  ¡Entonces deja a mi amigo en paz! –Gustav lo mira y Alexis le hace frente con su mirada, ambos con las manos empuñadas se ven hasta que Gustav les dice a sus dos compinches.

–  Vámonos. –Los amigos botan a Nicolás al suelo y se van. Alexis socorre a Nicolás sin prestarle atención a Gustav que se va sin antes decir.

–  Más te vale que pases a la final para hacerte pedazos. –Alexis, que estaba más preocupado de su amigo, le contesta pero dándole la espalda.

–  Gana primero la semifinal y luego hablas. –Gustav lanza un “maldito” a poco volumen y se va junto a sus amigos, mientras Alexis le pregunta a Nicolás por su estado a lo que este contesta.

–  Estoy bien, no pasa nada, llegaste antes que me golpearan. –Alexis le pregunta.

–  ¿Pero qué haces por aquí? –Nicolás le contesta.

–  Bueno unos de segundo año me dijeron que pasaste por aquí, te quería avisar de algo pero Gustav y sus gorilas me pillaron.

–  ¿Para qué me buscabas? –Nicolás coloca una mirada de preocupación y le contesta.

–  Es Dulce, ella está en la enfermería.

–  ¡¿QUÉ?! –Alexis corre al castillo y es seguido por Nicolás, quien en el trayecto al castillo le dice.

–  Se sintió mal después del desayuno, y de pronto no pudo soportar un dolor abdominal así que la llevamos a la enfermería. –Lo que le dijo Nicolás hizo que Alexis apurara el paso, al llegar a la enfermería ve a Abraham, Miriya, Amy, Jorge y John rodeando una cama. John ve a Alexis y Nicolás y se acerca y le dice a este último.

–  Nicolás lo encontraste.

–  ¿Qué paso, como está ella? –Pregunta Alexis a lo que John le contesta.

–  Esta mejor, le dieron unos sedantes. –Después se acerca a la cama y ve a su amiga que estaba durmiendo, en eso ve a Amy y esta le dice.

–  Algo le cayó mal y parece que también tuvo una reacción alérgica, no sabemos que le abra caído mal. –Abraham dice.

–  Quizás fue la mermelada. –Amy le dice.

–  Si fuera así yo también estaría enferma. –Miriya dice.

–  Todos comimos lo mismo, nada puede haberle caído mal, quizás alguien la quiso envenenar. –Alexis le dice.

–  No digas tonteras Miriya, ¿Quién querría hacerle daño? –Esta contesta pero muy segura de sí.

–  Esta chica, María Fernanda, la de Vardein con quien se enfrentara en las semifinales. –Jorge le dice.

–  No creo que sea ella. –Y Miriya le replica y le pide explicaciones de sus dichos a lo que Jorge contesta. –Simplemente porque es una buena chica, ¿digo no porque sea de Vardein es mala o no? –Alexis mira a Abraham y este le dice al oído.

–  De Vardein han salido muchas ovejas negras pero es una coincidencia. –Alexis le pregunta, también al oído.

–  ¿Cómo coincidencias? –A lo que Abraham le contesta, al oído igual.

–  Porque algunos famosos magos o magines tenebrosos han salido de otras alianzas, incluida Vanscint. –En eso se escucha una voz muy baja que dice.

–  Ella no fue. –Todos miran a la dueña de esa voz, que es Dulce que estaba levemente despierta y dice.

–  María Fernanda es una amiga, me la he topado a veces y es muy simpática, no es capaz de hacer daño. –Miriya apenada le dice.

–  Lo siento, pensé mal. –En eso llega la enfermera que se abre paso y le pregunta a Dulce.

–  ¿Qué bien que hayas despertado, te sientes mejor? –Dulce se sienta a duras penas en la cama y le dice.

–  Algo pero gracias por preguntar, ¿Qué me paso? –La enfermera le contesta.

–  Tuviste una reacción alérgica moderada parece que algo comiste que te produjo esa reacción. ¿Habías sufrido antes esto? –Dulce contesta.

–  No, es primera vez que me pasa.

–  ¿Comiste algo que no hayas comido? –Dulce piensa un momento pero a la vez enumerando las cosas que desayuno.

–  Pastel de arándanos, pan con mermelada de frutilla, chocolate caliente, manzana en trozos con plátano. –Alexis pensó en ese momento que Dulce era una glotona. –… y un trozo de pan de pascua, esos con nuez y frutas confitadas, delicioso estuvo, primera vez que había comido eso. –En eso la enfermera los gestos de la enfermera se  pero Dulce le dice.

–  No creo que sea alérgica a la nuez, digo había comido antes. –En eso Amy dice.

–  Solo quedaba un trozo de ese pan y tú te lo comiste.

–  ¿Cómo que solo un trozo? –Pregunto la enfermera a lo que Amy contesta.

–  Claro, la primera vez que lo vi estaba solo ese trozo, lo iba a tomar pero esta chica se me adelanto. –Abraham riendo le dice.

–  Eres muy lenta entonces. –Amy lo recrimina con la mirada pero en eso la enfermera estaba algo sospechosa entonces, dice.

–  Bueno investigare, pero por ahora señorita Ayanami no comas pan de pascua. –Dulce le contesta que si con la cabeza y luego, ya más despierta conversa con Amy y con Miriya. En eso Alexis mira a Jorge y cuando ve que este lo ve, Alexis hace un movimiento con la cabeza y luego los dos se separan, para callados, del grupo y luego Alexis le dice.

–  ¿Esto es sospechoso, no lo crees? –Jorge le pregunta.

–  ¿Te refieres al pan de pascua? –Alexis le contesta que si y luego le dice.

–  Piensa bien esto. ¿Cuando vemos la mesa que hay? –Jorge le contesta de inmediato.

–  Comidas deliciosas. –Alexis sonríe pero después le dice que se concentre más y Jorge lo hace y de pronto, al parecer se le enciende la luz y eso lo hace cambiar su cara diciendo.

–  En la mesa cuando de un plato solo queda un trozo, este de inmediato se multiplica en 4 para que siempre queden trozos suficientes a no ser que las personas al unísono saque un pedazo dejando el plato vacío el cual de inmediato desaparece. –Alexis sonríe y le dice.

–  Exacto, eso quiere decir…–Jorge completa.

–  Que Dulce si fue envenenada. –Y Alexis finaliza.

–  Así es, pero la pregunta es ¿Quién fue?

El día lo pasaron con Dulce quien, pese a estar mejor, se quedó en la enfermería en observación. A la chica no la dejaron sola. Alexis y Jorge decidieron decirles a sus amigos de las sospechas pero sin decirle a Dulce ya que esto podría hacerle  mal. Nuevamente Miriya sospecho de la tal María Fernanda e incluso se fue a buscarla y al encontrarla y decirle que Dulce estaba hospitaliza, esta corrió y fue a verla de inmediato y al llegar estuvo con ella un buen rato. La acción preocupada de la chica hizo que Miriya cambiara de opinión y como una forma de disculparse le informo sobre las sospechas que había, de que su amiga fue envenenada. La sorpresa de María Fernanda fue de una extrema preocupación por lo cual entro a investigar silenciosamente. En tanto, la enfermera quien tenía las mismas sospechas comenzó a investigar y pregunto en la cocina si había en el menú del desayuno el pan de pascua y le informaron que no, ya que eso solo se servía en festividades Navideñas.  Ya al saber que su sospecha de envenenamiento eran ciertas, le informo a Ludendorff quien decidió hacer una investigación y cuidar a Dulce de un futuro ataque por lo cual pidió llamar a Abraham, Alexis, Miriya, Amy, John, Jorge y María Fernanda. Ya cuando los tenía a todos en su oficina, les dijo.

–  Por sus miradas y pensamientos creo que ya saben que su amiga fue víctima de envenenamiento. –Todos se quedan mirando entre si y luego, al unisonó, contestan que sí. –Ludendorff sonríe y luego pregunta.

–  ¿Nadie le ha informado de esto a la señorita Ayanami o sí? –Todos al unisonó contestan que no.

–  Entonces mientras esto se investiga, les pediré que no la dejen sola ni a sol ni a sombra. –En eso María Fernanda, que era una chica de pelo castaño claro y ojos marrones y una voz dulce, le pregunta.

–  ¿Director porque no ha sospechado de mi persona? –Ludendorff le contesta con otra pregunta.

–  ¿Por qué su pregunta señorita Fuentes? –Esta contesta.

–  Porque al ser su adversaria en las semifinales de por si la primera sospechosa seria yo, como lo hizo Mc Kensy. –Ludendorff le muestra una sonrisa y le dice.

–  Simplemente porque tú estimas mucho a Ayanami ¿no es así? –María Fernanda se sorprende y a la vez se ruboriza y luego Ludendorff agrega. –Veo que es así, después te diré por qué me di cuenta. En tanto a todos ustedes les pido que la cuiden, ¿Lo harán supongo? –Todos contestan que si y luego los hace retirarse a excepción de María que seguía ruborizada. Alexis se le quedo viendo y ve que estaba muy ruborizada. Quizás era algo vergonzoso pensó, pero no le dio tanta importancia, la cuestión era cuidar a su amiga.

Al otro día a Dulce la dieron de alta, esta sin saber, siempre estaba acompañada por Alexis o por alguno de los otros. María Fernanda estaba atenta a sus pasos y Alexis se dio cuenta que, al parecer, ella tenía un papel más que solo cuidarla, parece que también había que vigilarla. En tanto, Dulce estaba mucho mejor, incluso ese fin de semana estaba muy animada a tanto que le pidió a Alexis una pequeña batalla en las afuera del castillo que ella gano sin problemas. Alexis no se dejó perder pero siendo que estaba preocupada por su amiga no le dolió tanto la derrota como antes, aunque solo eso hizo que Dulce sospechara que algo raro estaba pasando aunque no le dio tanta importancia. Pero llegando al lunes la chica amaneció con síntomas de resfrió que fue empeorando con el correr de los días hasta que el viernes no se pudo levantar de la cama por sentirse muy mal. Alexis no podía hablar con ella ya que los hombres no tenían permitido entrar en los dormitorios de las chicas por lo cual las únicas fuentes de información eran Miriya y Amy. El día transcurrió muy rápido ya que era un día de pruebas por lo cual Alexis, aunque extrañaba a su amiga, no podía desconcentrarse. Ya en la noche de ese día, en plena cena se sentó junto a Amy quien le dijo.

–  No creo que Dulce con ese estado pueda jugar mañana, Alexis. –Este que cortaba su chuleta de cerdo le pregunta.

–  ¿Por qué lo dices, está muy mal? –Amy le contesta.

–  Alexis, la fiebre le subió nuevamente, la enfermera la fue a ver y esta con ella ahora y dijo que si en la madrugada no le baja la fiebre la darán de baja en el torneo.

–  ¿Cómo eso que la darán de baja en el torneo? –Dijo un preocupado Alexis que sostenía en el aire el tenedor con el trozo de carne de cerdo. Amy lo tranquiliza diciendo.

–  Solo lo harán si no le baja la fiebre así que no te coloques así, tranquilízate. –Alexis algo triste le dice.

–  Es que es una pena que la retiren por algo así, además se merece jugar, estuvimos un buen tiempo entrenando y que sea eliminada así, ella no se lo merece. –Amy se acaricia el cabello mientras le dice.

–  Digo lo mismo, ella no se lo merece. –Alexis come sin decirle nada pero después cuando estaba partiendo el pan le dice.

–  Más encima todavía no se sabe nada del pan de pascua. –Amy se dio cuenta que Alexis estaba preocupado y a la vez molesto por lo que le sucedía a Dulce, incluso él no presto atención a las bromas de Abraham y Miriya que jugaban con las bolitas de carne. Cuando el grupo término de cenar se fueron al Salón de los Vanscint, al llegar se encontraron con la sorpresa de ver a Dulce abrazada a una manta, tomando chocolate frente al fuego de la chimenea. Alexis al verla corre hacia ella mientras Amy le reclama el por qué esta levantada. Dulce le contesta mientras ve a Alexis venir hacia ella.

–  Estaba aburrida en la cama, además ya no tengo fiebre y… –En eso es abrazada por Alexis y luego Dulce completa lo que decía, diciendo. –Tengo permiso de la enfermera así que no me llames la atención. –Alexis en eso la mira y le pregunta si ya ceno a lo que Dulce le contesta.

–  Si ya lo hice, la enfermera me trajo la cena, además no pensé que me echabas de menos. –Alexis se separa y algo ruborizando, evitando mirarla le contesta.

–  Para nada, bueno si te eche un poco de menos, me tenías algo preocupado. –Dulce se limita a sonreír mientras Amy le dice.

–  Este chico estaba bien preocupado por ti, imagínate que tuvo una cara de pocos amigos durante toda la cena. –Alexis solo se ruboriza y no dice nada y Dulce solo sonreía. Minutos después llegan Jorge, John y Nicolás quienes saludan efusivamente a la chica que seguía sentada y era rodeada por sus amigos que estaban sentados en el piso alfombrado. Conversaban amenamente cuando lentamente se iban a dormir. En una hora solo estaba Miriya, Abraham y Alexis con Dulce, en eso la primera se pone de pie y dice.

–  Bueno chicos me voy ya que mañana temprano juego mi opción de pasar a las finales. Nos vemos. –En eso Abraham se despide y se va con ella quedando Dulce y Alexis solos. Este último mira hacia el techo, y la chica mira el fuego de la chimenea y luego de un minuto de silencio Alexis le pregunta.

–  ¿Realmente jugaras mañana? –Dulce lo ve y le dice.

–  Pues claro que lo haré, tengo que hacerlo, es la única motivación que tuve para haberme mejorado.

–  ¿Pero estas en la plenitud de tus condiciones para jugar? –Dulce se pone muy seria y le contesta con voz profunda.

–  Alexis, voy a jugar aun cuando este con fiebre ¿Entendiste? –El chico le dice que se calmara. Dulce se tranquiliza pero aun así se pone de pie y se retira al dormitorio sin antes decir.

–  Y tú, espero que ganes y otra cosa. –Se da vuelta, ve a Alexis que se colocaba de pie y le dice.

–  Confía en mí. –Y sin más le dice “buenas noches” y se va dejando a su amigo solo.

Academia Rosswood. Sábado 31 de Marzo. Año 1 de la Nueva Era.

Eran las 9 de la mañana y en las afueras del castillo había ya, mucho movimiento producto de que los torneos de novatos de cada ramo de deportes estaban llegando a su fin. La jornada iba a comenzar con las primeras semifinales femeninas y después con las masculinas. Por lo cual el Estadio donde se iba a jugar la primera semifinal femenina estaba en su apogeo. Alexis junto a sus amigos estaban ya en las galerías esperando el comienzo de la semifinal.

–  Espero que Miriya gane. –Decía Abraham a lo que Alexis le dice.

–  Por lo que leo se enfrenta con Sonia Durán de quinto año.

–  Pero Miriya es regular, tiene buen servicio. –Alexis mira a su amigo y sonríe, pero después dice.

–  Cierto pero ha tenido partidos largos. –Abraham algo molesto le dice.

–  ¡Miriya ganara! –Alexis ríe, diciendo.

–  Cálmate Abraham, sé que ganara, solo te digo lo que se lee en este folleto. –Abraham se queda en silencio pero el temblor de su rodilla lo acusa y Alexis que ya se había fijado y en eso le pregunta.

–  ¿Viste a Dulce? –Su amigo le contesta.

–  No, no la vi en el desayuno ¿y tú? –Alexis le contesta que no, a lo que Abraham al ver la cara de preocupación le dice.

–  Quizás esta nerviosa y desayuno en el estadio mismo.

–  ¿Se puede hacer eso? –Abraham le contesta.

–  Pues claro que sí. Aunque no es como desayunar en el castillo pero es similar.

–  ¿Y cómo lo sabes? –Abraham sonríe y luego contesta.

–  Bueno una vez en las etapas de eliminación, Miriya estaba muy nerviosa porque se iba a enfrentar a alguien de tercer año y quiso relajarse practicando en el estadio muy temprano, antes de que comenzara el partido o la gente viniera al estadio. Me llevo consigo, practique con ella y luego en el mismo estadio desayunamos. –Alexis levanto las cejas en señal de sorprenderse por lo oído de su amigo y luego dice.

–  Bueno aprovechare de ir al baño mientras esto todavía no comienza ¿Quieres algo? –Abraham le contesta.

–  Un té, hace algo de frio y la sensación de calor del chocolate caliente que tome en el desayuno ya se le acabo el efecto. ¿Por favor? –Alexis ríe diciendo.

–  Claro, capaz que si no lo traigo te exaltes ja, ja, ja. –Alexis se retira hacia los pasillos, busca el baño primero, y ve, en eso, una flecha colgando del techo que dice “baños de hombres”. Va a esa dirección, estaba por llegar cuando una voz femenina lo detiene diciendo.

–  ¿Eres tu Alexis? –Alexis se da vuelta y ve que es María Fernanda. Alexis le sorprendió verla ya que se supone que debiera estar concentrándose en el camarín. Esta como si le leyera la mente le dice.

–  Sé que te extraña verme pero me mando la enfermera a buscarte. –Alexis le extraño eso, y le pregunto.

–  ¿A mí? ¿Por qué? –María Fernanda le contesta.

–  Es sobre Dulce. –Al escuchar el nombre de su amiga este se percata que era algo no muy bueno y de inmediato le pide que la lleve a la enfermería pero la chica le dice.

–  No vamos para allá, sígueme por favor. –Los dos van corriendo y como se dio cuenta, no fueron para nada hacia la enfermería sino que…

–  ¿A los camarines? –Llegaron a la puerta del camarín 3, ahí María Fernanda golpeo la puerta y, luego de unos segundos, se abre. Ahí ve que es Francis quien abre la puerta y esta al verlo le dice.

–  Señor Astorga, lo estábamos esperando. –El par de chicos entra y Alexis se sorprende al ver a Dulce acostada, vestida con una mini blanca y una blusa roja sin mangas, en la única camilla del camarín delirando de fiebre y con un paño húmedo en la frente. En eso escucha a su tía que le dice.

–  Te llame para que la cuides.

–  ¿Qué la cuide? –Francis le contesta.

–  Claro señor, para que la cuides. –Alexis algo fuera de si hace una pregunta, algo obvia.

–  ¿Y Doña Ana no puede? –Francis mira al chico en forma seria y este solo atina a decir.

–  Está bien me quedare a cuidarla ¿Pero qué harán ustedes? –Francis contesta.

–  Yo tengo que ir a la tribuna para informar a Ludendorff y Ana tiene otras personas que atender en la enfermería

–  Alexis solo tienes que humedecerle el paño que tiene en la frente. No la tapes ni nada, ya le una medicina para la fiebre debe bajarle en unos minutos más.

–  ¿Y si no lo hace? –Pregunto Alexis ante lo dicho por lo que Francis contesta.

–  Yo vendré después, además si la fiebre no baja de aquí a 15 minutos antes de que comience la segunda final. Dulce será dada de baja del torneo. –En eso Dulce a duras pena dice.

–  No, no, no… no pueden hacerme eso. –Alexis mira a Dulce que se saca el paño frio de la frente y trata de sentarse pero Francis rápidamente la calma diciendo.

–  Ayanami tienes tiempo para recuperarte así que descansa y solo espera. –Dulce se recuesta nuevamente y Alexis le coloca el paño frio en la frente nuevamente. Francis se va con María Fernanda que, pese a que no quería dejar sola a Dulce pero Francis insistió por lo cual se fue de mala gana. Después se va Doña Ana quedando ambos chicos solos. Alexis miraba hacia la pared evitando mirar a Dulce que no decía nada, esta empuñaba las manos en señal de desesperación y su amigo al verle las manos le dice.

–  Quédate tranquila, tienes que descansar no sacas nada con desesperarte Dulce. –Esta le contesta.

–  Lo sé pero me da rabia, justo me tenía que pasar esto. No me he enfermado en todo el año. –Alexis comienza a escuchar sollozos, ve como unas lágrimas caen por sus mejillas y la voz de su amiga que se descontrola a veces como si soportara el llanto. –Y ahora todo se me viene de una… mi intoxicación, esta fiebre estúpida… que no me deja en paz, me siento sobrepasada… y tonta por estar llorando frente a ti. –Alexis atina solo a tomarle la mano y tranquilizarla, diciendo.

–  Estoy contigo, ahora descansa, porque yo estoy aquí para hacerte compañía y no te dejare sola hasta que te mejores. –Dulce le toma la mano y se queda en silencio al igual que el chico que solo siente como ya había comenzado el partido de Miriya aunque en eso recordó algo. – Espero que Abraham no esté esperando el té que me pidió.

CONTINUARÁ…

El Capítulo 27 “Semifinales” continuará (2) en la semana del 20 de junio del 2016.

Dejen sus comentarios y sugerencias. Esto sera de gran ayuda para mejorar el blog. No sean tímidos. Espero les guste la lectura escrita por mi. Sigan leyendo e invitando a quienes les guste una buena lectura.

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Crónicas del Magín Milenario episodio 1 (c)
2014

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39-Continuación Capítulo 27 “Semifinales”

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