Revista Literatura

45-Continuación Capítulo 30 “Separación”

Publicado el 25 julio 2016 por Cronicasdmm

–  ¿Esto está muy silencioso no lo crees? –Este le contesta.

–  Bastante, y eso me preocupa. –Miriya pregunta.

–  ¿Estamos en los calabozos? –Amy le contesta.

–  No lo creo, esto no parece ser los calabozos.

–  ¿Y si este es el pasillo de entrada a los calabozos? –Pregunto Abraham a lo que Alexis al ver algo le contesta.

–  Quizás pero no lo creo… Miren chicos. –El grupo ve hacia delante y ven que el camino que siguen se divide en dos y antes de elegir se reúnen para decidir su accionar. Amy es quien alza su voz primero, diciendo.

–  Pienso que debemos seguir derecho, quizás el otro camino solo nos haga perdernos. –Abraham le pregunta.

–  ¿Y si te equivocas? –Amy le contesta un poco molesta.

–  Entonces si es así, mejor nos dividimos. –Miriya le dice.

–  No creo que sea la mejor solución, debemos estar juntos. –Alexis dice.

–  No lo creo, es mejor que nos dividamos y abordemos los dos caminos por igual. Si nos perdemos nos irán a buscar.

–  ¿Y cómo lo sabes, sabelotodo? –Dijo de mala manera Gustav a lo que Alexis le contesta.

–  Porque si no regresamos en media hora más, Dulce buscara al director o a la profesora Francis para que nos busquen.

–  En ese caso entonces nos dividimos. –Dijo Amy a lo que Abraham la acompaño diciendo.

–  Pero entonces, ¿Quién con quién? –Amy le contesta.

–  Miriya con Abraham y Gustav. Alexis y yo. –Miriya le pregunta el por qué de su elección a lo que la chica contesta.

–  Es más equilibrado, tú te entiendes mejor con Abraham y yo me entiendo mejor con Alexis y Gustav tiene problemas de carácter con Alexis así que mejor se va con ustedes. –Los chicos se vieron entre si y después Miriya dice.

–  Uhm tienes razón, entonces de ahí nos vemos. –Miriya le da la esfera de luz a Amy y luego ella misma crea una con su varita. Mientras que Abraham mete su mano en el bolsillo derecho y luego la saca para después despedirse de Alexis con un buen apretón de manos. Después Alexis se mete la mano izquierda, con la que se despidió de su amigo, en el bolsillo izquierdo. En tanto, Abraham recibe la esfera de luz de parte de Miriya y luego ella y él junto con Gustav van por el camino que esta a la izquierda. En tanto Alexis mira a Amy y le dice.

–  Te las traes. –Amy solo sonríe mientras miraba la esfera que tenía en su mano derecha y luego siguen caminando por el camino contrario, pasaron unos minutos cuando Alexis le pregunta.

–  ¿Así que nos llevamos bien? –Amy se ríe diciendo.

–  Era lo mejor que se me ocurrió Alexis, ¿O querías verle la cara a Gustav?

–  Cierto, no me cae bien.

–  A mí tampoco me cae bien ese niño mimado. Además ya no siento esa tensión entre ustedes. –Siguieron caminando pero en silencio. Alexis pensaba que para donde el camino los haría llegar y que pasaría con los demás y en eso mira a su lado y ve que Amy no está. Mira hacia atrás y la ve detenida y la esfera de luz en el piso.

–  ¿Qué pasa Amy? –Le pregunta mientras se dirige hacia ella y esta lo mira con una mirada de preocupación para después preguntar.

–  ¿Estaremos bien? Estoy asustada. –Alexis se da cuenta que la verdadera razón de que ahora estén junto es que ella no quería demostrar sus verdaderos sentimientos a los otros chicos y es por eso que solo atina a abrazarla y decirle.

–  Estaremos bien, me preocupare de ello.

Capítulo 31

“Desengaños”

El grupo compuesto por Miriya, Abraham y Gustav seguían caminando por ese pasillo lleno de telarañas y polvo, cubierto por una densa oscuridad que solo era iluminado por una esfera de luz blanca que llevaba Abraham. Habían pasado 5 minutos desde que se separaron de Amy y Alexis y pareciera que el pasillo por donde estaban no tenía fin hasta que…

–  Parece que hay algo más adelante parece una entrada. –Dijo Miriya que al acercarse más ven una especie de entrada que media unos 3 metros de ancho por dos metros de alto y en cuyos marcos tenía una escritura que Gustav al verlos les dice.

–  Es escritura mágica muy antigua.

–  ¿Y cómo lo sabes? – Le pregunta Abraham a lo que Gustav le contesta con algo de desgano.

–  Cualquiera que estudie Historia de la Magia sabría de estas escrituras.

–  ¿Y qué quieren decir? –Pregunto Miriya en una postura seria que hizo que Gustav respondiera con la misma seriedad.

–  Esto es un lenguaje que solo magos supremos pueden leer, es magia muy antigua. La verdad es que quien haya hecho esto debe poseer una magia muy poderosa. –Miriya miraba las escrituras que eres muy de un formato casi circular pero muy hermosas luego ve la entrada donde la oscuridad reinaba y luego deciden seguir con Miriya a la cabeza del grupo. Cuando entraron fueron recibido por un frio ambiente y un silencio denso y gélido que los hizo ponerse nerviosos.

–  Siento algo que no está bien, no lo sé pero lo siento en mi cuerpo. –Abraham, que llevaba la esfera se fue por las orillas y vio una especie de canal de piedra que estaba a los pies de las murallas de roca. Gustav que lo seguía al ver esos canales le dice.

–  Quizás sea para…–Abraham lo mira y le pregunta para que a lo que Gustav sin contestar, indica con la mano y dice.

–  “Fuore”–De su mano salen chispazos que al caer al canal este se enciende con un fuego que rápidamente va abarcando todo el canal que estaba en las 4 paredes y que rápidamente ilumina todo el lugar hasta que dicho canal sube por las paredes centrales hasta el techo hasta tocar el centro y encender un semicírculo gigante de luz que se llena de fuego, mostrando así el lugar donde estaban. Donde ellos están es una gran cámara donde al otro extremo habían dos grandes pilares de estilo románico los cuales se repetían pero a pedazos en algunas zonas de la cámara. Las paredes rocosas estaban bordadas completamente de escrituras similares a los que habían en la puerta. El techo era de roca solida pero tallada en grandes bloques con semicírculo de fuego en su centro. Los 3 chicos estaban sorprendidos pero temerosos, en especial Gustav que dice mientras recorre con sus ojos la asombrosa sala.

 –  Chicos tengo mala espina de esto. –Miriya le dice lo mismo, esta recorre el piso que a diferencia del pasillo por donde entraron, estaba bien cuidado pero no entendía algo.

–  ¿Es cosa mía o esto parece un gran cuadrilátero? –El piso en si parecía un gran cuadrilátero, los limites eran las mismas paredes pero había una particularidad. A diferencia del pasillo, todo estaba bien cuidado, no había ni un rastro de polvo ni telarañas pero lo que más le extrañaba a Miriya, eran muchas zonas que estaban hacia el centro poseían pequeñísimos huecos cuadrados. Además de los muchos pilares destrozados que habían en el lugar pero que adornaban o, quizás, servían de protección. Miriya se acercó a una de las tantas zonas huecas y los toca con la mano, al hacerlo, siente una pequeñísima brisa saliendo de ellos solo percibida por su piel.

–  Parece que hay algo debajo de esto. –Abraham, en tanto, miraba con sorpresa los detalles de la gran cámara.

–  Esto debe medir la mitad de una cancha de futbol. –Gustav le dice.

–  ¿La mitad? Eso es poco, tengo un pésimo presentimiento. –En eso una voz extraña se hace escuchar.

–  Los estaba esperando. –De inmediato se escucha un fuerte sonido como si algo hubiera caído abruptamente. Miriya ve que la puerta por donde habían ingresado es cerrada por un bloque de piedra que salió del fondo del piso. Los 3 se colocan en guardia juntado solo sus espaldas y sacando sus varitas pero el dueño de la voz no aparecía.

–  ¿Quién está ahí? –Pregunto una asustada Miriya. En tanto Gustav que temblaba decía.

–  Esto es una trampa, vamos a morir, vamos a morir. –Abraham le hace callar y luego grita, diciendo.

–  ¡APARECE QUIEN QUIERA QUE SEAS! –La voz de Abraham se hizo escuchar como un eco por el gran lugar hasta que, luego de un minuto intenso y eterno, un ser sale detrás de esos pilares con estilo románicos.

–  Está bien, está bien, no tienes para que gritar. –Miriya y los dos chicos ven que el tipo era de una estatura mediana, un poco más alto que ellos y vestía un traje negro de combate, muy cómodo, parecido a la de un ninja pero en vez de ver su rostro, este llevaba una máscara blanca sin detalle alguno y que además le cubría su cabello.

–  ¿Quién eres tú? –Pregunto Miriya y el individuo contesta con una voz profunda que al parecer había sido modificada.

–  Nadie importante. –Abraham dice.

–  Tú trataste de matar a nuestro amigo, ¿No es así? –La pregunto de Abraham no fue respondida con la misma rapidez pero después de unos segundos el tipo hablo, diciendo.

–  No fui yo pero… –Ese “pero” fue acompañado de una densa pausa que impaciento a Gustav que le dice a viva voz.

–  ¡¿Pero qué? ¿Qué nos quieres decir?! –Nuevamente pasaron unos segundos hasta que el individuo les dice.

–  Yo seré quien… aquí… acabe con sus… ¡VIDAS! –Y sin más que decir, con gran rapidez extiende su mano derecha y dice.

–  ¡FORVEC! –Los 3 chicos se tiran hacia los lados protegiéndose detrás de los restos de pilares románicos, pudiendo evadir el gran ataque en forma de rayo amarillo que choca con la muralla en donde solo se escucha el golpe pero ni un daño. Gustav, bien resguardado, al ver eso, asombrado, dice.

–  ¿Hechizo de absorción? –Miriya que estaba cerca de él le pregunta.

–  ¿Cómo que hechizo de absorción? –Gustav le dice.

–  Es un hechizo para absorber ataques. Las escrituras que están en las paredes, al parecer, son hechizos de absorción poderosas para absorber diferentes ataques mágicos. –Abraham le pregunta.

–  ¿Solo ataques mágicos? –Gustav le contesta.

–  Ataques mágicos y magines, si esta sala es así, estoy seguro que. –Miriya le pregunta de que, a lo que Gustav contesta.

–  Esta sala no se destruirá ni con el hechizo más poderoso. –Miriya entonces extrañamente sonríe para después decir.

–  Entonces no me voy a medir con este bastardo. –Luego mira a Abraham quien ve la esfera de luz a su lado y luego solo atina a sonreírle a Miriya. Luego, esta, mira a Gustav que solo se le queda viendo mientras en eso se escucha la voz del tipo diciendo.

–  Vaya pensé que los alumnos de primer año eran más fuertes. –En eso la voz de Miriya resuena por la sala diciendo.

–  Comete esto maldito estúpido. –Y de la nada aparece la esfera de luz que se acerca rápidamente al tipo y este por poco lo evade pero no así…

–  ¡AVENTIN! –Por poco el tipo se protege con sus brazos del ataque color azulado hecho por Miriya pero la fuerza del ataque lo hace retroceder unos pasos, y al momento de abrir los ojos solo ve la suela de un zapato que choca con sus brazos y retrocede otros pasos. Luego siente patadas en los costados de los hombros y de improviso ve un puño entrando por debajo de su defensa pero ágilmente lo evade echando su cuerpo hacia atrás dejando pasar de largo a su adversario. Luego pega un salto hacia atrás alejándose de la persona que era nada menos que…

–  “¿Miriya?”. –Pensó el tipo que estaba sorprendido por la agilidad y la ferocidad para atacar de la chica. Y Miriya, en una pose muy ofensiva y con mirada intensa, le dice.

–  Si creíste que éramos pan comido, te equivocaste. –Luego sorpresivamente, atrás de ella, aparece Abraham, que paso por arriba de ella y luego de tocar piso, con velocidad, ataca al tipo con variados golpes de puño con giros pero la persona los evade de una manera magistral y de pronto en uno de los tantos giros, Abraham es golpeado en la zona baja del estómago y lanzado varios pasos hacia atrás. Miriya ve a Abraham caer al piso a un metro al lado de ella y en eso, ella siente una fuerte patada en el pecho que la envía violentamente muchos metros hacia atrás para no volverse a poner de pie. Abraham, en tanto, se pone de pie y vuelve atacar pero el tipo evade cada uno de sus ataques pero en eso, escucha la voz de Gustav que resuena en toda la sala diciendo.

–  ¡ABRAHAM MUEVETE! –Rápidamente y con habilidad Abraham se apoya con los pies en uno de los brazos de su enemigo y pega un salto hacia atrás. El tipo enmascarado queda sin defensa con lo hecho por Abraham y solo atina a ver a Gustav quien muy desafiante estira su mano derecha hacia el frente y dice a viva voz.

–  “RIZAN SIEN” –De la yema de sus dedos salen chispas de fuego que luego, en centésimas de segundos, forman un rayo de fuego que a una gran velocidad chocan en pleno pecho del tipo, levantándolo y llevarlo a chocar con violencia hacia la pared del otro extremo de la cámara a metros del piso y luego dejarlo caer al suelo. Abraham al ver esto ve a Gustav que parecía estar muy agitado después del ataque que hizo, corre hacia él y le pregunta si está bien y Gustav sin verlo le dice.

–  Anda… a… ver… a Miriya. –Abraham la va a ver y ve que esta sangraba de la nariz y la boca y que estaba inconsciente.

–  Un solo golpe ¿Y ya te dejo sangrando? –Gustav le dice.

–  Ese golpe fue mucho más fuerte que el que te dio a ti. –En eso se escucha una voz que dice.

–  Tienes razón y tu golpe, chico, realmente me ha dolido. –Gustav sonríe mientras ve como el tipo con su ropa en la zona del pecho rasgada, el tipo camina hacia él. Luego, Gustav sin quitarle la vista al enemigo, le dice a Abraham.

–  Cuida de ella. –Abraham solo lo mira y luego ve como Gustav le dice al enemigo. –Ahora veras que lo que se te viene ahora te dolerá aún más. –Y sin más, corre a toda velocidad hacia el tipo que también hace lo mismo y antes que chocaran, Gustav salta pasando por arriba de su adversario y al pisar tierra se da vuelta y le hace una patada deslizante, el tipo enmascarado salta evadiéndola y luego, harto seguido, ataca a Gustav con varias patadas de gancho al cuello pero el chico con mucha habilidad los evade uno por uno con el antebrazo o evadiéndolas con el cuerpo, luego pega un salto y se lanza sobre el tipo enmascarado con una patada de gancho de medio giro pero el tipo la evade con gran fuerza haciendo que Gustav quedara descubierto y luego aprovechando eso, le pega dos golpes en el abdomen pero Gustav de la nada hace una patada de media luna y le pega con ambos pies en toda la zona del mentón, pero ágilmente el enmascarado hace una pirueta en el aire y queda de pie aunque una parte de su máscara se cae a pedazos dejando ver algo que a Gustav lo deja impresionado.

–  ¡ERES TÚ!

En tanto a una mediana distancia de ellos, estaban Amy y Alexis que aún seguían caminando. Un tanto aburridos porque habían pasado muchos minutos y aún nada pero de pronto comenzaron a sentir una leve brisa que fue aumentando más a cada paso que daban hasta que repentinamente se encontraron con la poca visión que tenían, un salón circular de inmenso y sus paredes con escritos muy raros y antiguos.

–  ¿Y esto que será? –Se preguntó Amy a lo que Alexis con un dedo en su boca pensaba y pensaba hasta que le responde a Amy.

–  No tengo la menor idea. –Amy queda mirándolo en forma despectiva pero en eso al otro extremo aparece una llamarada que va recorriendo todo la cámara, rodeando a los dos chicos y pudiendo apreciar mejor la inmensidad del salón en el que estaban. Las paredes cubiertas por unos extraños signos, un piso de baldosas de piedra tallada y en algunas zonas con rocas grandes y al otro extremo dos grandes pilares estilo románicos que, al parecer, indicaban la salida. Para Alexis ya con el salón bien iluminado algo le decía que estaban en una especie de cuadrilátero circular, uno bien gigantesco. En eso Amy le llama la atención algunas baldosas que eran como rejillas por presentar cientos de aberturas.

–  Parecen rejillas. –Decía, pero para Alexis todo le estaba dando una mala sensación.

–  Mejor sigamos caminando. –Le dijo a Amy y esta acepto y así siguieron caminando pero al momento de llegar al centro de la cámara, un individuo sale detrás de unos de los pilares. El tipo vestía de negro y portaba una máscara blanca. Alexis sintió de inmediato un aura muy conocida que lo hizo sonreír levemente pero para Amy esto la asustaba. En tanto el tipo los saluda con una voz, al parecer, modificada con un hechizo y les dice.

–  Bienvenidos a su tumba. –Amy se puso en guardia no así Alexis que solo sonríe complaciente.

Mientras tanto, en el patio de Rosswood, estaban Nicolás, John y Dulce, esta última sentada en el suelo junto a Jorge que seguía inconsciente. Dulce se tocaba su hombro, al parecer la herida dejo de sangrar.

–  ¿Crees que estarán bien? –Pregunto Nicolás a lo que Dulce un tanto preocupada le contesta.

–  Realmente no lo sé. John… ¡John! –Este despierta de su letargo y mira a Dulce quien le pregunta la hora y este contesta.

–  Son las nueve de la noche. –Dulce mira el cuerpo tendido de Jorge y luego dice.

–  Ya han pasado 30 minutos desde que se fueron. Hay que llamar a la profesora Francis.

–  Yo voy. –Dijo Nicolás a lo que Dulce accede y John le dice.

–  Cuídate Nico, ¿vale? –El chico le muestra una sonrisa y le dice.

–  No te preocupes no me pasara nada. –Nicolás se va dejando atrás a los 3 chicos. John lo ve irse mientras sostiene su varita que tiene en su mano derecha que esta al mismo nivel que su pierna derecha.

–  ¿Crees que regresaran? –Pregunto John a lo que Dulce le dice.

–  No lo sé pero me preocupan como me preocupa Jorge.

–  ¿Tú hombro como esta? –Dulce se toca su hombro herido y le contesta.

–  No puedo moverlo, se me adormeció. –John le contesta.

–  Qué lástima. –Dulce se da vuelta y solo ve un as de luz.

En la cámara circular. Amy veía a su amigo que sonreía ante las palabras del tipo enmascarado. No entendía el motivo de su sonrisa pero sabía que Alexis no sonreía porque si no más. El enmascarado por su movimiento de cabeza también le extrañaba ese extraño comportamiento y le pregunta.

–  ¿De qué te ríes? –Alexis le contesta.

–  Me rio de que ocultes tu rostro aun cuando sé quién eres. –El enmascarado le pregunta.

–  ¿Si estás tan seguro porque no dice quién soy? –Alexis le contesta.

–  Pues eres…–Amy solo ve como Alexis mueve sus labios diciendo el nombre de la persona. Al escucharlo su mirada toma un tono de inmensa sorpresa y ve al enmascarado que al parecer no le queda otra que acercar su mano a la máscara y lentamente se la saca y mientras Alexis veía tal acción su mirada sonriente y de mucha seguridad cambia lentamente a una confusión terrible que lo hace decir.

–  ¡No puede ser! –Amy tampoco podía creer a quien estaba frente a sus ojos y más cuando le dice a Alexis.

–  ¿Pero cómo? –En tanto en otro lado, un cuerpo cae con rudeza al suelo. Dulce no podía creer ver como el cuerpo de John, quien estuvo a punto de atacarla, cae estrepitosamente al suelo y luego ve a Nicolás con su mano extendida quien muy nervioso corre hacia Dulce y le pregunta con una voz entre nerviosa y con tartamudeo.

–  ¿Estás bien? –Dulce se acerca al cuerpo inconsciente de John y le contesta mientras le toma el pulso.

–  Me sorprendes Nicolás, no pensé que lo hicieras bien. –Nicolás le agradece aunque Dulce no la veía, es más veía a John y mientras lo hace, dice.

–  Alexis tenía sospechas que John y Jorge estuvieran metidos en esto. –Nicolás le pregunta ¿Cómo lo sabía? a lo que Dulce le contesta pero sin verlo a la cara.

–  Por las diferencias de mi herida con las de Jorge. El pecho de Jorge no fue atravesado por el ataque pero mi hombro sí. Sentí que había algo raro. Alexis me dijo en una oportunidad que Jorge estaba cambiado desde que regresamos de vacaciones y como John es su mejor amigo pensó que también estaba metido. –Dulce estaba como complacida por haber elegido bien su táctica pero de repente siente algo frio y de madera en su sien más una presión intensa y eso la deja impactada. Trata de mirar para el lado y solo escucha la voz de Nicolás que con un tono frio, le dice.

–  ¿Y si te digo que estabas equivocada?

En la cámara circular Alexis veía el rostro de su enemigo pero no comprendía en que se había equivocado y una incomodidad terrible lo invadió.

–  No puedes ser tú… Nicolás. –El tipo era nada menos que Nicolás quien deja su máscara en el suelo diciendo.

–  Comprendo tu respuesta. Siempre sospechaste de Jorge ¿No es así? –Alexis no sabía que contestar y Amy le dice.

–  Pero tú no tienes ese porte. ¿Por qué estás más alto que el Nicolás que dejamos atrás? ¿No será que en eso también nos has engañado? –Nicolás ríe a carcajadas por lo que dice Amy y luego le dice.

–  Esto es solo un hechizo para parecer de una estatura más alta. Sabía que sospechabas de Jorge, además ver tu cara de sorpresa… –De improviso su estatura se reduce y termina de hablar. –… Es satisfactoria.

–  ¿Entonces fuiste tú el responsable de haber atacado nuestros dormitorios y aprovechando eso robaste la poción “La creación de Orión”? –Nicolás le contesta.

–  Y no te equivocas, fui yo. Fue la única forma de estar en dos lugares al mismo tiempo. Además quien iba a sospechar de un niño inocente como mi persona.

–  Si tú estás aquí entonces… Dulce. –Dijo con temor Amy a lo que Nicolás se pone pensativo y dice.

–  Mmmm… jajajaja… Dulce… Tendrán que rescatarla. Ella está pasando por estas puertas. La tengo apresada, la muy estúpida no pudo conmigo. –Alexis no creía tales palabras, es más solo limito a reírse para luego decir.

–  Tú nunca podrías ganarle a Dulce.

–  ¿Lo dices porque una persona como tú no puede ganarle? –Alexis empuña sus manos en señal de enfado y Nicolás al ver esto le dice. –Tu Alexis, siempre me subestimaste pero ahora… –Nicolás se enseria a tal punto que muestra un rostro frio y despiadado para finalmente decir. –Te demostrare que no lo soy. –Alexis muy serio le replica diciendo.

–  Entonces pruébalo. –Y sin más, él como Nicolás corren a enfrentarse quedando Amy como una asustada observadora.

En el patio Rosswood, Dulce le pregunta al otro Nicolás quien todavía le tenía la varita contra su sien.

–  ¿Qué pasa contigo Nicolás? –Este le contesta de manera muy burlesca.

–  No pasa nada Dulce, solo que vas a morir. –La chica veía con temor como Nicolás tenía un rostro malvado y como su varita no dejaba de amenazarla pero de pronto este comienza hablar mirando al cielo.

–  Ayyy Alexis crees que te me vas a escapar pero no lo harás, morirás y mi venganza estará cumplida. –Dulce no entendía tales palabras y solo atina a pensar en la palabra que más le llamo la atención “venganza”. Aprovechando que Nicolás le hablaba al viento. En segundos usa la técnica Gitsu An y ve el aura de Nicolás y ve con sorpresa algo que no concordaba. Después con mucho cuidado mete su mano izquierda en su bolsillo, ahí encuentra un papel, quizás la de un envoltorio de dulce y con extremo cuidado lo hace bolita para después concentrarse e imbuirlo con algo de su aura usando Zetso, luego saca con cuidado la bola de papel de su bolsillo y todo lo hace sin quitarle la vista a Nicolás que seguía hablando solo.

–  ¡Ey Nicolás! –Le grita al chico quien lo mira y le dice.

–  Qué pas… –Dulce le lanza con violencia el papel usando sus dedos y le llega con fuerza a Nicolás justo en la frente derribándolo. Luego con suma rapidez se pone de pie y corre hacia el chico y le toma el pulso y cuando ve que tiene pulso, dice.

–  Vaya funciono, esta inconsciente… Nicolás… Nicolás eso te pasa porque hablar de más. –Luego ve a los 3 chicos que están fuera de acción y no puede creer lo que está pasando por lo cual decide buscar a la única persona que podría ayudarlos y se presta a ir cuando siente algo que la hace darse vuelta y se sorprende al ver a tal persona y solo atina a decir. – ¿Qué demonios? –Un rayo sale de la nada pero Dulce lo evade y luego ve al causante que era nada menos que…

–  John. –Dijo Gustav al ver el rostro de esa persona y se llena de dudas que lo hacen retroceder diciendo.

–  Pero tú estás en el patio, ¿Cómo puedes estar en ambos lugares? –Abraham que tampoco lo podía creer le contesta a Gustav.

–  La poción “La creación de Orión”, entonces… ¡Maldito! Tú fuiste el responsable del desorden en el dormitorio esa vez. Nos engañaste. –John le dice que se calle para después decir.

–  Ese fue Nicolás, no fui yo. –Abraham como Gustav dijeron sorprendido el nombre aludido por John y no lo podían creer, estaban estupefactos tanto como lo estaba Dulce que tampoco podía creer ver a John como si nada, de pie ante ella.

–  ¿Tú también estas metido en esto… John? –El otro John le contesta.

–  Así es… jajajajaja… Nicolás hizo un buen trabajo conmigo pero no pensé que caería tan fácil contigo. –Dulce se enseria y dice.

–  ¿Entonces Jorge también está con ustedes? –John le contesta.

–  No, si así fuera el muy estúpido no hubiera dejado que Alexis fuera golpeado. –Dulce no dudo que lo dicho por John fue una buena explicación, entonces pregunta.

–  ¿Por qué haces esto? –John le contesta pero con una sonrisa malvada.

–  Si quieres que te diga la verdad entonces derrótame. –Dulce mira el lugar y le dice.

–  Si peleamos haremos mucho ruido y finalmente la profesora Francis nos ayudara, perdiendo ustedes. –John solo ríe ante lo dicho por la chica para después decirle.

–  Estamos rodeados por un campo invisible, quien quiera que esté fuera de la zona del patio solo vera… que nada sucede y no escuchara nada más que silencio. –Dulce no podía creerlo por eso nadie venia pese a los ataques que ya se habían hecho y en eso escucha a John que le dice.

–  Esto es un hechizo que deje yo antes de venir a este lugar y Nicolás lo fortaleció cuando se fue supuestamente a llamar a tu profesora Francis, por lo cual estamos siendo rodeados por una burbuja. Un hechizo que solo se puede aprender en 4 años, no tienes escapatoria. –Dulce le recrimina.

–  Pero esos ataques iniciales se deben haber escuchado por lo cual alguien vera que algo raro sucede.

–  ¡ESTUPIDECES TUYAS! Además esos ataques fueron un riesgo pero nadie nos ha escuchado…–Luego de decir eso John saca su varita y amenaza a Dulce diciendo.

–  Es hora de que mueras Dulce Ayanami, será un placer derrotarte.

CONTINUARÁ…

El Capítulo 31 “Desengaños” continuará en la semana del 01 de agosto del 2016.

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Crónicas del Magín Milenario episodio 1 (c)
2014

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