Revista Diario

Amor Eterno

Publicado el 27 diciembre 2013 por Danielabarajas
Mi nombre es Mariana, soy una mujer mayor que conoció el amor donde menos lo esperaba y con quien menos pensaba.Tras mucho buscar, al fin encontré...
Encontré una foto vieja, arrugada y manchada por efecto de antigüedad, no me importó, la foto es una joya.Se trata de la primer foto donde mi esposo y yo, estamos juntos.Era el año de 1950, nos conocimos, éramos jóvenes, teníamos 18 años.¿Yo? Una chica solitaria y muy callada.¿El? El típico abusivo y "mujeriego", pero bien parecido, tenía lo suyo.Al pasar por mi lugar en el aula siempre me veía muy raro, hasta me daba miedo.Y yo, ante el solo podía mostrar indiferencia.El siempre estaba rodeado de chicas, que ahora recuerdo y llamo "zorras" con humor.Y yo, siempre estaba sola, escribiendo sobre mis "crisis emocionales"...Un día, un chico nuevo se presentó en el grupo, iba de intercambio...Bien parecido, alto, ojos azules y hermosos... Todo lo que una mujer quería tener y cuidar con gran empeño, pero a mi, no me producía una sola emoción.El se acercó directo a mi, con la intención de entablar conversación.Comenzamos a charlar, y a los pocos días el se había ganado mi cariño, fue entonces, que me invitó a salir."El bravucón" del aula, nos veía a distancia, con una mirada profunda, como si estuviera molesto por algo.No nos explicábamos porque nos prestaba tanta atención.Seguimos en lo nuestro, íbamos al parque, a tomar café, a caminar por lugares hermosos que yo conocía y que lo lleve a conocer... Todo avanzaba perfecto.El bravucón nos seguía los pasos, me di cuenta en el parque y después en la cafetería, siempre estaba detrás de nosotros.El chico me pidió que fuera su novia, estando en el parque, el bravucón saltó de un arbusto y me llevó del brazo lejos del chico, al que yo ya le tenía un profundo cariño.El, me dijo que no podía aceptar que yo tuviera un novio que no fuera el.Me pareció extraño, nunca habíamos cruzado palabra.Al decirle que no conocía algo sobre el, me comenzó a contar que desde el primer día que entró al aula y me vio ahí sintió cosas extrañas, como si su corazón se acelerara por algo.Que desde ese día dijo que lucharía por mi cariño, cuando menos, pero que luego llegó "ese imbécil" que por cierto, no lo había mencionado pero su nombre es Ernesto y todo se le vino abajo.Nos observaba para ver que tan rápido podíamos avanzar con el asunto.Esa tarde, al ver sus ojos pude darme cuenta que estaba siendo sincero conmigo. Lo he llamado bravucón toda la historia, pero su nombre es Roberto.El punto es, que esa tarde sentí de todo, al ver la sinceridad de Roberto, tenía un lío mental.Me acompañó a casa, se presentó con mis padres y se atrevió a decirles: "Gusto en conocerlos, creo que me verán por aquí bastante seguido".Apenada con mis padres, pero sin olvidar la educación, lo despedí, me dijo: "Te veo mañana en la escuela". Atreviéndose  a darme un beso en la mejilla.Fui a mi recámara, estaba confundida, Ernesto tenía tiempo tratando de lograr algo conmigo, estaba a punto.De pronto llega Roberto y parece cambiarlo todo.¿Qué siento en realidad? ¿Estoy enamorada?¿Ernesto o Roberto?Ernesto llamó a casa y antes de que dijera algo le contesté "hablamos mañana".Después, sonó nuevamente, era...¡Roberto!Decidí atender, y el me dijo: "si llegas a empeñarte en estar con ese idiota competiré con el en lo que sea necesario para demostrarte que soy mejor y que realmente siento algo fuerte por ti".Sonreí emocionada, sin darme cuenta, y le respondí: "hablaremos de eso mañana".Al día siguiente Ernesto me llamó a las 6 am y me dijo que a las 6:30 quería verme en la fuente de la escuela.Pero, Roberto pasó por mi, esa mañana.Al verme llegar con Roberto, Ernesto enfadado se va del lugar.Llego al aula, lo veo sentado en su lugar, realmente enojado, lo llamé a charlar, atendió mi llamado sólo por el morbo de saber que era lo que tenía que decirle pero dijo que realmente sabía que había perdido la "guerra por mi amor".Y así era, realmente Roberto había provocado en mi algo que jamás hubiera imaginado, menos, viniendo de un bravucón.El punto es que le dije que no podía estar con el, que no podría quererlo como se merecía.El era un buen chico y merecía alguien que lo quisiera tanto como el sabe querer .Roberto, me veía de lejos, y al salir del aula me toma del brazo y pregunta: ¿De qué hablabas con el?

Le dije: espera, ha llegado tu turno, tenemos que hablar.El se sentó en la fuente y yo estaba de pie frente a el.Lo siguiente que le dije fue:Le dije a Ernesto que no podíamos seguir con esto, que descubrí que al que quiero es a ti.Pero ojo, deberás dejar tu vida de "mujeriego" porque si no te vas al carajo. ¿Entendido?El, con una gran sonrisa sin dejar de verme, me dice: POR TI, LO QUE SEA.Quiero que te enteres y me creas que esto es real.Comenzamos una relación ese día, frente a la fuente de la escuela, se me "declaró".Nos tomamos esta foto para recordar el día en que descubrimos nuestros sentimientos, aprovechando que había un fotógrafo en el parque, a unos metros de ahí.Nos casamos, tuvimos 5 hijos y los vimos crecer.Fuimos abuelos, ya todos nuestros hijos hicieron su vida.Hoy en día, soy viuda, el murió el año pasado. Me dejó una carta, una que me escribió aquel día que comenzamos el noviazgo y una que escribió días antes de morir.La primera decía:Quiero que sepas que me costó mucho decirte lo que siento, pero se que me habría costado más el hecho de verte con otro de la mano, compartiendo lo que yo moría por compartir contigo.Sabía que el terreno no estaba fácil, ya Ernesto había hecho mucho mérito y tal vez con mi llegada no lograría mucho, por suerte me arriesgué y descubrí que muy en el fondo tu sentías lo mismo por mi, no sabes lo feliz que me hizo saberlo, espero pasar el resto de mi vida contigo, te quiero muchísimo.-Roberto  Y la segunda decía:¡Amor! No sabes lo feliz que me has hecho, he sido el hombre más pleno y alegre de este mundo, a tu lado. Todo empezó de una manera bastante extraña, pero valió la pena cada segundo.En mi vida me había confesado de esa manera ante una mujer.Fuiste la primera y la única por la que sentí algo real.Hemos formado una familia y Ernesto ahora hasta es nuestro amigo.Estoy muy enfermo, siento la muerte cerca, pero se que moriré feliz.No quiero que llores, sólo que recuerdes todo lo que vivimos juntos, cada momento de felicidad desde que decidimos arriesgar todo por esto que era tan improbable.¡TE AMO! Esto será eterno.-RobertoHe de decirles que en realidad Roberto es el amor de mi vida.Lo amo como el primer momento que descubrí lo que era eso.Y ahora hasta mas, aunque físicamente no pueda verlo, hay algo más allá de eso,  el esta conmigo y con toda su familia, me acompaña en cada paso que doy, se que pronto nos volveremos a ver, para seguir armándonos como el primer día, así que, estoy feliz. 

El amor es fuerte, es puro, cuando se encuentra el verdadero, jamás se pierde.

El amor es todo, cree en el, piensa positivo.

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