Arándanos, Manzana, Vino Tinto y Especies para una Salsa Neutral

Arándanos y Manzana en Vino (congelado)

No es nada nuevo que el paladar aprecia los sabores salados y dulces, tanto como la combinación de ambos. Comencé esta receta sin saber en que situación la usaría. Quería simplemente crear un poco de poesía, sin considerar previamente en que forma la recitaría. Para comenzar, probé el dulce con lo dulce.

Esta salsa es bastante intensiva. Se puede decir que es concentrada, siendo que normalmente uso un litro de vino para la mitad de los arándanos que usé esta vez. La intensidad es también debido a las especies usadas. Pero quizá es precisamente esta intensidad lo que facilita usar la salsa con helados, tanto como con carnes de caza.

• un litro de vino tinto
• 500 g arándanos
• tres manzanas Bramley
• dos vainas de cardamomo verde
• 5 clavos de olor
• 5 g de semillas de café (molidas)
• una rama de romero
• 150 g azúcar

Retrospectivamente me alegro que decidí no usar vainilla. Sería ciertamente perfecta en una receta tal, pero su sabor aquí destruiría la neutralidad que le permite ser usada con lo dulce y lo salado. Simplemente se unen todos los ingredientes, hirviéndolos a medio fuego por una dos horas, hasta que el vino se ha reducido lo suficiente. Al enfriarse, se puede hacer un puré y colarlo.

Para la combinación con lo dulce se puede disfrutar con banana y helado de vainilla. En esta ocasión puse un poco en el congelador para poder hacer un rallado de él y rociarlo sobre el helado.

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