Ay de los besos... de lunes. Ellos tan inciertos!!!

Cuando París se despierta...Y tú, no.

Cuando te despiertan besos desde el otro lado del charco... y llevan nombre de Sarco.

Eva....
Nunca te lo dije, pero tus besos de días lunes eran la mejor manera de empezar la semana...
Arrancas telarañas a los árboles, y te pones el casco que Javier viene a meterte en la sesera.
- Venga, sal de ahí ya mismo.
Y  sin pedirte permiso te dice: 
- Ponte el casco, y abrígate bien ese pecho.
- ¿No querías ver el mar?
- Pues eso.
Besos con susto!!

Besos!!!

Poneos los cascos!! 

Nadie sabe de qué mañana estará hecho... mientras nos quede aún aliento.

P.S. Me gustaría tanto rendirme, tirar la toalla.
Pero no me enseñaron a hacerlo. Aunque sé que sí que soy capaz y podría.