Balance mensual nº1: enero 2018

Hace mucho tiempo que vengo enamorado de los balances que hace Miguel Ángel Alonso Pulido en su blog. De hecho, creo que conecté con su tercer o cuarto balance (allá por finales de 2014 o principios de 2015). Me gusta la manera clara que tiene de rendirse cuentas a sí mismo y rendir cuentas a todos los que le siguen. Sin embargo, nunca me pareció buena idea hacer yo mismo un balance.

Hasta hoy.

Por qué me gustan los balances mensuales

La idea me ronda desde hace más de un año, pero mi mente práctica no encontraba utilidad a escribirlos. Ha hecho falta que Carlos Perez Casas y Ana Bolox se sumen a la iniciativa de Miguel Ángel y que me presionen un poco por Twitter para que termine cayendo:

Hazlo aunque creas que es poco. Divídelo como hace @M_A_Alonso Ficción y no ficción. ¿Que tienes más de lo segundo? Ningún problema. El caso es informarte a ti mismo de cómo vas.

— Carlos Pérez Casas (@CarlosP_Casas) February 2, 2018

Pues divídelo en 3 Any problem? Yo llevo enganchada a los de @M_A_Alonso desde el principio y ayer ya visité también el de @CarlosP_Casas. Me ayudan mucho, me animan, me enseñan… Hazlo, David, me encantará leer los tuyos

— Ana Bolox (@ana_bolox) February 2, 2018

Así que le he estado dando vueltas y encuentro muchos puntos positivos en hacer un balance como escritor emprendedor que soy.

Por un lado, y aunque ya tengo la rutina de revisar la evolución que he tenido cada mes, sirve para pararse a reflexionar sobre lo que queríamos hacer, lo que realmente hemos hecho y lo que tendremos que hacer. Es una manera de obligarse a poner blanco sobre negro y a ver lo bien o mal que has cumplido con tus objetivos.

Pero hay más. El hecho de escribirlos de manera pública implica iniciar un contrato no firmado contigo, en el que me comprometo a mostrarte mes tras mes cuánto he avanzado, por qué y en qué cosas se me ha ido la vida. Una entrada al más puro estilo de un diario público para sacarme yo solo las vergüenzas.

Y también sirve para aquellos que, como yo, quieran saber cuánto hacen los escritores que me rodean. ¿Nunca has querido conocer el número de palabras que escribe tu escritor favorito? ¿Los proyectos que tiene en mente? ¿Los motivos por los cuales no termina de sacar esa novela que quieres leer?

Nacen mis balances mensuales

Este es el motivo, por no extenderme mucho más, por el que voy a iniciar una serie de artículos mensuales sobre mi avance, mis proyectos y mis números. Unos posts sencillitos en los que te contaré qué he hecho, por qué lo he hecho y qué espero hacer en el mes que entra.

Espero que los disfrutes tanto como yo disfruto los de mis colegas.

Tengo que decir que, debido a la pluralidad de mi trabajo como escritor y desarrollador web, he dividido este balance en 4 partes:

1. Balance escritor: palabras escritas, textos editados y proyectos.
2. Balance creando contenido: publicaciones en redes sociales y horas de vídeo grabadas.
3. Balance escritor emprendedor: libros y cursos vendidos.
4. Balance de desarrollo: webs desarrolladas y mantenimientos realizados.

1. Balance como escritor

Como tengo a bien utilizar Toggl para medir todo el tiempo que trabajo, sé exactamente cuánto se me ha ido en cada parte. Para los temas de escritura puras han sido 35 horas, un 20% del tiempo total.

Palabras escritas por proyecto

• Mariposas de acero: 14.859 palabras, el 50% de lo que esperaba conseguir.
• Entradas en El Rincón de Cabal: 5.894 palabras repartidas en 4 posts (una media de 1.473 palabras/post).
• Entradas para DavidOlier.com: 4.941 palabras en 3 posts (una media de 1.647 palabras/post).

Hacen un total de 25.694 palabras escritas durante el mes de enero.

Mi objetivo eran 30.000 palabras de ficción y 7.000 palabras en artículos, así que ya ves que he pinchado fuerte en ficción y he superado mi objetivo en no ficción.

Mariposas de acero está a punto de llegar al final, pero todavía me falta el último empujón. Ahora que Xin, mi protagonista, se acerca a resolver sus problemas (¿seguro?), avanzo a trompicones: explosiones de escritura muy fuertes seguidos de periodos de calma. Quiero que todas las piezas encajen, que los términos sean los correctos y que no queden más hilos abiertos de los que ya tenía planeados. Y eso me hace ir más despacio.

En cuanto a los blogs, he conseguido publicar todas las semanas aquí, en El Rincón, y he engordado la lista de tutoriales que publicaré en mi web de desarrollo WordPress para escritores. Ya son 6 los artículos que tengo listos para ver la luz, me faltan 4 más para lanzar el blog :-).

Proyectos editados

También he corregido la última versión del relato Escritor 3.0 (7.300 palabras) que verá la luz junto con los relatos de otros 7 escritores dentro de unos meses en una antología en la que hemos mezclado diferentes géneros con un mismo tema central en común.

Objetivos para febrero

Me gustaría conseguir en febrero:

• Otras 15.000 palabras para Mariposas de Acero. Con eso creo que terminaré el primer borrador (~90.000 palabras).
• Las mismas 5.000 palabras para este blog en otros 4 artículos.
• ¿Podré escribir otras 5.000 palabras para davidolier.com? Es difícil, pero creo que podría conseguirlo.
• Empezar a planificar la segunda parte de Mariposas de Acero.

2. Balance creando contenido

En esta parte se ha ido cerca de un 10% de mi tiempo, unas 17 horas en total.

Además de mi tarea directa escribiendo ficción y artículos, también dedico gran parte de mi tiempo a mantener mis redes sociales alimentadas y a escribir de manera periódica a mis suscriptores. Hay gente que no tiene en cuenta esto a la hora de planificar su mes… pero lo que es a mí me supone un esfuerzo enorme conseguirlo. El tiempo que hay que dedicar a buscar material, a revisar artículos y a programar las redes es… bueno, eso, muy largo.

En estos 31 días, después de la resaca de Navidad, he escrito:

• MailChimp: 8 newsletter para mis diversas listas (el doble de lo que esperaba).
• Twitter: 198 tuits. Casi la cantidad prevista para el mes.
• Facebook: 20 entradas en mi página de Facebook. Muchísimo menos de lo que debería
• Instagram: 3 fotos en Instagram. ¿Adivinas dónde tengo que mejorar?
• He grabado 1h 40m de vídeos de cursos y tutoriales.

He cumplido con mis redes sociales por la mínima y mi objetivo para febrero es seguir igual. Me gustaría aumentar mi regularidad en Instagram, pero no sé si me será posible hacerlo.

Respecto a los vídeos, por fin he terminado el curso de Scrivener 3 y he podido empezar a grabar tutoriales para hacer WordPress fácil para davidolier.com. A ver si consigo mantenerme en febrero.

 3. Balance escritor emprendedor

Libros vendidos

Las ventas de libros se han encogido durante este mes. No sé muy bien si ha sido porque no podían igualar las de diciembre, porque la resaca de Navidad nos ha dejado a todos tiritando o porque la gente ya no lee, pero el caso es que mis ventas de libros han caído en picado. En concreto, he vendido un 50% menos de Memoria selectiva y La imaginación también muerde.

Cursos vendidos

El repunte de haber publicado el curso para aprender a usar Scrivener 3 ha sido muy positivo. La cuesta de enero no se ha notado tanto en este aspecto y he conseguido vender casi un 40% más que el mes pasado (un 20% más sobre la media de 2017).

Sin embargo, las ventas del curso para aprender a escribir ciencia ficción se han estancado. Por suerte en este aspecto, eso supone que se han quedado igual que en diciembre, así que no tengo que lamentar pérdidas :-).

Proyectos adicionales

Estoy montando una plataforma nueva, dentro de un dominio nuevo. Espero poder contaros algo más a lo largo de febrero ;-).

 4. Balance de desarrollo

Y aquí llega la joya de la corona. Con un 63% del tiempo, estas 109 horas de trabajo se llevan la palma con creces.

Webs desarrolladas y mantenimientos hechos

Este mes partió con una premisa muy clara: no aceptar más encargos y centrarme en terminar mis proyectos abiertos. DavidOlier.com es un proyecto muy ambicioso, con muchas partes diferentes, que estoy construyendo desde cero. Eso quiere decir que no basta con instalar una plantilla y ya, sino que estoy programando yo la plantilla desde dentro.

Y no solo la plantilla, sino que también estoy desarrollando plugins específicos para cubrir mis necesidades específicas y las peticiones más recurrentes entre mis clientes escritores.

Eso quiere decir que mis ingresos por desarrollo web este mes han sido de cero, con lo que eso supone para mi economía. Tampoco he aceptado mantener webs nuevas y solo he realizado el mantenimiento de aquellas webs para las que llevo trabajando un tiempo.

Por tanto, el resumen del mes es simple: nada, nothing, nichts, rien…

Estado general

Pero la buena noticia es que davidolier.com está muy avanzada. La estructura tecnológica está montada, los agujeros cubiertos y los planes de contenido están todos listos para ver la luz. Solo me falta dedicar el mes de febrero a generar contenido (y a construir las landing pages que faltan) y todos podrás navegar con libertad por ella.

Proyectos adicionales

Como davidolier.com ya es un hecho, he empezado a remodelar esta web. Dentro de poco (una o dos semanas), podrás ver cómo el aspecto de cabaltc.com da un vuelco de 360º. Bueno, el aspecto quizá no de una vuelta tan grande, pero la mejora del rendimiento va a ser bestial.

¡Basta de plantillas cutres y lentas de ThemeForest!

Y no solo esta web, sino que también he empezado a construir las demos que tendrá davidolier.com para que aquellos que quieran una nueva página web tengan modelos para escoger.

Tengo tantas ganas de terminarlo todo y que lo veas…

Nota: si eres una persona tan purista como yo, te darás cuenta de que los % que te he puesto aquí suman menos del 100%. El resto del tiempo lo he dedicado a preparar el balance del año, planificar, preparar facturas para el asesor… temas muy aburridos de los que ni siquiera voy a hablar aquí.

Resumen

El mes ha sido mediocre en el aspecto literario. He cumplido con los mínimos que me había marcado, lo cual me hace estar muy contento, pero no he conseguido terminar el primer borrador de Mariposas de Acero. Pero oye, para haber dedicado solo un 20% de mi tiempo… no está nada mal.

Lo que sí ha sido muy productivo es el tema de desarrollo. He conseguido terminar de aprender lo que necesitaba para hacer… cualquier cosa en WordPress y me siento capaz de hacer cualquier web, con cualquier cosa rara que se me presente por delante. Pero claro, dedicando un 63% del tiempo a hacer estas cosas… es normal dominarlos a todos tan rápido.

Eso sí, a nivel personal he sacrificado mucho este mes de enero. Casi cada rato libre, cada fin de semana y cada noche lo he dedicado a trabajar, aprender y desarrollar lo que voy a hacer a partir de ahora. Y espero que eso cambie en febrero. ¡Trabajar sin medida no es bueno!

Y estate tranquilo, el siguiente balance no será ni la mitad de largo que este