Revista Diario

CAP1: Un error del destino convertido en mi mejor acierto

Publicado el 10 noviembre 2017 por Benjamín Amoedo De La Grana
CAP1: Un error del destino convertido en mi mejor aciertoCapítulo 1                                                    (CAPÍTULO ANTERIOR)
Una vez mas no se por donde ni como empezar a escribir, pues me resulta imposible plasmar en un papel todos lo que mi alma siente en estos momentos, se que volveré a ser muy confuso por que todo lo que voy a contar es parte de una historia interminable que nace en el pasado, pero bueno una vez mas escribiré para desahogar a mi corazón, para tratar de plasmar en un papel de forma vaga y paupérrima lo que mi alma grita pero mi cuerpo es incapaz de trasformar en palabras, tan solo en un ensordecedor grito sordo que llena las cuatro paredes de mi Habitación, retumbando sin clemencia, acribillando mi piel de dolor sin piedad, todas esas cosas que no digo pero siento mientras poco a poco me muero por dentro.
Después de un verano terriblemente duro en el que tuve que entrenar sin descanso para tratar de recuperarme de todas esas lesiones que mi cuerpo arrastra durante mas de diez años (Mas aqui). Como ya dije mas de una vez esto es un sacrificio inmenso al que estoy acostumbrado, he aprendido a vivir y a disfrutar de ello de alguna manera, es gratificante ver como te superas día a día, como las metas que te marcas se quedan poco a poco atrás, te sientes mas fuerte, mas vivo, mejor.
Mas adelante apareció en mi vida una chica que pareció llenarlo todo (MAS AQUI), que de una forma mágica aporto cosas a mi vida que creía olvidadas, abrió de nuevo mi corazón a emociones que hacia mucho tiempo que no sentía, volví a ver en ella a ese alguien especial, pero con el paso del tiempo me di cuenta que tan solo estuve atrapado en una gran mentira por una persona que pedía sinceridad y sentimientos en nuestra relación mientras no paraba de jugar conmigo mintiendo a mis espaldas a las primeras de cambio (LA HISTORIA ENTERA). En fin, todos esos malos recuerdos, ese verano duro, esa esperanza de por fin después de tantos años volver a encontrar el amor se rompió en mil pedazos dejando las grietas de mi corazón demasiado expuestas y cientos de heridas volviendo a sangrar una vez mas. A raíz de todo ese dolor surgió con mas fuerza que nunca tu recuerdo, después de comprobar lo duro y lo cruel que es el amor recordé lo fácil que fue todo contigo y la palabra perfecta que busco es esa, fácil, natural, no solo fuiste mi novia sino también mi mejor amiga todo a la vez, esa persona con la que hablaba de todo a cualquier hora del día, se que nunca jamas hablo de estos temas, ni con mis padres, ni con mis amigos, pero hoy me siento con ganas de escribirlo todo, de contar toda nuestra historia, luego mañana cuando me despierte para ir a la universidad recapacitare a cerca de lo que escribió este benjamín borracho a las tres de la mañana, pero en verdad creo que es lo que mas necesito a estas horas.
Recuerdo como si fuera ayer el día que el destino cogió las riendas de mi vida y te improviso en mi camino, como nos conocimos a partir del error mas maravilloso y perfecto de mi vida, como aquel error fue el mejor de mis aciertos y como los dos sin saber por que de toda la clase decidimos sentarnos el uno al lado del otro, tiempo después me enteraría que yo ni si quiera tenia clase en ese instituto, no lo sabia en aquel entonces y sin saberlo supe que eras la mujer de mi vida, mire esos ojos que ponían celosos al cielo y me perdí en ellos por primera vez y entendí que si el día de mañana fuera a morir estaba convencido que quería hacerlo ahogado en la profundidad y pureza de tu mirada. Siempre tenias una sonrisa para los demás, callada, pero convencida y segura de ti misma, discreta e inteligente, graciosa y algo tímida pero extrovertida y sin miedos cuando conocías un poco mas a la persona, sincera y honesta, amable y educada, cariñosa y tierna, dulce y firme, divertida y vergonzosa, siempre buscando pasar un poco desapercibida a pesar de ser extraordinaria, un conjunto de todo que poco a poco me fue enamorando mas. Ni si quiera tenia ningún tipo de interés por los estudios que estaba cursando, pero como nadie se había percatado de mi error yo seguí acudiendo a la misma clase tres veces por semana única y exclusivamente para verte a ti, al principio trate de engañarme a mi mismo poniendo escusas ridículas para ir a clase, luego fui consciente que nada de lo que rondaba por mi cabeza era cierto, todo aquello de que no estaba tan mal, era entretenido, útil etc era una milonga que me inventaba para no ver la autentica realidad que eresúnica y exclusivamente tu el motivo que me hacia levantarme con mas fuerzas por la mañana, la que ponía una sonrisa en mi boca cuando te veía caminar por los pasillos vacíos de ese instituto un día cualquiera a las siete de la tarde. Las horas parecían segundos, yo me esforcé en aprender algo por lo que no tenia ni el mas mínimo interés solo por que tu eras tremendamente hábil en el tema y como siempre estabas a mi lado resultaste ser mi mejor profesora particular.
Poquito a poco fui siendo consciente que te quería mas y mas y tu también fuiste abriéndote a hablar conmigo, luego sin darnos casi cuenta comenzamos a hablar de lo que fuera a cualquier hora del día, cualquier escusa valía para quedarnos toda la noche en cama atrapados en conversaciones infinitas sin sentido el uno con el otro, a mi en un principio me daba miedo ser demasiado pesado por que por lo general tu tenias una vida increíblemente estable en comparación con el caos que existía en la mía, así que muchas veces mas que conversaciones eran monólogos por mi parte, incluso me sentía mal por que a veces tenia la impresión de que estaba descargando demasiadas cosas sobre ti cuando apenas comenzábamos a conocernos, pero tú ya en los primeros inicios de nuestra relación te mostrabas comprensiva, amable y sincera conmigo contestando que no pasaba nada, que te gustaba escucharme, en aquellas noches nunca te lo dije, pero yo me moría de ganas por escucharte, por oír tu voz en la oscuridad de la noche a través del teléfono e irme a dormir después inmerso en la dulzura de tus palabras para así soñar contigo y que estuvieras de alguna forma a mi lado esa noche y al despertar poder leer tus mensajes de buenos días y tener la sensación de que estabas ahí a mi lado iluminando un nuevo día, dándome esperanzas y fuerzas para levantarme con una inmensa sonrisa en mi cara y ganas de comerme el mundo esperando volverte a ver, volver a perderme en tus ojos, teniendo el alma en vilo cada vez que mi teléfono sonaba esperando que fueras tu, deseando oír tu voz, intentando entender que eran todas esas emociones que sentía por ti y no lograba controlar y que me hacían comportar como un completo estúpido sin sentido ni razón alguna. Tan solo verte y nada mas, dejando que el tiempo se parara y me dejara atrapado para siempre en ese sueño perfecto en el que se convertía mi vida cuando estaba a tu lado.

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas