Abro la mano. Te veo ahí. La cierro. Te estrujo. Te hago cenizas.
Pasa una mariposa.
Revolotea por mi cabeza.
Me distrae.
Se escapa.
Me sacudo las manos.
Basta de este gris
muerte.
El polvo se desparrama
lo miro sobre el piso
asqueada.
No quiero más
(no quiero nada)
no quiero nunca.
La mariposa está posada en el marco de la ventana.
Me acerco
se vuela
la sigo.
Ya salté.