Cuando eres feliz...

Cuando eres feliz, te levantas por la mañana con una sonrisa que ni los truenos ni las lluvias más intensas te pueden borrar.

Cuando eres feliz, la vida te sonríe y con ello el mal tiempo, que lo ves de un modo romántico, desde un lado positivo, ideal.

Cuando eres feliz, no existe el verano caluroso, ni el invierno más frío, todo es intermedio, todo es agradable, perfecto.

Cuando eres feliz, el mal humor y los malos humos se esfuman o se convierten en algo soportable de color rosa, fantástico, inofensivo.

Quien esté enamorado, entenderá que cada día es un día más, juntos, donde ambas sonrisas se enlazan, los besos se enroscan y las miradas se pierden juntas. Lo malo se supera juntos, se agarra a cuatro manos y se lanza lejos, donde no alcanza la vista y no aprisione el corazón.

Quien esté enamorado sabrá que no puede concebir la vida sin ese otro, que se asombra de haber vivido tan lejos de la otra persona, cuando aún no se conocían, sentirá que no ha vivido todo este tiempo, hasta que no lo ha conocido.

Cuando eres feliz, no pasa el tiempo ni las hojas del calendario, el tiempo se detiene, se juega con las manecillas del reloj y se detienen los segundos, los minutos, las horas, congelándolas, deteniéndolas sólo para ellos.

Dedicado a todos los enamorados...no tiene porque ser San Valentín para dedicárselo al amor, ¿no?