De moldes visionarios y de vajillas familiares...

Muchas veces he pasado mis vacaciones familiares en Asturias, para mí, es mi segundo lugar preferido en España después de mi Extremadura, como bien sabéis.
Es algo de dentro que no puedo explicar, igual me iría con nieve y todo, entraría desde León por el "Portu" con sus palos con cinta amarilla para guiar el camino nevado... y llegaría a Pola de Somiedo, y de ahí iría a Santa Eulalia de Oscos, y visitaría la casa natal del Marqués de Sargadelo...
¿Que por qué? Pues porque hace mucho que tenía en mente hacer una entrada con este tema, creo que aún no la he hecho, pero hoy, al ver la entrada de nuestra amiga Tracy me la ha recordado y, he aquí  una historia, bueno, varias historias unidas, en mi vida, por las vajillas...


Comenzamos con la historia de las vajillas que debo pasar algún día a mi hija...

Por un lado, la vajilla familiar, heredé piezas sueltas de mi abuela, son de la Cartuja.

Pero la más arregladita sólo había varias piezas y fueron para mi tía, el modelo es Negro Vistas igual al que yo me compré y  que más adelante pongo, pero ovalado.
Y he heredado completa la de mi madre, también es Pickman, pero nunca la he visto en su catálogo, aunque tiene la marca Pickman, que  no puedo introducirlas en el microondas porque arde el dorado.

Pero la mía, como con 12 años se me antojó blanca con un ribete dorada, mi madre me la compró así y claro, este modelo no es de la Cartuja... Y como siempre rodamos sobre los mismos guijarros... hace un par de años que me compré la vajilla y un juego de té. Cuál elegí, pues la misma que tenía mi abuela (esto es más curioso, porque ella era la suegra de mi madre, ja, ja). Sí, la Negra Vistas en forma Ochavada... es toda una preciosidad...


Y mi Suegra me regaló 3 platitos en tonos verdes, que conjunté encargando una lámpara de un tono parecido por catálogo y, que queda precioso en el ventanal sobre un velador con encimera de mármol que perteneció al Casino de mi pueblo.

Ahora seguimos con la fábrica de dichas vajillas...
Un inglés, Charles Pickman llega a Cádiz, en el año 1822 para comercializar productos de cerámica que fabricaba en Inglaterra y, que vendía en España. Tenían mucha demanda porque al parecer, eran muy refinados. Vajillas, piezas de tocador, etc. Pero, se establece la Ley de Aranceles y, observa que es más rentable establecer la fábrica de loza en España, en concreto, favorecido por la Desamortización de Mendizábal (Propiedades acumuladas por la iglesia son expropiadas y vendidas para salvar el Erario público por el político Mendizábal en 1841) compra el Monasterio cartujo de Santa María de Las Cuevas, pasando a ser conocida como La Cartuja de Sevilla.

En la web de la Casa Pickman destacan los procedimientos que Charles implantó diciendo que son extranjeros, (recuerdo que comienza en 1841, dato que más adelante contrastaremos) y que están alejados de los obradores cerámicos tradicionales de Triana, que usó métodos fabriles novedosos como importación de materias primas extranjeras (creo que el caolín era alemán, pero no estoy segura de este dato) y el empleo intensivo del molde (este dato también quiero destacarlo porque más adelante lo usaremos), también usa maquinaria especializada (brazos mecánicos, prensas de estampación para los decorados, los operarios que realizaban trabajos especializados son ingleses y al parecer la experiencia ceramista de la Casa Pickman).
Le acompañó la suerte pues aportó sus modelos a varias Exposiciones internacionales, tales como las de París (1856, 1867 y 1878), Londres (1862), Oporto (1865), Viena (1872), Sevilla (1858, 1929 y 1949), Barcelona (1888), Bayona (1864), Filadelfia (1876), etc.
Y ahora la otra parte de esta historia, los moldes de esas vajillas...
Hacia 1804 un visionario crea la fábrica de loza por la que será conocido. Había hecho una fortuna comprando aceite en el Sur de España y vendiéndolo en el Norte, este hombre, con el dinero compró un título nobiliario... el marquesado de Sargadelos. El ilustrado Antonio Raimundo Ibánez (nació el 17 de octubre de 1749 (el mismo día y mes que mi querida madre) en Santa Eulalia de Oscos, un pueblecito asturiano  (y murió en Ribadeo en 1809). El marqués se dedicó al transporte de mercancías y construcción de barcos, desde la fábrica de hierro en Sargadelos (Lugo) y la de Orbaizeta (Navarra). Y en 1804 creó la fábrica de loza, cuyos materiales se conservan en Santa Eulalia, en un Museo a él dedicado. Su muerte truncó sus proyectos para crear una fábrica de vidrio, otra de laminación de cobre y otra textil.
Era un hombre emprendedor y lo curioso es que ahora la loza de Sargadelo,  los platos blancos y azules,  es muy distinta a la que observé en su Museo y que procede de sus moldes de 1804...

Lo que me llamó la atención es que los platos que fotografíe en dicho museo son clavados a los de la Casa Pickman que fueron posteriores. Y si no, observarlos...

Mi hija Cari hace algunos añitos...

P.D.: "Dicen que Pickman compró los moldes a Sargadelos, pero entonces  ¡Qué sería del orgullo inglés!"
{¡B U E N A_____S U E R T E!}