Desde aquel día estoy otra vez con Elvira, mi mujer; nunca sospeché que la muerte nos volvería a reunir.
Revista Talentos
De repente abandoné la costumbre de ir al cine, a los bares para ver el fútbol, al dispensario a por recetas, incluso a jugar al chamelo en el hogar del jubilado.
Desde aquel día estoy otra vez con Elvira, mi mujer; nunca sospeché que la muerte nos volvería a reunir.
Desde aquel día estoy otra vez con Elvira, mi mujer; nunca sospeché que la muerte nos volvería a reunir.