Dentro de la boca del lobo

"Bailando salsa, bailando salsa... Bailando toda la noche entera"

El mundo de la noche es una de las cosas que mas me atraen, me encanta ver las estrategias de seducción, las reacciones por parte de ambos sexos, las risas, los comportamientos, la forma de bailar y la de hablar, e incluso el tipo de ropa que suelen llevar las personas… Por eso cuando me ofrecieron el jueves pasado de madrugada trabajar el sábado en una discoteca solo unas horas, me vi tentada a dar una negativa como respuesta, porque imaginaros que si un extraño te ofreciera aquello asegurándote que sería en un lugar de ambiente, solo tuvieras que disfrazarte y sonreír básicamente en la puerta a cambio de dinero… Suena bastante raro, a pesar de que el individuo te dejara sin palabras por su físico, su sonrisa y su forma de hablar. Pero mi lado gatuno respondió por mi y así acabé cerca de las 2 de la mañana en un lugar que nunca había estado rodeada por un coreógrafo, dos gogós y varios camareros, todos eso si con gustos iguales a los míos, es decir… Se sentían atraídos por los hombres.

Tenía curiosidad por estar dentro del ambiente de la noche trabajando, no como clienta, sino como parte de un equipo. Así que me pasé hablando con unos y otros básicamente toda la noche, tanto con las personas que entraban y salían del lugar como mis compañeros por unas horas.

“Los lugares de ambiente”, tienen fama de que a las personas que acuden allí les encanta el sexo, los besos, los roces, el baile, gritar como locos… En otras palabras: “desfasar”, pero es ahí donde siempre respondo a quiénes me lo dicen: “¿y acaso eso no es lo que nos gusta a todos en mayor o menor medida alguna vez en la vida?” Es verdad, conocí a un par de tipos que a parte de borrachos no paraban de tirarle los tejos a uno de los gogos que estuvo bastante tiempo conmigo en la puerta, y aunque razón no le faltaba, no es normal chillar como un poseso y decirle mil veces lo tremendo que está. Él me contestó que estaba acostumbrado a aquello y que al subirse a bailar, muchos pensaban que tenían el derecho de tocarle y acariciarle, por lo que él acababa por pararle los pies aunque a veces llegaba al punto de enfadarse bastante. Pero también conocí a un abogado que era un encanto de persona, se enganchó a mi en la puerta y mas tarde cuando dejé de trabajar en la pista de baile, con quién me reí bastante. A chicos heteros que pensaban que eran gays y me di cuenta que no lo eran, cuando ya entraron a ligar de lleno conmigo, menos mal que en el momento es que andaba agobiada con un tipo que si bien era atractivo, se acercaba demasiado a hablar conmigo… Apareció el coreógrafo, lo cual le hizo irse.

La gente que trabaja allí está tan explotada o más como la mayoría, como me dijo uno de los camareros, el cual no paraba de recoger vasos con el ceño fruncido. También los gogos tienen turnos partidos, solo bailan cada media hora así, como los propios espectáculos que se hacen, en plan bailes o números especiales. A pesar de que pueden beber todas las copas que quieren prefieren tomar cosas sin alcohol, y como ocurren en los trabajos de cara al público pueden recibir visitas para poder pasar mejor la noche.

Cuando apareció el gogo que me contrató me explicó que aquella discoteca tenía otra más, por lo que él bailaba en ambas y al principio de la noche iba a una y acababa en la que estábamos. Conoces a mucha gente y muchos pesados, acabas eso si con el sudor por todo tu cuerpo, imagínate si sudas tú bailando a ellos encima de una tarima aunque sea solo media hora intensa. Al menos él solo iba con escasa, escasísima ropa y no me extraña que los demás no dejaran de mirarle cuando a mi me ponía nerviosa estar a penas unos centímetros de él vestido con un bañador y poco más, con un cuerpo y una cara que te dejaban sin habla prácticamente.

Al final me convencieron para quedarme un poco más después, aunque como estaba tan cansada que me caía y al día siguiente madrugaba tuve que irme. Mis amigos me preguntaron si bebí mucho, la verdad es que no, básicamente para quitarme la sed y ya está. Si se liga más trabajando, como siempre sale alguien. Si hay muchos pesados, alguno que otro pero lo bueno es que a mi me tocaron pesados con encanto y además con salero, por lo que me lo pasé bien. Si se hacen muchas fotos contigo, alguna que otra si, y si es posando un poco, mejor que mejor.

El caso es que por fin he estado dentro de la boca del lobo, y aunque estuvo bien, trabajar en el mundo de la noche no me seduce demasiado la verdad…