Revista Literatura

El arte perdido de la lectura profunda

Publicado el 22 julio 2011 por Migueldeluis

Se dice que los libros electrónicos darán lugar a una revolución en la lectura. Pero yo creo que, en realidad, no es sino una magnificación de la revolución en la lectura que se dió con la imprenta. Antes de Guttemberg los libros eran o bien público — piénsese en la Biblia — o exclusivos de étiles cultas. Incluso entre éstos, lo normal era poseer un número reducido de volúmenes, que se leían muchas veces.

La Biblia y sus sucedáneos.

Antes de la imprenta, la inmensa mayoría de la gente, “leía” las Escrituras a través de los sermones e historias piadosas que otros construían. Sin poder acceder directamente a la cultura formal, llegaban a ella a través de las elaboraciones y comentarios que hacía la gente que era más culta que ellos, pero en absoluta conocedora de las culturas y contextos en que se habían elaborado los textos sagrados.

Con la imprenta y la libertad, las Biblias — y otros libros — empezaron a ser mas comunes hasta llegar a las casas particulares. Éstos libres se leían y releían hasta el punto que se transformaban en ejes de la vida propia y social. La conversación giraba en torno a unos pocos libros comunes. La poesía se hacía culta si tomaba sus imágenes de esos libros — por ejemplo los elementos mitológicos — y el arte, con una inspiración más amplia, podía desbordar lo religioso.

Poco a poco los libros disponibles aumentaron hasta que fue obligatorio elegir la lectura. Una vida ya no daba espacio para leer toda la cultura disponible. Con el advenimiento de las bibliotecas públicas Internet y el libro electrónico pocas veces leemos un libro más de una vez. Salvo textos legales y religiosos, muy poca reflexión hacemos de lo leído.

Hoy leemos mucho, ¿pero qué sacamos de ello?

Busca un libro de cabecera.

Yo lo tengo. Es, sin sorpresa, la Biblia. Lo es desde hace mucho tiempo y lo prefiero porque — amén de otras razones que no vienen al caso — me permite mantener un diálogo con otras personas, ya sea desde la aceptación o el rechazo. Puedo pensar y repensar; me sirve de acicate para la meditación y me inmuniza contra creer que puedo dominarla de una sola pasada. Es mi consuelo, mi apoyo y mi guía.

Busca tú también un libro de cabecera.

Los viejos amigos

Hay libros que te llaman que los vuelvas a leer y repensar. Quizás no tanto como tu libro de cabecera, pero sabes que tienen algo que enseñarte, algo en lo que quieres profundizar.

Te pido que los señales. Haz una lista corta, y apártalos en tu estantería, para tenerlos a mano. Los míos son siete:

El Mundo de Ayer, de Stefan Zweig El Midrash de Jaime Barylko (Son extractos de El Talmud) El Elogio de la Sombra de Tankzaki Dejar Huella de Tad Williams The Screwtape Letters de C.S. Lewis. Making it All Work de David Allen Crónicas de Terramar de Úrsula K Le Guin No digo que sea la mejor selección, ni siquiera para mí, pero son los que tengo ahora; e irán evolucionando con el tiempo.

¿Qué de los demás libros?

¿Los que sólo has leído una vez? ¿Los que tampoco te sirve de referencia, ni de herramienta? Son a los que puedes decir adiós, son a los que quizás debas decir adiós. Poco a poco, dales vida, véndelos, regalálos o déjalos en un punto de bookcrossing, para que otros los encuentren.

No olvidemos los blogs

Manten una lista corta de blogs que lee frecuentemente, digamos doce. Una forma fácil de hacer ésto es a través de un lector de rss, google reader o feedly. De vez en cuando poda la lista de blogs que ya no te interesen y añade otros nuevos; pero nunca añades sin antes podar.

Profundizar es comentar

Haz propósito de comentar los libros y blogs que leas y releas. Para eso lo mejor es que tengas tu propio blog, quizás en blogger, o que comentes desde tu cuenta de facebook o red social favorita. Un libro clásico es un gigante en el que, tomando palabras de Newton, te puedes subir en sus espaldas.

Comenta, hazlo en público, dando la cara eso te obligará a pensar lo que vas a decir y así, aunque a veces metas la pata, aprenderás de verdad.

A ello

¿Te gustan estas ideas? Sé como la imprenta y ayuda a que lleguen a todo el mundo. ¡Muchas gracias!


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas