Revista Diario

Esto solo me pasa a mí #2: Interlove, la historia de mi vida

Publicado el 16 noviembre 2011 por Ainosuke Kanon
 http://i866.photobucket.com/albums/ab228/MientrasLees/SweetOver/estosolo.png
Esta vez la historia no es de terror ni de ciencia ficción; tampoco está sacada de los anales más oscuros de la historia de Finlandia. Hoy hablaremos de amor.
Esto solo  me pasa a mí #2: Interlove, la historia de mi vida
Se dice que hay que tener mucho cuidado con Internet y yo soy testigo de que así es. He sido víctima y, quizás, victimaria -dentro de lo que cabe entre las cosas más "inocentes" que hay dentro de la Red-, hombre, que me han quitado cuentas, me han acosado e injuriado (pero gracias al cielo eso en España es denunciable, así que ojo) e incluso me han enviado fotos de miembros viriles (bastante feos, cabe decir) a mi correo. Pero aún así, me gusta navegar, hacerme cuentas y muchos blogs. La red no me ha castigado y sigo siendo su amiga eterna y fiel.
En mi juventud, allá por el siglo XV antes de LJDH, viví una etapa oscura que incluyó salidas varias, escapes, fiestas con todo, fin de semanas desaparecida, desmadrada hasta tal punto que, un día, me miré al espejo y dije "basta". Aquella no era la vida que yo quería para mí. Me estaba consumiendo lentamente, tal y como los porros que en su momento consumí. Y como yo soy algo límite, de vivir la locura siendo una bohemia callejera, prácticamente pasé a vivir encerrada en casa. Como una real hikikomori. Solo veía las paredes de mi cuarto y a veces un poco más allá, hasta que terminé refugiándome en un mundo nuevo que gracias a Saint Seiya se abrió ante mis ojos: Internet, y más concretamente, las páginas de fanfics yaoi (relaciones chico-chico).
Conocí mucha gente, mucha valía la pena y otra, lógicamente, eran un error. Me animé y decidí también subir mis fics; los comentarios no se hicieron esperar, en medio de ellos, unos muy llamativos, firmados con un misterioso: Da. Los capítulos se siguieron subiendo y aquellos extraños comentarios seguían llegando. Sentí curiosidad y dejé caer, como que no quiere la cosa, varias veces mi MSN en las notas de autor, muchos me agregaron, pero ninguno ESE chico en especial. Hasta que un contacto, una tarde de chat, me mencionó que justo en ese momento hablaba con mi misterioso seguidor. De inmediato le pedí que lo uniera a la conversación y, prácticamente, nos olvidamos de ella. Se desconectó y nosotros seguimos conversando.
Esto solo  me pasa a mí #2: Interlove, la historia de mi vida
 No nos veíamos siempre. En un momento, llevé mi PC al cuarto y de forma "artesanal" hice la conexión allí, facilitando mi vicio al ordenador. Él venía de vez en cuando, pero cada vez más tiempo, más veces, más días, y de pronto, sin darnos cuenta, estábamos conectados todos los días desde que nos levantábamos hasta que nos enviaban a acostarnos. O nos obligaban a hacerlo. Mi parte más racional me decía que dudara, que no me fiara de alguien que realmente no conocía, pero otra parte de mí fue cediendo ante esa dedicación y esas palabras. Y llegó ese día que en parte, en esa época deseaba que no llegara: un día me levanté y lo supe: ese niño al cual le llevaba años de vida y experiencia, ese niño que a veces decía cosas que se contradecían, ese niño borde y distante que vivía en un continente diferente... me había enamorado. Y hasta las patas. Con locura y dedicación.
Soy de decir las cosas, así que desde que me di cuenta hasta confesarle mis sentimientos, pasó muy poco tiempo. Pasó de mí. No sentía lo mismo. Comenzó el dolor. Trató de irse muchas veces, pero yo seguí allí y él... también. Hasta que llegó ese 7 de febrero, meses después de haberme declarado; me conecté y celebramos nuestros mesario (también nos conocimos un siete, aunque de abril) y de pronto, recibí un email. Era de él. Estando conectado me pidió que primero leyera el mail y eso hice, con nervios y asustada. Todo sonaba tan serio...
¿Que decía el mail? Lo resumo en cuatro palabras: Estoy enamorado de ti.
Esto solo  me pasa a mí #2: Interlove, la historia de mi vida
Aquello no alivió mi pesar. La angustia aumentó y es que había cariño, amor, deseo... pero una eterna distancia, imposible de sortear, nos separaba entre miles y miles de kilómetros. Miles de horas, miles de monedas cayendo de un saco roto, sin posibilidades de reunirlas para hacer posible nuestro sueño. Hasta que un día... Una mínima posibilidad se convirtió en nuestro milagro.
Y no creí en ella, no quise hacerme ilusiones ni esperanzas. La verdad, es que jamás había pensado que este tipo de amor fuera para mí. Pero llegó mi cumpleaños, el 7 de enero, y él me pidió que pusiera la Cam. Siempre me lo pedía, y micro también, como no. Yo accedí, no sin antes hacerme de rogar un poco, y entonces apareció con una caja. Me pedía matrimonio.
Un chico que no conocía ni hace dos años, que vivía muy lejos, mucho menor que yo (un menor de edad), que jamas habíamos estado en una misma habitación y posiblemente jamas lo estaríamos, me pedía ser su esposa. Y yo acepté.
Y fue el comienzo del milagro. Apareció la oportunidad real que podría traerme hacia sus brazos, rumbo a España. No me lo pensé dos veces. Ni siquiera se me pasó por la cabeza los contras: llegar a una casa desconocida, con gente que desconocía, con costumbres diferentes. No pensé que nuestra relación podría haber sido horrible o haber salido todo mal. No pensé en mas nada que en estar con él.
Esto solo  me pasa a mí #2: Interlove, la historia de mi vida
Llegué el 25 de abril del 2007 y allí comenzó otra pelea. Poder estar juntos aquí, para siempre. No nos costó demasiado, he de aclararlo. Fue rápido, y llegó más rápido aquel bellísimo 16 de noviembre de 2007 (no pudo ser un 7, lamentablemente). Era Mediodía y en mí convivían muchísimos nervios y miedos, en la ceremonia hasta nos equivocamos de anillo, los zapatos de tacón me mataban y me descalcé, sacándome las fotos sin ellos. Nos casamos, y según el cuento, viviremos felices y comeremos perdices.
Hoy 16 de noviembre del 2011, ya hacemos cuatro años. Cuatro años de felicidad, de lagrimas, de pena, de aventuras, de risas y de confusión. Pero sobre todo de amor. A veces lo miro y me pregunto por qué me escogió a mí. Aun me pregunto cómo cosas tan raras me pasan sin parar año tras año.
Dicen que Internet es peligroso, pero la vida también. Solo hay que ir con cuidado, porque como hay cosas y personas malas, hay cosas y personas maravillosas. Y tuve la suerte de encontrar a la mejor.
¡Feliz aniversario, mi amor!
Esto solo  me pasa a mí #2: Interlove, la historia de mi vida
Más sobre "Esto solo me pasa a mí" Aquí

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Sobre el autor


Ainosuke Kanon 45 veces
compartido
ver su blog

El autor no ha compartido todavía su cuenta El autor no ha compartido todavía su cuenta

Dossier Paperblog

Revistas