Históricos Unidos: El comienzo

   Qué mejor que empezar esta sección por el principio. ¡Por el principio de los Estados Unidos! Cuando todavía no estaban unidos y ni siquiera eran estados. ¡Lección de historia! ¡Nooo, aburrimuerteee! Nada más lejos de la realidad, la historia de Estados Unidos es muy interesante y podemos acercarnos a ella a través de, por ejemplo, las pelis americanas, con sexo, sangre, helicópteros sobrevolando ciudades, tiros, tanques sobrevolando ciudades, banderacas, portaviones sobrevolando ciudades y BSO's muy épicas.
   Así que relaxing con una cup of café con leche y vayamos con la época colonial, lo que no significa que la gente oliera bien. Por aquel momento, tras el descubrimiento de un nuevo continente unos años antes por parte de Cristobal Colón en “1492” (Ridley Scott, 1992) unos colonos británicos desembarcaron en el recién descubierto “El Nuevo Mundo” (Terrence Malick, 2005) y alguno de ellos se enamoró de “Pocahontas” (Mike Gabriel, Eric Goldberg, 1995), supongo que los dos meses encerrados todo hombres en un barco ayudarían a promover las relaciones interraciales. 

   Y, sin embargo, aunque al final los ingleses lograron la hegemonía luchando con sus aliados, entre los que se encontraba “El último mohicano” (Michael Mann, 1992), no fueron los únicos. Españoles al sur como los de “La misión” (Roland Joffé, 1986), franceses al norte como los de “El manto negro” (Bruce Beresford, 1991), holandeses (la isla de Manhattan fue comprada por los holandeses a los indios que habitaban en ella por unos 1.000€ actuales, y el nombre de Wall Street deriva de la empalizada que separaba a los indígenas y los colonos), rusos y hasta suecos se partieron la cara durante años por esas tierras; y por esos mares, contra los “Piratas del Caribe” (Gore Verbinski, 2003).
   Fue una época dura y oscura donde grupos cristianos como los cuáqueros, metodistas, moravos, puritanos, alemanes menonitas (más conocidos por Amish) como los de “Único testigo” (Peter Weir, 1985; aunque la peli sea de amish actuales, tampoco han cambiado mucho con los años) daban el salto a América huyendo de la intolerante Europa para profesar su fe en una tierra donde existía ya cierta libertad religiosa. Aunque Norteamérica tampoco estuvo exenta de barbaridades religiosas como el siniestro episodio vivido con “Las brujas de Salem” (Joseph Sargent, 2002), donde 150 personas fueron acusadas de brujería y procesadas en Massachusetts. Realidades que parecen sacadas de leyendas como “Sleepy Hollow” (Tim Burton, 1999).
   Es, en definitiva, una época severa pero apasionante de la que, si sabéis buscar, encontraréis muchísimas pistas en los rincones más antiguos de las trece colonias originales (SC, NC, G, V, M, D, P, C, RI, NJ, NY, MASS, NH).