Kafka en la orilla. Haruki Murakami.

  
Murakami brillante.
Dos historias en paralelo que confluyen en un punto.
La historia de un adolescente que huye de su casa, de su padre, de una maldición edipica, de la soledad provocada por el abandono de su madre…
Por otra parte la historia de un anciano al que una experiencia sobrenatural le hace perder la memoria. Sin saber leer ni escribir pero con habilidades tan peculiares como hablar con los gatos, se cruza en el transcurso de la novela y mata al padre del primero.
El por qué es lo de menos. Murakami necesitaba una excusa para presentarnos un desfile de personajes sublimes, saltando de la realidad a la ficción y recurre al enrevesado argumento de “Kafka en la orilla”  para conseguirlo.
Narrativa impecable, repleta de alusiones literarias y musicales, personajes que cumplen brillantemente con su cometido, con sus ganas de hacernos pensar, odiar, enternecer, sonreír o soñar…
Reflexiones filosóficas acerca de la vida, utilizándola como una gran metáfora. Relatando de un modo surrealista, casi onírico, haciendo los deleites de quienes priman la buena literatura.
Es una novela que no puede dejar impasible a nadie. Entiendo que Murakami sea un escritor que se adora o se detesta sin término medio, pero quienes en algún momento nos hemos sentido atraídos por su narrativa repetimos y disfrutamos con ello.
Un libro claramente recomendable, brillantemente escrito, con el que deleitarse, evadirse, reflexionar y disfrutar de su alta calidad narrativa.