La fatal bomba de tiempo que nos dejó toledo

LA FATAL BOMBA DE TIEMPO QUE NOS DEJÓ TOLEDO. 
Por Eduardo Carranza Gazzani. (16-08-2013). 

La Constitución de 1979 previó la descentralización del país proponiendo la creación de regiones autónomas.

Pero es recién durante el primer gobierno de Alan García (1985-1990) que se crearon doce regiones. Pero nunca llegaron a funcionar realmente.

El presidente Alberto Fujimori en diciembre de 1992, considerando que estas doce regiones no eran viables, las reemplazó por los llamados Consejos Transitorios de Administración Regional bajo la supervisión directa del Ministerio de la Presidencia.

La nueva Constitución de 1993 contempló la creación de nuevas regiones con gobiernos elegidos y autónomos. Pero en tanto estos se hicieran realidad continuarían funcionando los ya mencionados Consejos Transitorios.

La verdad es que el Perú no estaba listo ni aún lo está, a la luz de los hechos, para tener gobiernos regionales autónomos. Fue por eso que durante el gobierno de Fujimori no se llegaron a implementar.

Es en la campaña para las elecciones presidenciales de 2001 que el entonces candidato Alejandro Toledo ofreció como promesa de bandera, que él iba a llevar a cabo la regionalización del país de todas formas. La prisa y la improvisación tuvieron como como resultado la fácil pero peligrosa y complicada solución de dividir el Perú en veintiséis regiones. Es decir, cada departamento se convertía en una región, más la región Callao y la conformada por Lima metropolitana.

Esto fue algo absolutamente irresponsable, teniendo en cuenta la escasa madurez política de la mayoría de los peruanos. Y si a eso le sumamos la poca o ninguna claridad en la definición de las funciones de los presidentes de cada región, el desorden y la anarquía en el corto plazo estaban garantizados. Desde 2005 ha habido varias propuestas para modificar el actual esquema de regiones, sin éxito, principalmente porque ningún presidente regional va a querer renunciar a su pequeño feudo.

La suspensión del proyecto minero Conga, auspiciada por el presidente regional de Cajamarca y que cual efecto dominó empezó a paralizar otros importantes mega-proyectos, está comenzando a afectar nuestro crecimiento económico. Y todo es consecuencia de esta regionalización de Alejandro Toledo llevada a cabo apresuradamente, sin ningún criterio y con carencia total de sentido común.

En conclusión, el frenazo actual de nuestra economía se engendró con Toledo y se estaría por sellar con Humala si es que no se despercude y pide el asesoramiento de gente capaz.