Revista Diario

La sirena

Publicado el 10 febrero 2010 por Bloggermam

La sirena“Silencio, que  tengo sueño…callaos…”. Creo que todavía estoy pedo, no puedo ni hablar. Que barbaridad, voy a tener un resacón brutal. Nunca más volveré a beber de esta forma, pero es que estaba tan a gusto que el calimocho entraba solo, fresquito, delicioso. Y el Andrés estaba sembrado imitando al decano. Con tanta tontería al final me he pasado de la raya bebiendo. Menos mal que no había controles para volver a casa y que hoy tengo todo el día para dormir como una bestia. No me van a sacar de la cama ni a empujones. Pero este par de alimañas que tengo por compañeros de piso no paran de hacer ruido.
“Dejadme dormir, cabrones”. Estoy agotado y encima estos mal nacidos la han tomado conmigo. Ya podéis zarandearme todo lo que queráis que no me voy a levantar de la cama. A mí como si la tiráis por el balcón conmigo dentro. Ya he pillado mi sitio y  me estoy quedando dormido, así que empujad lo que queráis que ya me vengaré cuando me levante. No voy a dejaros dormir en una semana.
“Me voy a tener que acordar de todos vuestros muertos”. Han dejado la persiana entreabierta. Esa maldita luz a rayas, que nunca he soportado.Y eso que saben que me molesta. Pero hoy estoy tan cansado que creo que dormiría aunque me estuvieran enfocando con unos faros de xenon. Y encima han dejado la ventana entre abierta. Noto la brisa y oigo una sirena a lo lejos.
“Apagad los cigarros que vienen los bomberos”. Esa maldita sirena me taladra los tímpanos. Nunca sé si son los bomberos, la ambulancia, la policía o la maldita vuelta ciclista. El caso es tener una excusa para saltarse los semáforos, igual que hace el Narciso, pero sin tantos aspavientos. Al final me terminarán desvelando con el sonido estridente de la sirena. Quiero dormir, pero suena como si estuvieran arrancándole las entrañas a una hiena. Me está volviendo loco y yo sólo quiero dormir, dormir y dormir. A ver si hay suerte y se estampa contra una pared y deja de molestar.
“Dejadme, quiero dormir, quiero dormir”. Estos dos deben de estar de subidón y no entienden que yo ya es como si no estuviera. Me van a desgastar el nombre, como la Inés cuando derrapo en las rotondas. ¡Un momento, estos van de sobrados y me han soltado una guantada en la cara! Se aprovechan de que estoy fuera de combate... y que las tetas de la Inés podrían detener una guerra, o dos. Y la sirena…la sirena se ha parado. Por fin silencio. Ahora sí que se puede dormir. Por fin.
-¿Jenaro? Soy el doctor,  Moreno. Es normal que te encuentres aturdido. Has estado doce días en coma. ¿No te acuerdas de nada?
-…
-Es normal, ya irás acordándote. Tuviste un accidente de coche cuando regresabas de un botellón y la ambulancia que te traía al hospital también tuvo un accidente. Eres un tío con suerte, esta vez has salvado el pellejo gracias a tus amigos que hicieron de todo para que no te fueras.
-…
-Tienes múltiples fracturas y te hemos extirpado el bazo, te recuperarás… Cuando estés más repuesto la guardia civil tiene que hacerte unas preguntas. La chica que iba contigo en el coche y el motorista que embestiste no tuvieron tanta suerte como tú.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog

Revista