Lágrimas negras de Brin

Lágrimas negras de Brin, la segunda novela de Nicholas Avedon, continúa lo que nos dejó abierto en 11,4 sueños luz. Aunque quizá debería decir que precede y sigue a 11,4.

La historia sirve de vehículo para que Nicholas se explaye en la construcción de tres mundos realmente increíbles. Y sí, he dicho tres. Porque Lágrimas negras de Brin tiene lugar en tres universos muy diferentes que coexisten en una misma realidad. O quizá en dos…

El autor: Nicholas Avedon

Nicholas Avedon es el seudónimo bajo el cuál escribe ciencia ficción (y otras cosas) este ingeniero y empresario afincado en Madrid. Sobre su trayectoria profesional, a diferencia de con el resto de autores que pasan por esta web, no puedo decir nada, pero sí puedo hablar de su faceta literaria.

Nacido en 1975, lleva con nosotros como Nicholas Avedon desde finales de 2014, aunque sus primeros artículos los leí hacia finales de 2015. Cuando no está en su oficina (no diré dónde, no diré en qué empresa) dedica su tiempo a leer y escribir

Ha publicado dos novelas de ciencia ficción, una antología de relatos llenos de oscuridad y decadencia. También ha publicado un manual de paternidad para padres y lleva un blog con su mismo nombre (nicholasavedon.com). En él nos habla de ciencia ficción, cyberpunk y de todas esas cosas personales que no quiere o no puede decir con su nombre real.

El libro: Lágrimas negras de Brin

Como decía, Lágrimas negras de Brin es la continuación de 11,4 sueños luz (aunque sea un detalle que solo aparece oculto al final de la sinopsis de Amazon). Sin embargo, la historia empieza años antes de este primer libro, sigue en paralelo con lo que nos cuenta Nicholas en él y termina (esta vez sí) continuando el verdadero eje central de 11,4 sueños luz.

Lágrimas negras de brin de Nicholas Avedon

Es por eso que, aunque técnicamente hay personajes, información y guiños que vienen de una novela anterior, la realidad es que Lágrimas negras podría funcionar como novela aislada.

Quizá sería más justo llamar a esta novela un libro paralelo al anterior, en lugar de una continuación. Pero sobre eso hablaré un poco más abajo…

Ficha técnica

EditorialAutopublicado

TítuloLágrimas negras de Brin

AutorNicholas Avedon

Número de páginas483

ISBN9781980676317

PublicaciónAbril 2018

ComprarAmazon

Sinopsis

Los viejos túneles de la ciudad de Rotterdam alumbran el despertar adolescente de una joven alma atormentada. Mientras, muy lejos de allí, una mujer madura enseña a un desconocido sin pasado el valor de la vida. En París, Ariel de Santos, un director de arte de fama mundial, conoce a la que será la mujer que le hará abandonar todo por amor, embarcándose en un viaje sin retorno a las estrellas, dejando detrás muertes y mentiras.

Tres historias de amor en tres mundos diferentes. Atravesando de lado a lado géneros como la ciencia ficción distópica, el ciberpunk o la fantasía y sumergiéndonos en el alma humana, el principio del siglo XXIII no puede ser más desolador y a la vez más fascinante.

La narración comienza dos años antes de que lo haga «11,4 sueños luz», y continúa la historia justo donde terminó ésta. Aun así, su lectura independiente ofrecerá al lector muchas más sorpresas que si conociera la historia desde el principio. Después de todo, ¿existe algún principio para las historias con personajes como éstos?

Opinion

Es difícil dar una opinión más profunda sin desvelar detalles esenciales de la trama. No puedo asumir que hayáis leído 11,4 sueños luz y no quiero anticipar algunos de los puntos clave que tiene la novela. Así que intentaré ser lo más aséptico posible.

La historia de Lágrimas negras de Brin está dividida en tres partes y cada parte, por decirlo de alguna manera, tiene lugar en un universo diferente. En ese aspecto, la imaginería de Nicholas queda patente en los trazos que dibuja de cada uno de esos mundos. Con una narrativa ligera, absorbente y muy personal, nos arrastra por el devenir de sus personajes allá donde estén. Se lee fácil, aunque quizá le falte un poco de tensión a lo largo de sus páginas.

Por lo demás, los ingredientes del coctel son de lo más atractivo: mundos virtuales, inteligencias artificiales, viajes generacionales, sociedades utópicas, drogas, submundos hackers… Todo aderezado por varias tramas distintas que empujan a los personajes hasta el punto en el que están. Y es ahí donde hay un elemento que choca un poco con el conjunto. Ese elemento es que, sin mucho preámbulo, la primera trama, el primer personaje, de todos los de la novela (de ciencia ficción, recuerdo) está situada en un mundo de fantasía. Con su magia, sus luchas, sus dragones…

Es cierto que luego todo cobra sentido, y que el desarrollo fantástico juega un papel esencial en todo lo demás. Pero no deja de ser un aderezo que puede sacarte un poco del contexto. Sobre todo por el peso que ocupa en el conjunto (más de un tercio, diría yo). Una apuesta arriesgada de Nicholas que, al menos en mi opinión, termina funcionando.

Además, el objetivo final de esa trama es una manera muy original de explicar la evolución y el autodescubrimiento del personaje más especial del libro.

Por lo demás, la novela gira en torno a sus personajes. Podríamos decir que Lágrimas negras de Brin es la narración de las historias de varios personajes, de cómo se entrelazan, cómo se funden y cómo terminan todos compartiendo el final de la historia. Porque lo esencial aquí son sus motivaciones, sus relaciones y su evolución como personas.

Parecido a lo que decía de El largo viaje a un pequeño planeta iracundo de que era una novela paisajística, solo que en este caso hablaríamos de una novela personajística.

En definitiva

Lágrimas negras de Brin es una novela ágil y llena de detalles que dibuja un futuro distópico oscuro y opresivo en el que existen un par de vías de escape posibles. Pero, sobre todo, es una novela en la que vemos expuesta la esencia humana de aquellos que llevan el peso de la historia sobre sus hombros.

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