Mystic City, Theo Lawrence

Aria debe escoger entre seguir las órdenes de su familia o los designios de su corazón y su elección puede salvar o condenar para siempre la ciudad de Nueva York… Aria Rose pertenece a una de las familias con más poder de Nueva York y está prometida con Thomas Foster, el hijo de los enemigos más acérrimos de su familia. Thomas es arrogante y muestra poco interés por ella, pero el enlace tiene que celebrarse: la unión de los Rose y los Foster pondrá punto y final a décadas de confrontación entre los clanes más poderosos de la ciudad. Todo está pensado y atado, pero cuando Aria conoce a Hunter, un rebelde místico de una belleza arrolladora, los flashes sobre el pasado empiezan a atormentarla. ¿Y si las cosas no fueran como le han contado? ¿Y si su pasado hubiera sido reescrito?

Aria no recuerda nada de su vida antes de la fatídica noche en que abusó de las drogas, o al menos esa es la explicación que le ha dado su familia. Ni siquiera recuerda a su prometido, aquel a quien durante toda su vida la han educado para ver como el enemigo. Todo ello en una ciudad inundada, Nueva York, y separada por clases. Los ricos viven en lo alto los demás debajo... Mystic City es la nueva trilogía distópica de moda, ambientada en una Nueva York inundada por el agua y jerarquizada. Los pobres viven en las profundidades mientras que los ricos lo hacen en las Atalayas. Pero esa no es la única diferencia, también existen los místicos, seres con poderes a los que se les drena para impedir que asuman el control de la ciudad. En medio de este mundo se encuentra Aria y su aparente historia de amor, un romance que nos recuerda a Romeo y Julieta, los dos jóvenes cuyas familias han sido enemigas desde siempre y tienen que verse a escondidas... No obstante, en esta ocasión el amor ha podido con el odio, o eso parece, ya que Aria no recuerda nada de su prometido, Thomas. La novela comienza en la fiesta de compromiso de ambos, y ya desde el primer momento se hace notar la melancolía de la protagonista.

"Los edificios se reflejan en el agua. Corremos por un puente diminuto. Él va por delante de mí, el viento le azota el cabello. -¡Espera! -No hay tiempo. Nos están siguiendo. Se vuelve hacia mí. Espero ver la cara de Thomas... aunque no lo hago. No veo más que un círculo oscuro, oculto por un velo de bruma. -¿Thomas? ¿Eres tú? -Estoy aquí. -Extiende la mano y me atrae hacia sí-. No te preocupes."

Aria se siente perdida, es incapaz de recordar al chico que se supone que ama, no siente nada cuando le toca... Y además una serie de recuerdos le embotan la mente. Recuerdos que no es capaz de comprender. Y además está Hunter, un místico al que ha conocido en las profundidades, donde ha ido a buscar respuestas. Aunque estas no sean lo que esperaba... Y Hunter sea mucho más de lo que Aria ha imaginado. Pero si algo hay que destacar de Mystic City, sin duda es la ambientación, el mundo que describe, no ya físicamente sino también respecto a sus habitantes: los místicos. Otro punto a su favor es el estilo ágil del autor, la narración en primera persona de Aria nos permite involucrarnos con ella y meternos en su piel. Además el final abierto nos deja con ganas de seguir leyendo. Resumiendo Mystic City es una novela que crea un mundo fascinante y cuya lectura es entretenida y adictiva a partes iguales.