Rompiendo las normas, Katie McGarry

Me dicen que sea una buena chica, que saque buenas notas, que sea popular... No saben nada sobre mi. No recuerdo la noche que cambió mi vida. La noche en que pasé de ser popular a ser un bicho raro y marginado. Y mi familia está decidida a que siga así. Decían que la terapia me ayudaría. No se esperaban a Noah.
Noah es el tipo de chico sobre el que me advertían mis padres. Pero es el único que me escucha. El único dispuesto a ayudarme a averiguar la verdad. Sé que cada beso, cada promesa y cada caricia son algo prohibido. Pero ¿y su encontrar tu destino significa romper todas las normas?

Echo era una chica popular, la hija perfecta, hasta que un terrible suceso la marcó para siempre, física y mentalmente. Un suceso que ha encerrado en su subconsciente y que lo cambió todo. De un día para otro pasó de ser una chica popular, admirada y envidiada, a ser una apestada de la que todos especulan y cuchichean. 
Noah también ha dejado el baloncesto y la popularidad para ingresar en el grupo de los fracasados, de aquellos de los que no se espera nada. 
Entonces uno se pone en el camino del otro y todo cambia, para ambos. Echo y Noah son dos personas que aparentemente no tienen nada en común, un encuentro casual despertará su curiosidad y removerán sentimientos que creían imposibles. No obstante, esa no será la última vez que se vean obligados a encontrarse, como consecuencia de sus respectivos pasados se les asignará la misma, peculiar, terapeuta, y esta sin ser consciente de ello les condenará a compartir algo más que un par de clases.
Y es que tanto Echo como Noah han perdido a las personas a las que aman. Cada uno de ellos lidia a su manera con el dolor, Echo intentará conseguir el dinero necesario para reparar el coche de su hermano y Noah tonteará con las drogas y se despreocupará de las clases. Definitivamente no son personajes perfectos, de hecho son todo lo contrario, están rotos por dentro. Son tan reales que nos resulta fácil entenderles, meternos en su piel.

"Qué graciosa -con un movimiento veloz, colocó ambas manos en la pared de ladrillo y me acorraló con su cuerpo. Se inclinó hacia mí y mi corazón adquirió un ritmo que no sabía que existía. Su aliento cálido me acarició el cuello y derritió mi piel helada. Ladeé la cabeza y esperé el calor de su cuerpo sobre el mío. Podía verle los ojos de nuevo, y sus iris castaños parecían cargados de deseo-. He oído un rumor"

La novela está narrada por los dos protagonistas, alternando capítulos, de manera que conocemos de primera mano lo que sienten los personajes. Esta forma de contarnos la historia es un acierto porque se trata de una historia profunda, en ciertos aspectos dura, y lo es más cuando son los propios afectados los que no la explican. Al final el único deseo de Noah y Echo es ser normales, tener una vida sin tantas complicaciones, vivir sin que el pasado o el futuro les atormenten.
Por otro lado el hecho de que la autora no termine de contarnos todo lo que rodea a sus protagonistas consigue que no podamos dejar de leer, que tengamos ganas de saber por fin qué esconde el subconsciente de Echo, y la fatídica noche en que murieron los padres de Noah.
Resumiendo, Rompiendo las normas es una historia original a la par que dura, con personajes fuertes que se sobreponen a pesar de todo y con una historia de amor fantástica. Todo ello aderezado con un lenguaje sencillo y una prosa adictiva que te mantendrá pendiente de cada palabra.