Sobre mensajes

Ayer suspendieron las clases porque hacía un poco de aire. Cuando suspenden las clases te mandan un mensaje al móvil a las cuatro de la mañana para decirte que hay código rojo y que no tienes que ir al cole. Si es código azul van los jefes y los de mantenimiento, si es naranja entras dos horas más tarde, si es verde sales dos horas antes. Y así con todo el arco iris, te ponen primero el color del código y luego lo que significa el color en ese mismo mensaje, no vaya a ser que nos falle la memoria para distinguir códigos y la liemos.
El caso es que mi Jorge y yo estamos haciendo un curso acelerado de fenómenos atmosféricos y de lo que tienes que hacer si te pillan. El de ayer se llama bombogénesis, y ahora sé que hay que aparcar el coche lejos de los árboles y salir a la calle con casco: a eso de las doce de la noche empezamos a escuchar una especie de golpes secos y por la mañana medio tejado del edifico apareció en el jardín de la urbanización. Una vez más no miento, hay foto.
Lo de ayer digo yo que igual fue gordo, porque me avisaron por Internet y todo. Estaba yo a lo mío entre El País y el Diez Minutos (online) y me saltó una de esas cosas de publicidad que dan tanta rabia porque se ponen justo delante del texto que estás leyendo y a veces hasta parece que tienen vida propia y todo. El mensaje decía que los listos que saben de las cosas del tiempo le advierten de que va a hacer un viento tremendo de tal a tal hora en la zona en la que está usted, así que tenga cuidado por favor.
Y claro, a mí me que tengan tan controlada y me manden mensajes por todo pues como que me tiene mosca. Que se te ha pasado poner una nota a un alumno en el sistema, te mando un mensaje. Que te voy a observar, te mando un mensaje. Que te voy a poner una multa por algo, te mando un mensaje. Que el café quema, te lo pongo por escrito. Que si pisas un mojado te resbalas y te caes, te lo pongo por escrito. Que si trabajas en un restaurante y vas al baño te tienes que lavar las manos, también te lo pongo por escrito. Porque así yo lo he puesto por escrito y si pasa algo yo puedo decir que he avisado, no vaya a ser que nos dé a todos por demandarnos y también la liemos.
Luego te piden que manden faxes para algunas cosas, que pagues con cheques bancarios para otras y si quieres ponerle pin a la tarjeta de crédito te cuesta dinero. Y hacen razonamientos tan extraños como poner la gasolina más cara en los barrios con más bloques de apartamentos de alquiler, porque se supone que el que vive de alquiler es un desastre con los dineros y no mira tanto a la hora de gastar. Porque si tienes una "casa casa" sabes administrarte bien y miras la pela, entonces te lo pongo más fácil para comprar gasolina y así no te vas al barrio de al lado a llenar el depósito.
Esto no lo digo yo, lo decían el otro día unas en mi curro mientras se quejaban de que los supermercados de los barrios ricos da gloria verlos, mientras que en los barrios pobres da un poco de cosa.
Igual las casualidades no existen. Ahí lo dejo.