Te cuento

Siento no ser muy original esta semana, pero estoy tan cansadísima del fin de semana en Madrid, que no estoy yo muy lúcida como para escribir un post elaborado, así que siempre tengo algún que otro as en la manga; en este caso, en forma de Meme. Total, a mí me encanta hablar de mí, y me gusta pensar que, con estas cositas, puedes llegar a conocerme un poquito más. Sí, algunas preguntas se pasan de tontas, pero, no sé, a veces, por tonta que sea una pregunta, la respuesta te puede dar muchas pistas de cómo es quién la contesta, ¿no? Pues eso.  ¡Allá voy!

http://uplsahagun.com/

Color de ojos: Marrón muy oscuro.

Color de pelo: Negro, con algunas canas.

Altura y peso: 1,76 (el peso es cosa mía, hombre ya).

Nº preferido: El 12. ¿Por qué? Ni idea. Bueno, es el número con el que he jugado a baloncesto casi media vida. Igual es por eso.

Día de la semana: Cualquier día puede ser un buen día; pero, por lo general, el día que prefiero en la semana es el sábado: es El Día, por excelencia de descanso (o no, ya sabes que siempre me lío); después aún queda el domingo para reponerse.

Mascotas: no, gracias. De pequeña tuve perros, pero vivía en una casa independiente, con jardín, en una urbanización; no en medio de la ciudad. Allí era más sencillo atenderlos; o por lo menos a mí me lo parecía. El resto de mascotas tampoco me gusta: ni gatos, ni pájaros, tortugas o hámsters. No.

Herman@s: puffff. Esto da para un culebrón. Un medio-hermano y una medio-hermana. O dos medio-hermanas, vete a saber. En principio soy la mayor. Mientras no se demuestre lo contrario…

¿Estás enamorada? La respuesta a esta pregunta es mucho más elaborada que un simple sí o un simple no; y si me lío la manta a la cabeza y me pongo a responder, el post quedará más largo que la saga Millenium. Y no es plan.

¿13 o 12+1? Trece. No creo en ese tipo de supersticiones.

¿Lloraste por amor alguna vez? Sí, como una loca en la adolescencia; y en silencio en la edad adulta.

Físico del chico de tus sueños: Usher. Hala, ya está dicho. Personalidad del chico de tus sueños: bueno, lo que queremos todos en una pareja, digo yo: capacidad de decisión, autonomía, perspectiva, respeto, calma… no sé. Esas cosas.

Cada vez que pides un deseo pides que…: Cada vez que pido un deseo, pido un deseo en concreto; sólo uno. Pero con eso es más que suficiente. ya está.

¿Eres supersticiosa? Nore

Una manía: no me tengo por una persona maniática, la verdad. No podría decir una manía porque… no sé… ah! bueno sí: la tapa del inodoro. Siempre la bajo. Siempre; y hago que las Chocolatinas la bajen también.

Algo que cambiarías de ti: mi (poca) fuerza de voluntad y mi pereza. Es que soy muy inconstante, y a veces me cuesta perseverar. Soy bastante caprichosa; eso también. Y lo mismo me da muy fuerte por algo, que se me pasa y me aburro infinitamente. Te enamoran con…: con el ingenio y El Don. El de la palabra.

Las tres primeras cosas que te enamoran de un chico: Hace muchísimo ya que pasé por eso; pero vaya: los ojos, las manos y la voz son definitivos.

¿Qué le regalarías a un amigo que se va lejos? Creo que le regalaría algo mío, más que comprarle algo; le daría algo que fuese característicamente mío, para que me recordase. Eso, sí.

Última promesa que has hecho: No uso de eso. No acostumbro a hacer promesas. Porque, inconscientemente, la puedes romper, y eso es decepcionante para la otra persona. No promises.

No soportas a la gente… no soporto a la gente intransigente; a la gente inflexible, a quienes emiten juicios de valor a la primera de cambio, a la gente sin inquietudes… podría seguir, pero no quiero hacerlo muy largo.

Una rosa de color… No me gustan las rosas, porque en general no me gusta las flores. Ni las plantas. No les encuentro absolutamente nada, la verdad; pero si tuviese que escoger una rosa de un color, me gustaría una negra.

Algo que no quieres que nadie sepa de ti: prefiero que siga sin saberse.

Algo que no dejarías nunca: no dejaría nunca de escribir.

Algo que dejó huella en tu vida: la pérdida de P., a mis trece años. Era como un hermano mayor. Fue demasiado para mí; me costó asimilarlo. Y, para más inri, se me mezcló con el inicio de la adolescencia y otros problemas más. El cóctel fue explosivo. ¡Pa’ morirse, vamos! Podríamos decir que el resumen de mi adolescencia fue “Rebelión, Prozac y dudas“.

Algo que recuerdas con claridad: el día del nacimiento de mis Chocolatinas. Eso no se olvida. Bueno, quizás no lo recuerde con mucha claridad; pero las sensaciones están ahí.

¿Qué opinas de las marcas? Que están para quienes gusten de ellas. Eso opino. Para algunos aspectos de mi vida, me gustan las marcas; no porque sean caras (sabes que compro en MNG, y no es que sea una marca especialmente cara, vaya), sino por la confianza que me ofrecen. En otras cosas, me da igual comprar marca que no comprarla. ¿Estás a favor de la pena de muerte? No estoy a favor de la pena de muerte para nada en absoluto. No entiendo que haya que matar a alguien para demostrar que no se debe matar a nadie.

Contar o escuchar? Me encanta hablar. Para qué negarlo; pero también me gusta escuchar, por lo que puedo aprender mientras escucho.

¿Crees en algún dios? No. A pesar de lo católica y practicante que es mi madre, no tengo ninguna creencia. Creo en la energía del universo y creo en algunas gentes, entre las que me incluyo, la mayor parte del tiempo.

¿Crees en la magia? Magia, energía… algo que está así como por encima nuestro, que escapa a nuestro entendimiento, y que hace que, a veces, ocurran cosas fascinantes.

¿Qué coleccionas? Nada. Durante mi adolescencia, me dio por la estupidez de coleccionar etiquetas de ropa: claro, compraba en tiendas diferentes. Ahora que sólo compro en una tienda, tampoco tiene sentido lo de la colección.

En qué muñeca te pones el reloj? En la izquierda, cuando me lo ponía. Me quité el reloj cuando nació Chocolatina Mayor y no me lo he vuelto a poner. Además, llevando el aifoncito, ya no necesito el reloj en mi muñeca.

Prefieres seducir o ser seducido? El juego de la seducción es divertido; jugar es divertido. Me gusta seducir, pero también es muy divertido dejarse seducir.

Última vez que te caíste: Debe de hacer mucho, porque no lo recuerdo.

Última vez que te reíste: Intento reírme cada día. Un día sin sonreír es un día perdido, o algo así se suele decir. Así que, por si las moscas, yo cada día intento reírme un poco. Motivos no me faltan.

¿Confías más en un chico o en una chica? ¿Qué tiene que ver la velocidad con el tocino? Se confía en la persona, independientemente de su género.

Qué esperas de una relación?: ¿De qué tipo de relación? Bah, qué más da. Espero poco de las relaciones, así la decepción es menor. Creo que lo que espero es no herir ni resultar demasiado herida.

¿Quieres casarte y formar una familia? Ya tengo una familia.

¿Qué dices cuando coges el teléfono? Pues digo muchas cosas, en función de quién me llame: Quépasaloqui?! Digamelón, CaballeroCaballeroCaballero…, Quépasatron, Holis, Hola, Amore, Cari, Quétal… sigo?

¿Chico más alto que la chica o al revés? Chico igual de algo o más alto.

¿Todo pasa porque tu quieres? A veces. A veces creo que las cosas que pido se dan. Es la ley de la fuerza de la atracción. Creo en ella, y considero que me ha funcionado en diferentes ocasiones.

¿Peluches grandes o pequeños? Odio los peluches. Pero además de verdad. Los-o-dio. No puedo con ellos. Si quieres hacerme un faenón, regálame un peluche.

¿Fumas? Sí, muy poco, pero sí. A veces ni siquiera es todos los días, pero sí. Fumo.

¿Bebes? Sí; los fines de semana. Entre semana, como mucho, alguna noche ceno con una cerveza o una copita de vino; pero normalmente sólo bebo los fines de semana, si hemos quedado con amigos para cenar o comer. Si no, no.

Por qué bebes o por qué no: Bebo porque me gusta tomarme una copita cuando estoy de cena o de marcha con mis amig@s, sin llegar a emborracharme. A eso no le veo el qué.

Algo que sepas hacer bien: bueno, los demás dicen que se me dan bien los peinados de las Chocolatinas; y también escribir. Juzga por ti mismo.

¿Sueles decirle que le quieres a la persona que amas? Sí, lo hago. Se lo digo a la gente a la que la quiero. A veces damos por supuesto que los demás saben lo que sentimos por ellos, pero no siempre es así. Por tanto, lo digo. El físico es lo más importante? Depende de lo que estés buscando, ¿no? Si lo que quieres es una relación larga, el físico no debe ser la base en la que se asiente la relación. Ahora, si lo que buscas es un flirt, un escarceo amoros, ¡por qué no apuntar alto!

Una manera de demostrar amor: Estando.

¿Crees en las leyendas? Vete a saber. Igual sí, igual no.

Para vivir, ¿una ciudad o un pueblo? Un pueblo grande, una ciudad pequeña.

¿Día o noche? Noche cerrada.

¿Huesos que te hayas partido? Ninguno.

Marca de reloj: Don’t touch my Breil.

¿Te gustan los días de lluvia? Si puedo quedarme en casa, sí. Para mí los días de lluvia son días de manta, sofá y televisión. Si tengo que salir, prefiero hacerlo después de la lluvia. Ese olor a tierra mojada me encanta.

Última peli que has visto: La última peli que he visto ha sido “Con derecho a roce”, de Justin Timberlake y Mila Kunis. Una comedia ligera, entretenidita. ¡Y el Timberlake sale en culos!

¿Prefieres la pareja feo y simpático o al reves? Uy qué pregunta más rara y tal, ¿no? Es que no sé ni qué contestar. En serio. No. Paso.

¿Algo que no harías nunca? No lo sé. No sé qué no haría nunca. Robar, matar, secuestrar a alguien. Esas cosas… y seguro que otras muchas menos delictivas y más de andar por casa, que ahora no se me ocurren. Aunque, para esas pequeñas cosas, también te digo una cosa: nunca digas nunca. Porque llega un momento en el que tienes que meterte la lengua en el culo. Eso es así.

¿Te gustan los chupetones? Nore.

¿Qué significa para ti un beso? Un beso demuestra amor. Beso a las personas a las que quiero, y así, sin tener que decírselo, les demuestro el amor que siento por ellos.

Alguien que no olvidarás nunca: no olvidaré nunca a P.  Lo llevo siempre conmigo, siempre, siempre, siempre está en mi memoria. Las perrerías que me hacía de pequeña para hacerme rabiar; los regalos de Reyes para el cole; lo bromista que era… no se olvida.

¿Funciona el amor a distancia? No. Nunca. Si no se va materializando de vez en cuando, al final la relación se enfría y se viene abajo.

¿Te guardas tus sentimientos? Ya no tanto. Pero me ha costado muchísimo ser capaz de exteriorizarlos (Prozac times). No me enseñaron a lidiar con mis sentimientos; es un trabajo que he tenido que hacer yo; y ahora que he aprendido a hablar de lo que siento, no me lo guardo más.

¿A qué le tienes miedo? Miedo, eh; no fobia. Al sufrimiento, a que les pase algo a mis Chocolatinas o a las personas a las que quiero.

¿Te sientes sola? Muy pocas veces.

¿Cómo se llaman los de Huelva? ¿Y esto a qué viene? Onubenses, ¿no?

¿Te consideras afortunada? No lo tengo claro.  En líneas generales sí. Aunque más que afortunada, me siendo agradecida.

¿Eres previsible? A veces sí, a veces, no.

¿Te han roto el corazón alguna vez? Claro. Es el ciclo sinfín que lo envuelve todo (King Lion Dixit)

¿Después de la tempestad siempre llega la calma? Siempre.

¿Piensas en ti primero? No siempre. Hubo un tiempo en que siempre anteponía las necesiades de los demás a las mías propias, por aquello de agradar y ser aceptada. Después de trabajarlo con mi… psiquiatra y de tomar las pastillitas -y de madurar y hacer un gran trabajo personal de aceptación- me di cuenta de que, si yo no miraba por mí, nadie lo iba a hacer, y empecé a quererme más. Ahora las Chocolatinas están por delante de todo.

¿Hay que decir siempre la verdad? No. A veces es preferible omitir información.

¿Con qué edad quieres tener la vida resuelta? Joder. ¿Con la que tengo?

¿Odias que te odien? No. No puedo controlar los sentimientos que despierto en los demás; así que, ¿por qué enfadarme u odiar  a quién me odia? Igual tiene razón y todo.

¿Sirve de algo llorar? Sí. El llanto es reparador. Lo comenté en Ciberjenis; puedes leerlo aquí, si te apetece.

¿Sabes controlar tus sentimientos? Sí. Creo que los controlo bastante bien.

¿Serías capaz de vivir observado?: Sí. Con lo pagada de mí misma que soy…

¿La vida es justa? Ni modo.

¿Crees que has conocido al chico de tu vida? Eso no se sabe nunca.

¿Rezas por las noches? No. No rezo; le hablo a mi abuela materna -Mamá Caró-, a pesar de que no la conocí. Eso es lo que hago en lugar de rezar; le cuento las cosas que me preocupan; siento que, de alguna manera, ella vela por mí. Así que le explico cosas.

¿Qué es lo último que haces antes de dormir? Repasar cómo me ha ido el día, y organizar el día siguiente.

Mira atrás…¿te gusta el pasado? Si miro atrás es para recordar cosas buenas. Soy nostálgica, así que, en el fondo, sí.

¿ La vida es de colores? De luz y de color (Marisol dixit)

¿Necesitas de la gente? Claro, no soy ninguna anacoreta.

¿Te importa pedir perdón? Para nada.

Algo que te entristezca: El sometimiento, el acoso de todo tipo, y muchísimas cosas más, pero esto es lo primero que se me ha venido a la mente.

¿La gente ve en ti lo que realmente eres? Creo que sí, que soy bastante transparente.

Algo que cada vez que piensas en ello lloras: en cómo crecen mis pequeñas; pero es un llanto de alegría; sorprendida de ver lo rápido que pasa el tiempo, la velocidad con la que crecen. Eso me emociona sobre manera.

No serías capaz de vivir sin…: Mis pequeñas.

Dale las gracias a alguien: A mi madre, pese a la relación extraña que tenemos. Sin ella yo no estaría aquí ahora. Y, en general, a todo lo bueno y malo que he pasado, porque gracias a eso, hoy en día soy quien soy.

Algo por lo que hoy deberían felicitarte: porque mi cumpleaños será en breve, ¿vale eso?

¿Una mirada o una sonrisa? Las miradas. Para mí las miradas dan muchísimo juego. Muchísimo más que las sonrisas.

Algo que cada vez que piensas en ello te ríes: Alguna tontuna que he dicho o algún palabro que me he inventado, que lo hago constantemente.

Una ilusión: NYC.

¿Cuentas hasta diez antes de decir algo? A veces.

Lo más bonito que te han dicho: Que siempre estoy ahí.

¿Vives el presente? Sí, o por lo menos lo intento.

¿Te importa lo que piensen de ti? Cada vez menos.

Cuéntame un secreto: los secretos son secretos. Los hay confesables e inconfesables. Los confesables ya os los estoy contando. Y de los inconfesables, no voy a hablar aquí.

Hoy por hoy, ¿eres capaz de dar todo por amor? Depende. Por amor a mis hijas, seguro. Más allá de eso, ya no puedo afirmar nada categóricamente. No creo en las pruebas de amor; no son necesarias.

¿Existe el diablo? Personificado, sí. Hay gente muy mala.

¿Qué haces cuando estas triste? Me pongo en mode Introspección On, me alejo del mundanal ruido, me pongo en plan autocompasivo un rato, me revuelco en mi propia miseria -es muy de divas- y, cuando se me pasa, reemprendo el vuelo.

¿Lo más difícil que has hecho en tu vida? Lo sigo haciendo: criar a mis hijas.

¿Última persona que has conocido? El viernes pasado conocí a siete mujeres maravillosas, emprendedoras, fuertes y valientes. Y las quiero a todas.

¿Le tienes miedo a alguien? Bueno, por ahí hay gente muy mala, la verdad; pero vaya, no hay alguien en especial a quien le tema.

¿Cómo conquistas a un chico? Siendo yo. Supongo que así es como fue mi última y actual conquista.

Tu vida comenzó a tener sentido el día que…: Empecé a quitar piedras de la mochila que llevo a cuestas.

¿ Algo que nunca te perdonarás? Ciertas cosas que no hice cuando debía y de las que ahora me arrepiento hasta el extremo.

¿Odias a alguien? El mejor desprecio es no hacer aprecio. No odio a nadie. Ignoro, sin más.

¿Alguien que haya significado mucho para ti? Por ahí hay algunas personas muy especiales. Algunas no lo saben, pero lo son.

No serías quien eres hoy sin…: sin la de hostias que me ha llevado.

Y ahora, después de este tostón, si alguien quiere llevárselo a su blog, que se sienta libre de hacerlo.