Top 10: cosas que no soporto tener que compartir

No hay cosa más linda que compartir una sonrisa, una mano cuando alguien te necesita o una cuando no te la piden pero sentís que es necesaria. El compartir lo lindo y a tantas personas como se pueda es inclusive el lema que le atribuí a este espacio. Pero en esta ocasión, decidí hablar de lo que personalmente considero “cosas incompartibles”. Más allá de las mundialmente conocidas (cepillos de dientes, toallas, tu hermana (?)) todos tenemos una lista de cosas incompartibles y esta es la mía:
Libros: para muchos esto es algo que debería ser ley “No compartirás tus libros y en caso de dárselos a alguien se los estarás regalando a plena consciencia” pero no, para muchas otras personas es universal el que los tengas que compartir. En mi caso, prefiero compartirles una buena reseña y un PDF.
Mis cereales: en el mundo solo hay un cereal hasta la fecha capaz de satisfacerme en cuerpo, alma y paladar y ese es el “Chocapic”. No tengo problemas en invitar una tacita de azúcar, un pedazo de pan pero mis cereales no los comparto ni con mi mejor amigo y se que suena feo pero es un problema que tengo que tratar (?)
Hojas del cuaderno: cada vez que alguien arranca una hoja de papel o malgasta una hoja de la impresora siento que estrujan mi corazón, por eso es que no soporto la idea de tener que arrancar una para compartírsela a alguien. ¡Cuando era chica reciclaba papel! Juntaba borradores y otras hojas que ya no servian, las mezclaba en la licuadora con plasticola y otras cosas mas y hacia papel reciclado. ¡Tengo que enseñarles a hacer eso alguna vez!
Celulares: soy capaz de mantener estos aparatos por años en un estado casi de caja y resulta increíble como a las pocas horas de prestarlos vuelven a mí como si hubieran ido a Iran con ellos.
Regalos: si me regalaron una taza, una gomita para el cabello, un cuaderno, un esmalte u otra cosa, ¡lo que sea! No puedo compartir eso. Para mi los regalos son sagrados y si me regalaron algo, ese algo no puede pasar de estar en mi poder a estar en el de otra persona ni por dos segundos. De ocurrir esto siento que estoy siendo infiel.
El control remoto: no solo por el hecho de que compartir esto significaría someterme a las novelas brasileras y chilenas de mi hermana sino que también significaría la destrucción del control en si. Que este artefacto pase a estar en su poder es como darle a un bebe tu celular. Sabes que va a terminar roto en algún lugar de la casa o peor, que no vas a volver a saber de el nunca más.
El nombramiento de mis gatos: y sonara tonto, pero no soporto que nombren a mis gatos. Como hija y hermana mayor de la casa creo tener todo el poder y posicionamiento (?) de bautizar a mis gatos con los nombres que yo quiera. Pero no, en casa si yo le digo “Marmota” a uno de ellos, mi hermana se pasa diciéndole “Castle” cuando yo no estoy. El gato sufre de problemas de identidad y yo el que se eleven contra mi autoridad.
El asiento del copiloto: siempre que salimos en familia quiero estar al lado de papá, lo que hace que mamá y yo discutamos durante 20 minutos por ese lugar. No que “es mi marido”, no que “es mi papá” y así, hasta que a veces, me cede el lugar y otras no. En el caso de no tener el asiento de copiloto, el asiento al lado de la ventana tiene que ser mío. Creo que sufro de complejo de perro viajero. (?)
Respuestas durante un examen: que la amistad y el compañerismo, oh divino tesoro, es algo que hay que cuidar y todo pero NO, si algo que no quiero, no puedo y no quiero de vuelta es tener que dar respuestas durante los exámenes. Cuando se trata de rendir, exijo lo mismo que durante el trabajo o la realización de una tarea en clase: silencio sepulcral. Caso contrario, terminamos, amigo (?)
El tiempo durante una llamada: cuando estoy hablando por teléfono no soporto que, primero, no se den cuenta de que estoy ocupada y me hablen mas tarde y segundo, que hagan lo mismo cuando alguien esta hablando conmigo. Me parece una falta de respeto enorme, salvo que sea un urgencia (los alienígenas hayan secuestrado a media humanidad, haya empezado una guerra o se hayan extinguido los pandas) pausar una llamada para atender a alguien que no ve que estas con el celular en la oreja es algo que no soporto. ¡Deberían multar a esas personas!