Vocales

Pasamos horas preparando el viaje, despejando el humo y las risas, sin apenas contener esas ganas de ser unos locos visionarios. Pero ¿de qué sirven unas maletas cuando se siente orbitar la tierra bajo nuestros pies? Unidos y al unísono formábamos un eje perfecto con el universo... éramos viajeros de nosotros mismos. Quietos, girando, dejándonos llevar en ese vals de tiempo envuelto.
Sólo teníamos palabras, pero palabras aún desnudas de significado.
Sin brújula ni equipaje, nutridos únicamente por nuestros besos, nos adentramos en las dunas con esa fe mesiánica de poder separar las aguas del Mar Rojo. "Tu piel junto a mi piel, esto es lenguaje" - pensamos - pero nada dijimos porque las palabras seguían suspendidas en el aire como leves moléculas sin suelo donde posarse. Tuvimos que crear un mundo, habitar la primera mañana de ese mundo leyendo la escritura del viento en las arenas del desierto.
TEO.


.- Partiendo del poema de A. Rimbaud (voyelles) .. un pequeño y sencillo
homenaje a uno de mis poetas predilectos)