Volviendo a empezar: Prólogo.

<< Existe un punto preciso en el que queremos cambiarlo todo, es ahí cuando nuestra vida comienza a cambiar. >>
Los ojos de un chico están puestos en los de todos sus amigos, es decir, es el espectador del grupo. El que sabe todo de ellos pero pocos saben sobre él. Es terrible cuando estás harto de ser el actor secundario, pero está bien cuando decides ser el actor principal de tu propia historia. Felipe decide dar un cambio a su vida, comienza a vivir su propia vida, pero tampoco está preparado para ello. Está tan acostumbrado con vivir a la sombra de sus amigos, que la inseguridad siempre va a estar presente en su actos.
El texto está escrito como si de un diario se tratase, así como cada persona que escribe uno y cada noche relata lo más impactante del día, resaltando algunos pequeños detalles. En esta nueva etapa de su vida, comienza a ver un gran cambio: los amores imposibles pasan a ser reales. Los problemas que veía en los demás, ahora le ocurren a él. Y los consejos que el daba, son aquellos que necesita ahora.
A pesar de ser el escritor de su propio diario, habrá momentos en los que sus mejores amigos sigan siendo los protagonistas de su mismo día. No todo cambia de golpe, y hay días en los que estás en la sombra por pereza a destacar.
Así mismo, la historia comienza un día en las fiestas de su pueblo dónde todo el mundo podrá ver el cambio de su propio cuerpo. Ya no es el chico que conocían, al menos, físicamente. En aquella fiesta darán inicio a algunos de los problemas que, puede, se resolverán a lo largo de la historia. La vuelta del primer amor o el mismo amor actual. Peleas entre amigos o hipótesis sobre futuros problemas.