15- Continuación… Capítulo 14 “Un Consejo muy especial”

Francis abre la puerta pero esta no se mueve mucho. Alexis se le queda mirando y su tía se ruboriza, entonces hace más fuerza hasta el punto de apoyarse en sus pies pero nada sucede. Entonces en eso se escucha algo como si abrieran un cerrojo, luego aparece una señora de mediana edad, ve a Alexis y a Francis que se limpiaba la frente.

–  ¿Señorita Astorga, por qué esta sudando? –Francis mueve su cabello y luego le contesta.

–  No pasa nada Ambrick, no entiendo porque la puerta está cerrada. –Ambrick era una persona de unos 55 años más o menos, de cabellera color castaño claro vestía un vestido largo de una sola pieza de color azul marino. Alexis al verla vio que esos ojos verdes esmeralda se fijaban en su persona.

–  Por fin hará su presentación oficial señor Astorga. –Alexis mira a Francis y esta le dice.

–  Perdona sobrino, no te he presentado. Ella es Relena Ambrick la subdirectora de Rosswood. –Alexis recordaba ese nombre que vio en esa carta, se ruborizo al pensar que no le tomo importancia tal nombre, pero ya estaba frente a ella.

–  ¿Bueno van a pasar o se me quedaran mirando? –Francis mira a Alexis y este hace lo mismo. Relena abre la puerta pero hacia consigo no hacia fuera como lo hacía Francis, esta ultima sonríe tímidamente ante la mirada amistosa de Relena, luego ambos pasan la puerta, había una pequeña ante sala, a los lados habían sofás y mesas, y al centro, unas puertas de madera maciza, con la insignia de Rosswood y arriba un mensaje que dice. “Bienaventurados aquellos que tienen paz en su corazón porque así su poder no tendrá límites”. Luego Relena abre las puertas  y una intensa luz enceguece a Alexis, quien extrañamente siente una intensa calidez que le alivia de inmediato su asustadizo corazón.

   Al recobrar la vista ve algo majestuoso, algo que nunca vio jamás, un salón cuyo techo le hacía recordar la caparazón de una tortuga pero una tortuga de cristal que permite ver la luna inmensa, gigantesca como si uno pudiera tocarla. En sus oídos de inmediato entra el ruido de platos y conversaciones, baja su cabeza y se da cuenta que está parado en un balcón tipo mirador. Se separa de sus acompañantes y se acerca al balcón y ve el Salón comedor en toda su grandeza. Muchas personas  estaban sentadas en 4 largos mesones que cruzaba el gran salón comedor. Ve que los del extremo superior usaban los colores rojos de Alinsef, la alianza del fuego. Luego seguían, los que usaban los colores celestes de Asgloub, la alianza del viento. Después estaban los Vanscint con su color azul distintivo que representaba la alianza del agua y por último los Vardein, con el color café que representaba a la Alianza de la tierra. Más al fondo, frente a las 4 mesas estaba la mesa de profesores que estaba a un nivel mayor de los 4 mesones y  la persona del centro se pone de pie silenciando al salón por completo. Esta persona aplaude y luego todos le siguen. Alexis no entendía por qué aplaudían, mira a su tía y pregunta.

–  ¿Por qué están aplaudiendo? –Francis posa su mano en el hombro de su sobrino y le contesta.

–  Porque le están dando la bienvenida al último alumno que se integra a Rosswood. –Alexis mira al salón y pregunta.

–  ¿Y quién es? –Francis le contesta.

–  Eres tú mí querido sobrino, tú eres el último alumno en integrarse a Rosswood. –Relena le dice.

–  Es mejor que bajemos, para que recibas como se debe tu bienvenida. –Alexis le entro el pánico, y su caminar era muy tieso, mientras recibía los aplausos y las miradas de cientos alumnos que solo lo seguían con la mirada, todo esto mientras baja por una de las dos escaleras donde se podía bajar al nivel inferior del salón, todo eso acompañado de Francis y Relena. Luego de bajar caminan hacia el centro del salón para luego caminar por el pasillo que estaba entre las dos mesas. Los aplausos eran intensos y las miradas, algunas de alegría y otra de sorpresa hacían que Alexis deseara no tener rostro, estaba muy ruborizado y apenado por todo lo que pasaba. Llegaron frente a la mesa de los profesores, frente a frente de Ludendorff que estaba vestido muy elegantemente con un traje lila con estrellas diminutas de color dorado. Este levanta su mano y todo el salón se silencia, la mano estaba en alto y luego Francis y Relena se van a sus puestos en la mesa, luego el director habla.

–  Estamos aquí, para dar la bienvenida al último integrante de este año que se une a Rosswood. –Luego mira a Alexis y le dice. –Alexis Astorga, te damos la bienvenida y espero representes a un Vanscint en todas sus características, sin más que decir pido un aplauso al último que se integra a Rosswood, el ultimo Vanscint Alexis Astorga. –De inmediato los aplausos cubrieron el salón y Alexis rojo de vergüenza mira a su tía que aplaudía y a todos los profesores que lo hacían también. Ludendorff lo aplaudía y le cerraba el ojo. Alexis poco a poco se sintió lleno de calidez y un sentimiento cálido nace de su corazón, un sentimiento que lo hace cruzar los brazos para después ocultar su rostro y su mirada. Luego siente los cálidos brazos de una persona, y una voz conocida que le dice a su oído.

–  Ven, ocupa tu lugar en la mesa de los Vanscint, bienvenido hermano, bienvenido a Rosswood. –Alexis ve que es René, su hermano, quien lo abraza y lo lleva a la mesa de los Vanscint. Alexis se limpia las lágrimas de sus ojos, y alcanza a ver a Abraham, Miriya, y Amy, las dos chicas llorando y Abraham soportando las lágrimas, los 3 aplaudían muy fuerte. René sienta a Alexis y este de inmediato recibe los afectuosos saludos de los demás Vanscint. Los aplausos lentamente desaparecían y Alexis se sentía más tranquilo, luego ve las delicias de la mesa y luego escucha la voz de Ludendorff que nuevamente se dirige a los alumnos.

–  Bueno después de este largo recibimiento podemos seguir cenando. –Todos vuelven a sus alimentos, y otros siguen conversando. En tanto Alexis ve la mesa y ve muchas delicias, y lentamente su corazón se tranquiliza al ver tantos manjares, en eso Abraham le pregunta.

–  ¿Alexis estas bien? –Alexis lo mira, y le contesta.

–  Estoy mejor, no esperaba este recibimiento. –Abraham le dice.

–  Pues te lo mereces amigo, ¿Pero y tus heridas? –Alexis le contesta mientras toma un trozo de pollo y lo coloca en su plato.

–  No tuve heridas de consideración, la enfermera me decía “tú de nuevo por acá” así que procurare de no ir a la enfermería por un buen tiempo. –Alexis muestra una pequeña sonrisa a sus amigos, y estos se tranquilizan al verlo sonreír.

La primera cena de Alexis en Rosswood fue provechosa, se alimentó como hace días no lo había hecho, a tal punto que probó todo lo que había en la mesa, no participo mucho en las variadas conversaciones, se había centrado solo en lo que había en la mesa pero cuando el postre fue servido, se dedicó a escuchar. Oyó a hablar a Miriya y a Amy sobre una clase llamada “Lenguaje Universal del Pensamiento”. Ellas decían que la clase estaba muy difícil pero a la vez era muy entretenida. Alexis se apeno al escuchar eso porque las clases las iba a tener por separado de sus amigos ya que su tía y el director se las iban a dar hasta que se pusiera al día con el resto de sus compañeros. Con mirada melancólica mira a sus amigos, y luego ve hacia la mesa de profesores y ve a su tía conversando amenamente con otro profesor. En su mente mientras tanto, se pregunta qué cosas nuevas aprenderá.

Cuando termino la cena, Alexis ya se sentía cómodo en la mesa de los Vanscint ya que muchos lo saludaron e incluso algunos le pidieron autógrafos. Luego, junto a sus amigos y todos los de primer año siguieron al prefecto, un tipo al que Alexis no conocía en absoluto, solo sabía su nombre que era Alastor Morientes y que era del mismo año que su hermano mayor, de tercero. Este los dirigió hacia la escalera principal, que se alzaba en el Salón Central. El ambiente era muy cálido aunque todo estaba alumbrado con velas y luces suaves, tal ambiente Alexis lo reconfortaba, después vio o se lo imaginaba que los cientos de cuadros tenían movimiento, esto ya le había pasado antes pero era muy raro, y se lo dijo a Amy quien le dijo.

–  Ella es la madrastra del campo, así se le llama creo.

–  ¿Pero vez que se mueve? –Amy con mucha naturalidad le contesta.

–  Pues claro, todos los cuadros de aquí tienen vida. –Alexis extrañado le dice.

–  Eh, yo no los veo así. Se ven como simples pinturas antiguas. –Amy suspira por lo bajo y luego le dice, mientras suben las escaleras.

–  Mientras no creas en ti, ellos no se moverán, libera tu mente niñito. –Tales palabras Alexis las toma como una orden pero aun así no podía creer, entonces hizo un experimento le hablo al próximo cuadro que había.

–  ¿Hola cómo estás? –Y del cuadro que era de un señor con bigotes le contesto.

–  ¿Bien y tú? –Alexis quedo helado del miedo y contesto con un leve “bien, gracias” de ahí no hizo más experimentos hasta llegar al tercer piso. El prefecto llama a Alexis que estaba al medio de la gran fila y le dice que se acerque. Este lo hace y mientras se acercaba, muchos hablaban por debajo y al llegar el prefecto que era un chico rubio le dice una palabra.

–  La clave es…–Por alguna rara razón el Alastor se ruboriza y le dice. –Calzón roto. –Alexis extrañado le pregunta.

–  ¿Calzón roto? –El prefecto le dice.

–  Tienes que pasar a través del espejo y di esa palabra, con voz clara y con fuerza, esa es la clave. –Alexis se dio vuelta y vio un espejo (cosa rara porque tal espejo hace un poco no existía, era solo una pared) Extrañado Alexis no entendía como podría pasar por un espejo. Mira a todos impaciente para que él pasara. El prefecto lo anima, Alexis mete una mano y esta atraviesa el espejo y luego decide pasar completamente y entra una densa oscuridad, una voz tenebrosa le pregunta.

–  ¿Cuál es la clave? –Alexis dice

–  Calzón roto. –La voz le contesta.

–  Exacto pasa Vanscint a tu casa. –Alexis pasa y la oscuridad se vuelve luz y ve algo majestuoso, un gran salón circular, lleno de retratos que para Alexis no se movían en lo absoluto y todo el salón lleno de colores azules con detalles celestes o blancos, que eran los colores de su alianza. Además a un rincón había una gran pecera lleno de peces más raros que él nunca había visto. Al centro había una alfombra con el signo de Vanscint en su superficie y un poco más a la chimenea había un juego de sofás de color negro que se veían muy cómodos, en eso escucha un grito y se da vuelta y ve entrar a una chica que pasa muy disgustada diciendo.

–  ¡Guardián depravado! –Alexis se acerca a la chica que era pálida pero de cabello castaño y le contesta un poco malhumorada.

–  Es este guardián que le gusta mirar por debajo de la falda a las chicas. –Alexis quedo anonadado y se quedó esperando a sus amigos. Sabía cuándo entraba una mujer o un hombre. Cuando entraba un hombre, este lo hacía muy tranquilo pero cuando era una mujer siempre había un grito o malas palabras o enfados. Al final lo encontraba cómico. Cuando sus amigos entraron, estos le enseñaron las alcobas que estaban: Para las chicas arriba y para los chicos abajo. Junto a Abraham llegaron a un pequeño salón circular con alcobas cuya entrada estaba del 1 al 8 representando la totalidad de los años que se está en la academia. Entraron a la alcoba 1 donde era una alcoba rectangular con muchas camas. Luego fueron al salón Vanscint y entablaron conversa junto a las chicas pero pronto el cansancio lo comenzó a atacar y luego que su hermano llego para charlar un poco. Alexis se fue a dormir pero esta vez durmió lleno de paz y tranquilidad.

Al otro día las clases con Francis, al contrario de la primera fueron muy normales. Alexis se dio cuenta que su tía era muy estricta. Quizás, pensó que era así ya que estaba muy atrasado en sus clases pero en si eso no le importaba, igual se había dado cuenta que tenía un don mágico que solo le faltaba desarrollar, mismas palabras que su tía le dijo en la clase de Lenguaje Universal de la Magia; Después le toco Artes de Vuelo, y aunque fue una clase solo teórica su ansiedad por aprender a volar le desconcentraba mucho y Francis lo increpaba cada vez que lo pillaba paveando.

Finalmente, y aunque nervioso estaba, llego la clase que esperaba. Su primera clase con el director de Rosswood. Un honor, decía su tía ya que el mismo director le iba a enseñar Lenguaje Universal del Pensamiento y solo a él. Al llegar a la sala acordada por el director, y avisada por anticipación, el momento se acercaba hasta que… La puerta se abre y una cabeza se asome y pregunta.

–  Ah lo siento, me equivoque de sala. –Alexis se fija que no era más que un chico despistado. La puerta se cierra y en segundos la puerta se abre de nuevo, entrando Ludendorff.

–  Buenos días Alexis. –Alexis estaba congelado, Ludendorff de cuerpo joven, de unos 24 años, vestido con un traje de artes marciales de color azul con cinturón blanco. Este lo mira y le dice.

–  Que tal mi buen Alexis, ¿Cómo estamos para nuestra primera clase? –Alexis veía que la estatura de Ludendorff no era alta, no así la presencia que lo amedrentaba pero dicha presencia aminora convirtiéndose en una presencia amistosa y eso Alexis lo reconforta y después escucha la voz del director que le dice.

–  Veo que sientes las presencias de las personas, no las captas pero las sientes en tu cuerpo. Te felicito, eso es un gran avance para un alumno de primer año. –Alexis ya más tranquilo le dice.

–  Sí, pero es de hace poco que siento las presencias en mi cuerpo, igual solo siento cuando me amedrentan o son amistosas.

–  Me da gusto pero bueno toma asiento, mientras te explico lo que es Lenguaje Universal del Pensamiento. –Alexis toma asiento en la primera fila del centro y Ludendorff se sienta en el mesón y comienza con su charla.

–  Lenguaje Universal del Pensamiento es un ramo donde aprenderás a controlar tus emociones y a evolucionar en el uso de tu cerebro, es un ramo que cuenta mucho de la concentración del individuo, meditación, y por sobre todo seguridad en ti mismo de que puedes lograrlo. Hay muchas técnicas de concentración como también de despertar lados de tu mente que están dormidos, con los años, poderes obtendrás y también la habilidad de defenderte… Sabes, por una fuente de confianza sé que hay cosas que tú sabes hacer, como la telequinesia, ¿No es así? –Alexis sonríe diciendo.

–  Sí pero no la controlo, solo sale en esos momentos cuando tengo en riesgo mi vida. –Ludendorff le dice.

–  Es que en esos momentos es cuando tu mente llega a un punto alto de concentración.  Para cambiar eso y que lo hagas a tu antojo se necesita mucha práctica y concentración. ¿Alexis te has preguntado que son los Leucomidinucleicos? –Alexis había escuchado eso y recordó lo que le habían dicho.

–  Es un elemento en la sangre que me permite ser Magín o un mago. –Ludendorff sonríe y le dice.

–  Así es, pero esa es la definición más simple. Los Leucomidinucleicos es un ser del elemento de la luz la cual vive y se desarrolla en la sangre de cualquier ser vivo; está, esta en simbiosis con el cuerpo dándole una energía especial que alarga la vida y también le proporciona las habilidades mágicas o magines; dependiendo de la evolución que la persona tenga y si el desarrollo es de excelencia, la persona puede poseer ambas artes. Este ramo potencia tus habilidades magines, las descubre, las desarrolla y las potencia, ya que con ella se hace posible que tu función cerebral aumente y tus habilidades físicas, mentales y mágicas aumenten. Todavía no se sabe hasta qué punto los Leucomidinucleicos ejercen poder entre nosotros o hasta qué punto nos hace fuertes. –Alexis quería por dentro saber hasta dónde estaba su límite y una voz en su mente le responde.

–  Hasta donde tú desees llegar. –La voz era de Ludendorff quien lo miraba muy amistosamente para después decir.

–  Comencemos, quiero que cierre tus ojos y te relajes, que solo te concentres en tu respiración y no pienses más que solo en el color blanco…

Lunes 22 de Agosto del 2191, Ciudad Academia de la F.A.T.U. (Fuerzas Armadas de la Tierra Unida)

La Ciudad Academia de las Fuerzas Armadas de la tierra Unida era verdaderamente como su nombre lo dice, una ciudad. Ubicado donde estaba la antigua Escuela Militar pero ahora ocupa más terreno gracias a la nueva estructuración que se debió hacer en la ciudad. Solo había un edificio central que tiene 20 pisos con un tamaño de casi dos estadios de Fútbol y rodeado con grandes zonas verdes y un estadio deportivo. En su interior había un gran gimnasio equipado con pesas, pistas atléticas, cuadriláteros de luchas y un salón emulador de batallas. También unas cuantas salas audiovisuales, auditorios, cientos de salas de clases, bibliotecas, unas salas de telecomunicaciones, baños y camarines de lujos, salas de entretenimientos y los dormitorios de los 3000 cadetes que alberga. Entre unos de los tantos pasillos de paredes color crema y baldosas blancas estaba una chica con su pelo finamente tomado ella, vestida con el uniforme azul acostumbrado de los cadetes,  caminaba  tranquilamente cuando en eso se encuentra con otro chico que le dice.

–  ¿Susana que haces, no tienes clases? –Susana lo mira, su mirada era melancólica y temerosa a la vez. Alejandro al verla le dice.

–  ¿Qué te pasa, porque tienes esa mirada? –Susana le contesta.

–  Recibí un llamado del Director Rúbeos, me contó que por mi rendimiento es posible que tarde o temprano me toque luchar en una guerra real. –Alejandro se sorprendió por la noticia, pero no sabía si felicitarla o consolarla.

–  Pero guau, no sé qué decirte, ¿O sea si sigues así como estas, te llamaran a pelear? –Susana mira por la ventana mientras le dice.

–  Las constantes luchas contra los Emuloides han dado muchas bajas, y se necesitan soldados y de los mejores, me contó que eso no significa que me gradué antes, más bien es como una prueba real para mí. Aunque me dijo que estuviera tranquila porque es muy temprano para ello, pero que quizás con una llamada de un general de alto rango todo cambie. –Alejandro se sintió aliviado y además le dice.

–  Entonces siéntete tranquila, no creo que te llamen, demás que hay algunos con más poder, nosotros somos los que menos oportunidad tenemos por nuestra edad. –Susana sonríe diciendo.

–  Es lo mismo que yo pensé, pero el director me dijo que en esta guerra, la experiencia está contando pero los mejores soldados son los menores de 18 años. Me contó que un chico de 9 años de unas de las Capitales del continente oceánico ya es Líder de Grupo por su experiencia en batalla.

–  Un niño de 9 años, pero es menor que nosotros por un año. –Susana sorprendida ve a Alejandro y le pregunta.

–  ¿Qué no tenías once años? –Alejando la mira y le dice.

–  Los cumplo en Diciembre.

–  ¿Entonces supongo que esperas la carta el próximo año o no? –Alejandro no entiende mucho eso de la carta, y Susana al ver esa cara de extrañeza, se impacienta diciendo.

–  Alejandro por favor, ahora que se sabe de las Academias de hechicería y fuerza Magín casi todos los niños que cumplen los once esperan la carta de aviso, incluida yo. –Alejandro por dentro también se sentía ansioso pero la comodidad en la Academia lo tenía muy tranquilo.

–  ¿Alejandro qué hora es? –Alejandro mira su reloj y le contesta que son las 16 horas a lo que Susana le dice.

–  Es mejor que vayamos al ala sur tenemos clases de Introducción de tácticas de combate. –Alejandro y Susana se van hacia el ala Sur, cuando cruzaban el pasillo se les une Natalia que al verlos le dice.

–  ¿También van a clases? –Los dos le dicen que sí. Natalia decide caminar con ellos pero al lado de Susana, luego de unos segundos le pregunta.

–  ¿Has sabido algo de Alexis? –Susana la mira y le contesta.

–  No, no he sabido nada de él, ¿y tú Alejandro? –Alejandro mueve la cabeza diciendo que no. Natalia entonces dice.

–  Según sé por una hermana de una prima, que Lichstenstein es una academia asombrosa, quizás Alexis este ahí también. –Alejandro se queda pensando y luego le dice a Natalia.

–  Mmm según sé, Alexis no está en esa academia sino que está en Rossuwood. –Susana mira a Alejandro muy extrañado y le dice.

–  Donde la viste, ¿Rossuwood? Es Rosswood, Rosswood. ¿Natalia de donde es tu prima? –Natalia le contesta.

–  De Europa. –Susana piensa y gracias al hermano de Alexis, esta sabía algo de las Academias, y sabía que había más de una en todo el mundo.

–  Quizás Lichstenstein sea una Academia de Europa y Rosswood sea para América bueno no estoy muy segura. –Natalia le dice.

–  Creo que sí, pero bueno ojala me llegara la carta el próximo año, Ahhhh se me olvidaba. ¿Supieron lo que paso en el Cementerio General? –Susana y Alejandro se le quedan mirando. Natalia al ver sus caras se da cuenta que no saben nada así que les cuenta. –Por las noticias dijeron que gran parte del terreno del Cementerio se cayó, formando un agujero de proporciones. –Los dos quedaron boquiabierto y Alejandro le pregunta.

–  ¿Pero cómo paso, fue el terreno, que paso? –Natalia le contesta.

–  Nadie sabe, pero lo más extraño que fue justamente la sección nueva que se creó para los caídos en la primera guerra contra los Emuloides.

–  Es extraño que pase eso, ¿No lo creen? –La pregunta de Susana crea desconcierto en ambos y Alejandro les dice.

–  ¿Estoy equivocado al decir que nuestros compañeros del Instituto, algunos, están enterrados ahí? –Susana le contesta.

–  Ninguno está enterrado en el Cementerio General, todos se enterraron en el parque del Recuerdo. –Alejandro suspira diciendo.

–  Menos mal. –Natalia agrega diciendo.

–  En las noticias no dijeron de cuáles podrían ser las razones del hundimiento del terreno pero se está investigando. –Los 3 se quedaron en silencio, estaban pensando cual podría ser la razón y los 3 llegaron a una sola causa, esperando estar equivocados.

CONTINUARÁ…

EL PRÓXIMO LUNES 23 DE NOVIEMBRE DEL 2015 CON EL CAPÍTULO 15.

Dejen sus comentarios y sugerencias sera de gran ayuda. Espero les guste la lectura escrita por mi. Sigan leyendo e invitando a quienes les guste una buena lectura.

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Crónicas del Magín Milenario episodio 1 (c)
2014

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