Capítulo 15
“La Llave”
– Vamos inténtalo de nuevo –La voz de Francis se escuchaba por todo el salón, solo estaba ella y Alexis. Este último un poco fastidiado.
– Pero más que trato no me sale el hechizo de levitación –Francis mira a su sobrino y le dice.
– Con ese ánimo nada te saldrá, te dije que la magia depende también de tu estado de ánimo. –Alexis se queda en silencio y luego se pone en posición para, al parecer, intentarlo de nuevo
– Fíjate en mi pose, y en la manera como tengo tomada la vara, luego la agitas formando una J desde abajo y dices “Isandus” –Alexis hace lo mismo que su tía y dice “Isandus” pero nada sucede. Alexis cierra los ojos y luego gruñe para después darse vuelta hacia su tía y agita su vara violentamente al suelo diciendo.
– Esto es ridi… –De la vara sale un haz de luz roja y choca con el piso y lo triza. –Alexis ve lo que hizo pero su tía Francis le recrimina.
– ¡Vez, no puedes perder el control de tus emociones! Te estoy diciendo que tus emociones afectan a la varita. Lo que hiciste es un hechizo de furia y eso es muy peligroso. –Alexis mira al suelo, ve el piso trisado y luego ve a su tía que le dice un poco más calmada –Alexis no puedes perder el control así tan fácil, ¿No sé qué te pasa?
– No me pasa nada, solo que no me acostumbro, me siento ridículo. –En eso suena el timbre, signo de que la clase ha terminado. Francis entonces le dice.
– Bueno no te veré hasta mañana, la próxima clase te toca con Akamatsu y la clase de Transformaciones y Pociones te las hará el director pero antes que te vayas. –Francis saca su vara y pronuncia “Shalling” –El haz de luz amarillo llega a la mano izquierda donde Alexis tenía tomada su varita. Luego la vara sube hasta su antebrazo y simplemente se pega en su piel. Alexis que veía atónito tal acción mira a su Tía y esta le dice. –Desde ahora tendrás tu vara fusionada a tu brazo, eso quiere decir que tendrás que mantener tus emociones de furia controlada, ahora “Amplitus corpus protección” –Una malla de luz azul envuelve a Alexis en segundo y desaparece. –Esto es para proteger a tus cercanos por si las dudas.
– ¿Por si las dudas? –Francis sonríe ante la pregunta de su sobrino para después decir.
– Pues claro no puedo arriesgarme a que te enfurezcas y aturdas a alguien cercano a ti. Ah otra cosa ten cuidado eso si a donde apuntes, el campo solo te protege arriba y alrededor, al suelo no y te sugiero que también te agaches. –Alexis se extraña y pregunta.
– ¿Qué me agache? –Francis se retira, dándole la espalda y luego le dice.
– Si agáchate si no lo lamentaras, nos vemos mañana Alexis, adiós. –Francis sale del salón, extrañamente algo apurada. Alexis la sigue pero cuando sale del Salón su tía ya no estaba. En eso escucha unas voces.
– ¡Ey Alexis! –Este mira hacia el lado derecho y ve a sus amigos. A Amy, Abraham y Miriya, quienes le dicen.
– Recién salimos de clases de Lenguaje ¿Y tú qué haces? –Alexis vuelve a mirar hacia donde posiblemente se fue su tía y luego mira a sus amigos y les dice.
– Yo también tuve la misma clase pero con la profesora Francis. –Abraham le dice.
– Qué suerte tienes que tu propia tía te haga clases. –Alexis dice en voz baja.
– Vaya suerte que tengo. –Se mira su brazo izquierdo con su vara pegada en el antebrazo, después se dio cuenta que fue mala idea hacerlo ya que Miriya en voz alta le pregunta que le paso en el brazo, y después tuvo que contarles a sus amigos. Mientras les contaba Amy tenía tomado su brazo y lo miraba con atención. Alexis le dice.
– Oye me siento como una rata de laboratorio, deja mi brazo en paz. –Amy le suelta el brazo y le dice mientras se limpia las manos.
– Bueno, bueno, además no te creas tanto “Cobra” –Alexis queda con un gran signo de interrogación en su rostro. Abraham también y Miriya se ríe. Alexis muy extrañado le pregunta.
– ¿Qué tiene que ver una Cobra con lo que la profe me hizo? –Amy le dice.
– ¿Guau un “otaku” no sabe que es “Cobra”? –Alexis la piensa muy bien y luego recuerda que hace mucho tiempo había una serie que se llamaba así. Luego mira a Amy y a Miriya que se reían a carcajadas y luego les dice.
– No tiene nada que ver lo uno con lo otro, chistositas. –Abraham le pregunta que es “Cobra” entonces Alexis le explica y luego es él quien se ríe. Alexis avergonzado se ofusca y se va dejando a sus amigos que se reían. Estos lo siguen diciendo.
– Pero no te molestes, si es una bromita. –Alexis se da vuelta y muy serio les dice.
– ¡Siii una bromita… demonios! –Los 3 llegan y abrazan a Alexis que dice. –Ya, ya, ya no me abracen. Vamos al salón de los Vanscint mejor. –Amy dice.
– ¿Pero que no es para el otro lado? –Alexis cierra los ojos y solo dice.
– ¡Demonios!
El Salón de los Vanscint está en el tercer piso, al otro extremo del castillo, para llegar al Salón tienen que pasar por muchas escaleras y luego llegar al espejo que es la entrada al salón. El espejo llamado “Galius” es un espejo mágico que no dice si eres bonito o bonita, más bien solo deja pasar a los que son de Vanscint y a los profesores encargados de Vanscint. Galius a pesar de eso es desconfiado por lo cual al pasar por el espejo este los detiene y les pide la clave, si el estudiante o el profesor no lo saben, son dejados en el último piso del castillo pero el único defecto es que las claves que usa son algo grotescas y vergonzosas, además le gusta mirar por debajo de las faldas de las niñas pero aun así es muy fiel a Vanscint
– Bueno ya llegamos, ¿Quién pasa primero? –Alexis pasa primero. Pasa a través del espejo, la zona del espejo era muy acuosa, y escucha una voz fuerte que le pregunta.
– Contraseña Alexis Astorga. –Alexis se ruboriza diciendo.
– Testículos de Mono. –La voz le contesta.
– ¡¡¡Correcto!!! La próxima contraseña es “Rabo de perra” –Alexis coloca una mala cara de asco y luego sigue su camino saliendo de la zona del espejo y entrando al Salón, luego se aleja y después de unos segundos Amy sale muy asqueada, diciendo.
– ¿Por qué no puede dar una clave más decente? –Alexis le dice.
– ¿Cerraste las piernas? –Amy se ruboriza y luego molesta quiere entrar al espejo pero Miriya sale riendo y diciendo.
– Ja, ja, ja quería verme mi ropa interior, espejo pervertido.
– ¿Qué hiciste Miriya? –Esta vez a Amy y le contesta.
– Un hechizo que me pega el vestido a las piernas, me lo enseño la tía de Alexis, ja, ja pobre no me vio mi ropa interior. –El último en salir es Abraham que dice.
– Las contraseñas de ahora no son tan burdas como las demás. –Alexis sonríe y en eso Amy les dice.
– Nos vemos en 5 minutos, para ir a la clase de Artes Marciales. –Abraham y Alexis se fueron al dormitorio de los hombres de primer año. Mientras lo hacían, Alexis veía de reojo su brazo izquierdo, se preguntaba cómo iba a hacer la clase, tendría que contenerse para que nada saliera de la varita pegada a su brazo. En eso sale de sus pensamientos cuando escucha a Abraham decir.
– ¿Cómo te ha ido con las clases con Ludendorff? –Alexis lo mira y le contesta.
– Son difíciles, además es estricto pero he avanzado mucho en comparación con mi tía.
– ¿Y qué clases te hace el director? –Ambos llegan al dormitorio, se encuentran con algunos estudiantes y mientras se cambian de ropa, Alexis le contesta.
– El director me hace Transformaciones, Pociones, Historia de la Magia, Lenguaje Universal del Pensamiento, Botánica y Artes de Defensa. Mi tía me hace Lenguaje Universal de la Magia, Historia del pensamiento, Artes de vuelo, Astrología y Ciencias Oscuras.
– Así que se reparten las clases ¿Pero según tú, te va mejor con Ludendorff que con la profesora Francis? –Alexis que estaba terminando de colocarse la ropa para la clase de Artes Marciales le contesta.
– Así es, pese a que es más estricto que mi tía, entiendo mejor o me salen las cosas. Con mi tía nada me sale y mira en lo que resulto con mi varita pegada a mi brazo izquierdo. Demonios. –En eso entran Amy y Miriya. Abraham se tapa el pecho diciendo.
– ¿Oigan cómo pueden entrar aquí? –Miriya se le queda mirando para después decir.
– ¿Y para que te tapas? Pareces mujercita. –Amy lo mira y luego mira a Alexis y le pregunta.
– ¿Estás listo? –Alexis le dice que sí y luego los 4 salen del dormitorio de hombre mientras Abraham pregunta que como las chicas pueden dejarle entrar a lo que Miriya le dice, mientras bajan las escalas.
– Porque somos chicas, y somos confiables. –Abraham reclama diciendo.
– ¿Y nosotros no somos confiables? –Amy y Miriya solo le contestan con una mirada que lo dice todo.
La clase de Artes Marciales son en el patio del Castillo por lo cual debieron bajar al primer piso. Alexis a pesar de haber pasado por los pasillos ya muchas veces, todavía se quedaba mirando los cuadros con vida, de gente que se movía o hacia cualquier quehacer. Lentamente había asimilado el que una chica o un señor de cualquier cuadro hicieran cosas como si fuera solo una ventana a otro mundo, o los adornos que a veces tenían vida y las murallas de color azul cielo que en la noche cambiaban a un color azul oscuro.
Por la inmensidad del castillo había dos formas de llegar al destino requerido y a la hora señalada. Una era usar los atajos para acortar camino y lo otro era usar los ascensores, que estaban ubicados en el pasillo central. Los 4 amigos usaban más los ascensores que los atajos ya que era la única forma de llegar más rápido, varios las usaban, por tal motivo, iban casi siempre llenos. Las escaleras que eran largas también son muy usadas pero se estaba prohibido correr y eran las personas de los mismos cuadros que siempre llamaban la atención si algo en contra de las normas se hacía.
Alexis se sentía muy bien en Rosswood y con sus amigos lo pasaba muy entretenido, de a poco sintió el castillo como su hogar. A veces se quedaba charlando con los cuadros donde encontró historias y relatos que ellos contaban y que eran muy interesantes. Al llegar al primer piso caminaron hacia el sentido contrario de la entrada del castillo. El patio de Rosswood estaba llegando al gran salón a mano izquierda, los 4 amigos caminaban a paso lento hacia el patio conversando de lo mejor. Amy y Alexis estaban adelante, mientras Miriya y Abraham atrás y normalmente discutiendo.
– ¡No! Superman no se puede comparar con Batman. – Miriya le dice.
– Pero Batman es más inteligente que Superman. Superman lo único que tiene es que tiene súper poderes. –Amy en tanto le dice a Alexis.
– Me pregunto quién ganara en la discusión ahora, ¿Será Abraham o volverá a ser Miriya? –Alexis que tenía su mente en otra parte, no la escucha ni le presta atención pero después de intentar nuevamente, Alexis despierta y este le dice.
– ¿Qué pasa? –Amy lo mira y luego le pregunta.
– ¿Te pasa algo? –Alexis levanta los hombros, para después decir.
– Todo tranquilo. –Aunque en su mente no lo estaba. Amy lo miraba de reojo y Alexis que no quería ser pillado se inmiscuye en la conversación de los de atrás diciendo.
– Oigan entre Superman y Batman, me quedo con Gokou. –Abraham queda sorprendido y luego pregunta.
– ¿Quién es ese tal Gokou? –Amy se da vuelta y le dice.
– Creo que es de una serie de anime no sé muy bien el nombre. –Alexis sonríe y luego mira a Amy y le dice.
– Algo que no sepas de anime je, je. –La mirada de Amy se pone seria, se acerca a Alexis y le dice.
– No soy fanática del anime como tu chiquito. –Miriya y Abraham se ríen y Alexis solo atina a decir.
– Ella, la más vieja del grupo. –Amy que les había dado la espalda, abre los ojos muy sorprendida y se da vuelta diciendo.
– ¿Cómo me dijiste, Alexis? –Alexis decide correr. Amy lo sigue mientras Abraham y Miriya se quedan viendo. Luego de un segundo. Abraham le dice.
– Superman le da mil patadas a tu Batman. –Miriya ve a Abraham y lo critica con la mirada para después irse por el mismo camino que Amy y Alexis, en tanto su amigo luego de un segundo lo sigue diciendo. –Entonces gane, je, je.
Al salir al patio Rosswood ve los setos que formaban desde arriba 3 círculos uno dentro del otro, cuyo centro había una estatua de gran tamaño de lo que parecía ser un mago muy imponente. Sin saberlo Alexis se queda detenido observando la estatua.
– Se ve imponente el tipo ese. ¿Sabes quién es? –Pregunto Abraham que había llegado a su lado, Alexis no sabía quién era y eso que lo había visto tantas veces pero nunca se le ocurrió preguntar. Y fue Amy quien contesto a la duda.
– Es Vladimir. –Alexis vio a Amy y esta, con tan solo ver su cara dedujo la pregunta y la contesta de inmediato. –Vladimir Rosswood, el que fundó la academia hace ya varios siglos. –Abraham la ve y le dice.
– ¿En serio? Guau entonces debe haber sido un gran tipo. –Amy sigue caminando sin antes decirles.
– Dicen que sí pero es mejor que leas más. Yo me voy a clases. –Abraham la persigue suplicando que le cuente sobre Vladimir. En tanto Alexis solo ve la estatua, ahí llega Miriya que le dice.
– Alexis vamos. –Este la ve y decide seguir caminando pero ve hacía atrás y nuevamente sus ojos se fijan en la gran estatua como si esta lo llamara.
En la clase de Artes Marciales estaban reunidos todos los alumnos de primer año de las 4 alianzas. Era la única clase donde las 4 alianzas estaban reunidas, en las otras clases solo se reunían los alumnos de primer año de dos alianzas. Además para Alexis esta era una de las dos clases donde podía estar con sus compañeros aunque también se topaba con una persona que Alexis solo le hacia el quite. Carlos quien ya se había declarado enemigo de Alexis.
Akamatsu era el profesor del ramo de Artes Marciales. Len Akamatsu es un magín de origen Japonés de 40 años de edad que sabe toda clase de artes marciales. Para Alexis esta iba a ser la primera clase de Artes Marciales, la única clase en la cual no se sentía raro. Si no casi en familia. En clases, Akamatsu se dirige a la clase que estaba sentada en el césped del patio.
– ¿Quién me puede decir donde se concentra la fuerza de un mago? –Una chica de gafas y pelo negro le contesta.
– Se concentra en la vara mágica, profesor. –Akamatsu sonríe y luego dice
– Exacto Mariana, los magines y magos concentran su energía en un elemento que amplía sus dones, pero que pasaría si perdieran este elemento. ¿En una batalla, que pasaría? –Amy levanta la mano. Akamatsu le da el permiso de contestar y esta contesta.
– Simplemente el mago o magín queda desprotegido, sin defensa alguna. –Akamatsu sonríe diciendo.
– Exactamente, muchas veces un mago poderoso de alto nivel al perder su varita queda desprotegido, no así el magín aunque igual se arriesga a quedar desprotegido, en fin. Las artes marciales son para eso, para que no dependan de un utensilio, ni nada por el estilo. Con las habilidades que obtengan en estos 8 años que estarán en Rosswood estarán capacitados de defenderse por sí mismo, sin hechizos o poderes mentales. Podrán tener la fuerza suficiente para soportar hechizos al cuerpo o controlar su mente y formar una barrera. El constante ejercicio y la profunda concentración podrán hacer grandes cosas. –Mientras Akamatsu hablaba, Abraham le decía al oído a Alexis, sin que lo pillaran.
– No creo que te cueste mucho ponerte al día en esta clase. –Alexis se le acerca y le pregunto por sus palabras a lo que Abraham le contesta.
– Pues por lo que demostraste contra la profe Francis, está más que claro que sabes de artes marciales. –Alexis sabía que Abraham no estaba equivocado pero con la varita pegada a su brazo, lo mejor era no pelear. –En eso Akamatsu les dice.
– Bueno necesito un voluntario para demostrar lo que les he dicho, y que mejor voluntario que el señor Alexis Astorga. –Alexis le indica con la mirada que no podía y le indicaba el brazo con la varita pegada pero el profesor con una mirada le dijo todo, además que toda la clase coreaba su nombre. Alexis desistió y se puso de pie, estaba abriéndose paso cuando el profesor dice.
– Dulce por favor pasa adelante. –Una chica que estaba sentada muy atrás, se puso de pie, y mientras se abría paso para salir adelante, todos los presenten la miran, incluso Alexis que también le llama la atención. Alexis se fijó que la chica tenía el cabello rojo y unos bonitos ojos verdes pero su timidez era muy notoria ni siquiera se atrevía a mirar a sus compañeros a los ojos. Akamatsu mientras esperaba a Dulce les dice a sus alumnos.
– Dulce Ayanami se integró ayer no más a Rosswood junto a 15 personas más, por motivos que desconozco el grupo llego atrasado así que denle una bienvenida a una nueva Vanscint. –Abraham que escucha le dice a Miriya.
– Por eso la timidez. –Miriya que la veía con detenimiento, su modo de caminar, un tanto asustadiza y mirando al suelo, ve que esta se acerca al profesor y cuchichea con él, algo hace sonreír a Akamatsu. Miriya se preguntaba que se traían esos dos pero nada serio podía ser, se dijo a sí misma. En tanto Alexis se tocaba su antebrazo, en si se había olvidado de su entrenamiento, sabía que no podía dejarse llevar por sus impulsos así que lo mejor era volver a la vieja escuela. Luego ve a Dulce que ya estaba frente a él, a unos pasos de distancia. Akamatsu le pregunta a ambos si están listo. Alexis responde con la cabeza y Dulce igual. Luego les dice.
– En esta batalla si ustedes quieren eligen sus varitas para pelear, no les pondré límites. –Luego ambos se ven a los ojos. La mirada de Dulce seguía expresando timidez hasta que en segundos esta se enseria y se intensifica y luego desaparece de su lugar. Alexis salta hacia atrás y alcanza a ver a Dulce que, también sorprendida, ve como su ataque no surgió efecto. Los que observaban la demostración quedaron estupefactos, la rapidez de Dulce tomo por sorpresa a todos, en especial a Alexis, pero luego, este salta hacia atrás, su mirada se enseria al ver a Dulce tratando de golpearlo, esta da un salto más, llegando a rozar con su puño el brazo de Alexis, este evade los constantes ataques pero de pronto. Dulce le conecta un golpe en el rostro; este se queda de pie pasándose la mano por su rostro, pero después mira para abajo y solo alcanza a ver otro puño y después ver el cielo acercarse un poco y luego sentir la caída al suelo. Cuando se pone de pie, se toca la barbilla, no había sangre pero si mucho dolor. Mira a Dulce que estaba con una mirada muy intensa y llena de concentración, su pose era desafiante, y no había pizca de temor. Alexis toma posición de combate y con la mano derecha anima a Dulce que se acerque, esta se lanza al ataque pero repentinamente, la chica salta dando una voltereta en el cielo. Los que observaban veían como Alexis de la nada apareció donde Dulce estaba. Ahí se dieron cuenta que Dulce con un salto evadió el rápido ataque con el codo de Alexis quien después da media vuelta para golpear a Dulce pero esta rechaza tal ataque con su brazo sin sufrir dolor, luego se desliza en el suelo para botar a su adversario con una patada deslizante pero este salta dando una voltereta hacia atrás. Al final, los dos quedan mirándose en forma muy desafiante. Alexis estaba sorprendido por la velocidad y la resistencia de Dulce, pero a pesar de ello, perder contra ella no era algo que le gustaría q se hiciese realidad. Dulce también estaba sorprendida, pero después sonríe. Alexis toma la sonrisa como un desafió y se lanza al ataque; ataca a Dulce con una patada de frente pero esta detiene el golpe con un bloqueo en cruz, para después, harto seguido, tomarlo del pie y hacerlo girar en el cielo para luego soltarlo. Alexis a duras penas queda de pie pero algo mareado, harto seguido, y con bloqueo en cruz rechaza un golpe de Dulce para después pegarle una patada de media vuelta pero esta se agacha y evade y con gran rapidez lanza una patada de 360 grados, girando en sí misma, pero Alexis salta hacia atrás y después la ataca con una patada horizontal. Dulce, que recién caía al piso, sufre en pleno pecho la patada lanzándola hacia atrás, cayendo duramente al suelo. Alexis se asusta por lo que hizo y corre a auxiliarla, pero al llegar la chica aprovechando eso, lo agarra del brazo y luego con el impulso lo da vuelta, de espalda al suelo y rápidamente se coloca encima de él sujetándole ambos brazos para después pegarle un cabezazo en la frente. Alexis pierde el conocimiento y Dulce se retira de encima de él para alejarse caminando de espalda a él como si ya hubiera ganado, pero un “OH” de los que observaban la hace darse vuelta en dirección a su contrincante quien, a duras penas, trata de colocarse de pie. Incrédula, Dulce no puede creer lo que ve. Alexis en tanto se toca la frente mientras trata de colocarse de pie, estaba muy mareado, todo se le movía y no podía fijar la vista. Trata con su brazo izquierdo de buscar a Dulce hasta que de pronto un haz de luz sale de su vara, la cual rebota en un campo invisible y se vuelve en contra de su dueño, dándole en el hombro e impulsándolo un metro hacia atrás para después solo quedar viendo el cielo, segundos después ve a Akamatsu que le pregunta si está bien. Alexis le contesta.
– Creo que sí. –Luego ayuda a levantarlo del suelo. Alexis a duras penas logra ponerse de pie, en ese momento le llega a su olfato un olor a ropa quemada. Akamatsu le dice.
– Tu hombro se quemó con el ataque de tu varita. –Alexis se ve el hombro y ve que el rayo hizo un agujero en su ropa dejando ver la piel con polvorín negro. –Akamatsu les dice en voz alta a sus alumnos.
– Bueno la demostración se acabó, vuelvan ambos a su lugar. –En eso se escucha la voz de un chico que pregunta.
– ¿Señor pero que nos deja esta demostración? –Akamatsu sonríe diciendo.
– Simple. Dulce y Alexis decidieron combatir con sus habilidades marciales a desmedro de sus habilidades mágicas, por la sencilla razón de que ambos no saben mucho de magia ni poderes magín y hacer un hechizo les hubiera tardado unos segundos que hubieran sido aprovechados por el contrincante. Además Alexis no puede usar magia ya que si lo hace el campo invisible que lo rodea se activa haciendo que dicho ataque se le devuelva, produciendo lo que ustedes ya han visto. En fin, un mago no puede acertar en sus hechizos si su rival es veloz en sus movimientos, lo mismo es para un Magín, ahora todos estarán uno contra uno, uno usara su vara y usara hechizos simples como este. –Akamatsu se da vuelta y ve que un joven se estaba cambiando de lugar para su conveniencia, entonces saca su varita de su cintura y dice.
– ¡Rainus! –El hechizo golpea en contra del joven y lo lanza hacia atrás, todos miran a Akamatsu que les dice.
– Rainus es un hechizo de advertencia que solo golpea y hace caer al adversario, no le produce daño alguno, usen este hechizo para hacer caer a su adversario. El adversario que les toque tratara de acercársele con velocidad, evitando el hechizo y si llegan le hacen una llave para hacerlo caer. Luego si uno de los dos cae, cambian de lugar ¿Alguna duda? –Todos se quedan en silencio entonces Akamatsu da la orden y todos se colocan en pareja, o buscan la pareja con quien hacer el ejercicio pero dos persona no pudieron hacer el ejercicio y fueron Alexis y Dulce. El primero porque no podía ser el atacante con la vara y Dulce por haber quedado sola. Los dos estuvieron a un lado mientras observaban a sus compañeros hacer el ejercicio, no se dirigieron la palabra, a pesar de estar a un metro uno al lado del otro. Alexis se sentía totalmente humillado por una desconocida, fue simple, tal ejemplo para él, fue su primera derrota aunque extrañamente sentía que era la segunda.
Cuando la clase termino. Alexis se retira junto a sus amigos, pero el primero caminaba alejado del grupo. Estaba algo ofuscado y triste. Sus amigos, Abraham, Miriya y Amy se acercan y le dicen.
– Ya no estés con esa cara, nadie ni tu sabía de lo que ella era posible. –Amy es apoyada por Miriya que le dice.
– Dulce es una tramposa se hacia la tímida pero mira de lo que es capaz, hizo trampa. –Abraham le dice.
– Vamos amigos una derrota la tiene cualquiera, pero con una mujer ehm… –Abraham se percata de la mirada ofensiva de sus amigas y de Alexis, nervioso termina diciendo. –Una derrota es una derrota, vamos anímate. –Alexis los mira y luego les dice.
– En si me molesta la derrota pero siento que me confié y también siento que perdí el control y este hoyo en la ropa es signo de que tengo que saber controlarme. –Los 4 estaban por entrar al castillo de paredes azul cielo cuando Alexis siente una molestia de muy dentro de sí que le hace decir. – ¡Demonios, como perdí contra ella! –Al terminar la oración de su vara sale un rayo el cual por la posición del brazo cae y se estrella directamente en el piso de mármol azul, el piso se resquebraja y Alexis mira al suelo diciendo.
– De nuevo. –Pero eso no era todo, el piso se resquebraja donde ellos estaban y lo último que alcanzan a hacer es verse entre sí y decir.
– OH, OH. –El piso se rompe en pedazos y los 4 amigos caen y solo se escucha el griterío que se va perdiendo con el correr de los segundos. Luego caen en una especie de resbalón luego en otro, esta vez cayendo hacia el lado contrario.
– ¡HASTA DONDE PARAREMOS¡ –Decía Amy a lo que todos dijeron al unisonó.
– ¿Hasta dónde pararemos? ¡¿HASTA DONDE VAMOS?! –Finalmente los 4 llegan a una superficie plana, Amy luego Abraham, Alexis y finalmente Miriya que cae encima de los 3. Mientras Abraham y Alexis le decían a Miriya que se quitara de encima. Amy miraba el lugar, lo poco que se podía ver eran paredes de roca y un olor a humedad muy intensa.
– ¿En dónde habremos caído? –Luego que Miriya se puso de pie. Abraham, Alexis y Amy pudieron hacerlo. Alexis veía el lugar y era como un túnel o más bien un cuarto.
– ¿Nadie tiene fósforos o algo para iluminar? –En eso se escucha la voz de Miriya que dice.
– Lumus–De la punta de la vara de Miriya nace una luz que ilumina parte del cuarto. Harto seguido Abraham dice.
– Luz–De su cuello nace una luz intensa q ilumina el cuarto. –Era la piedra Astral de Abraham que la llevaba en el cuello. Alexis se toca la suya que la tiene en el pómulo, se había olvidado de ella, se la toca con la mano y luego presta atención al cuarto, que más parece.
– ¿Parece una especie de pasillo con cuartos, no lo creen? –Miriya parecía aceptar las palabras de Amy pero al ver con detenimiento se da cuenta de algo.
– Más parecen calabozos. –Alexis mira a Miriya y le encuentra la razón. Por lo que se veía era un pasillo con varios calabozos de piedra maciza a los lados, a medida que caminaban se podía ver lo oxidado y deteriorado del lugar. Las chicas caminaban delante de los chicos. Abraham preguntaba.
– ¿Y cómo volveremos hacia la superficie? –Alexis le contesta.
– Se supone que si seguimos el pasillo encontraremos la salida, quizás por donde caímos era una especie de entrada para los prisioneros, eso creo. –Alexis se mira la camisa y la quemadura que lleva, de Dulce y lo que ocasiono que estuvieran donde están.
– Chicos disculpen, pero si no fuera por mí no estaríamos acá. –Miriya se da vuelta y le dice.
– ¿Cómo crees eso? Para nada te tienes que disculpar, además… –Le sigue Amy.
– Los castillos tienen toda clase de secretos, pasadizos, cámaras y esas cosas, y esto, yo creo que nadie lo ha visto o entrado acá por lo menos muchos años. –Abraham le dice además.
– Tranquilo Alexis, igual esto es… ¿Qué es eso que brilla? –Abraham se acerca a un rincón pero se detiene ya que ve unos barrotes oxidados que le impiden pasar. –Uy estos barrotes están muy oxidados, me da cosa tocarlos. –Amy se acerca, saca su vara y dice.
– Améin. –De la vara sale una especie de rocío de luz amarillo pero nada produjo. Miriya le pregunta.
– ¿Es el hechizo para atraer algo a ti? –Amy dice si con la cabeza a lo que su amiga le contesta.
– Quizás estos barrotes son anti hechizo ¿No lo crees? –Alexis piensa en voz alta diciendo.
– Entonces también, quizás, impide hacer poderes mentales. –Abraham mira a sus amigos y luego cierra los ojos y estira la mano diciendo.
– Meesó. –Su piedra destila una leve luz azul pero nada sucede. –Abraham ve la llave y se ofusca. Alexis le toma del hombro y le dice.
– Deja, sigamos mejor, o si no nos perderemos la clase. –El grupo mira la llave y luego decepcionados dan la espalda y siguen caminando, pero de pronto un sonido titilante se escucha a sus espaldas. Se dan vuelta y Amy se fija en algo.
– Alexis tu oreja está brillando. –Alexis se toca su pómulo y pregunta si es verdad, a lo que Miriya le contesta.
– Si, está brillando, ¿Cómo no te das cuenta? –Alexis no siente nada extraño pero de pronto una luz destellante le molesta un poco a la vista, la luz aumenta aun más su brillo y el ruido también hasta que de la celda que estaban hace segundos, un objeto sale de ella y se acerca a gran velocidad al rostro de Alexis quien solo alcanza a colocar su mano frente a su rostro deteniendo la trayectoria del objeto. Todos quedan perplejos incluido Alexis que con un poco de dolor abre su mano y ve una llave blanca y de líneas negras rodeándolas con un demonio en su cabeza, y la palma de su mano enrojecida por el golpe. Mira a sus amigos y no sabe que decir ni ellos tampoco, a pesar del dolor en su mano decide guardarse la llave en el bolsillo y luego de hacerlo escucha a Amy que le dice.
– No sé qué pasa aquí pero hay que salir de aquí. –Todos quedan de acuerdo, y luego siguen caminando por el pasillo, Miriya le pregunta a Alexis.
– ¿Alexis no hiciste nada para atraer la llave? –Este le contesta.
– No hice nada, si ustedes no me dicen del brillo de mi piedra, yo no me hubiera dado cuenta. –Abraham agrega diciendo.
– Debe haber una relación entre la llave y tu piedra, bueno eso creo yo, no sé ustedes. –Amy que iba delante del grupo les dice.
– Yo creo eso también pero para investigar eso tenemos que salir de aquí. –Alexis sospechaba tal cosa, había que salir primero y luego investigar, se adelante unos pasos y se coloca al lado de Amy, esta lo mira y sonríe.
Quince minutos después, de caminar y pasar por varios calabozos llegaron a un espacio vacío con una escalera de piedra hacia arriba, la escalera húmeda y algo resbaladizas, les indicaba, quizás, el fin del camino.
– Ojala sea la salida, ya tengo hambre. –Miriya mira a Abraham y le dice.
– Según mi reloj nos quedaría una media hora de almuerzo. –Alexis pregunta.
– ¿Se abran dado cuenta de nuestra ausencia? –Amy le contesta así muy relajada.
– No lo creo, no creo que se fijen en cada uno de nosotros, somos cientos en la academia más o menos. Bueno vamos a subir. –Los 4 amigos suben las escaleras. Abraham iba delante de ellos y luego ve como una compuerta de madera, trata de levantarla pero no puede, pide ayuda de Alexis y los dos con fuerza la tiran para arriba hasta que…
CONTINUARÁ… EL CAPÍTULO 15 “LA LLAVE” CONTINUARÁ EL PRÓXIMO LUNES 30 DE NOVIEMBRE DEL 2015.
Dejen sus comentarios y sugerencias sera de gran ayuda. Espero les guste la lectura escrita por mi. Sigan leyendo e invitando a quienes les guste una buena lectura.
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Crónicas del Magín Milenario episodio 1 (c)
2014
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