Ya cuando Dulce y Alexis pudieron concentrar su aura en sus cuerpos cayeron de bruces al suelo, el costo por haberlo logrado fue alto ya que ambos quedaron muy exhaustos, con la respiración agitada y queriendo descansar un largo rato, en eso, Ludendorff les dice.
– Han aprendido, por si solos, la técnica Gen la cual consiste en concentrar su aura en sus cuerpos pero eso no es toda la técnica, deben madurar su aura a tal punto que cobre fuerza y solidez. Si lo hacen, si logran dominar la técnica Gen entonces poseerán una fuerte defensa. Por ahora la clase ha terminado pero les dejo la tarea de dominar Gen y para eso deben descansar y en sus momentos libres meditar para madurar la técnica ¿Entendieron? Ahhhh y otra cosa este entrenamiento no se lo comenten a nadie, si les preguntan solo digan que desde hoy son practicantes de Aurinnis. –Alexis y Dulce asienten con la cabeza y luego Ludendorff los deja solos. Alexis se tira de espalda al césped mientras Dulce se mantiene sentada con sus piernas estiradas.
– Pensé que no lo iba a lograr, en algún momento sentí perder la cordura. –Las palabras de Dulce hicieron que Alexis se sentara nuevamente y le dijera.
– Yo también lo sentí, pero después me dije a mi mismo que podía lograrlo y pude lograrlo. De a poco sentía que esa energía no se escapaba de mi cuerpo hasta que finalmente lo logre.
– ¿Qué hacemos ahora? –La pregunta de Dulce hizo que Alexis pensara, luego vio su reloj para después contestar.
– Creo que pronto será la hora de desayunar. –Dulce se estira en el césped para después decir.
– Me hace falta desayunar…–Se pone de pie y luego ve a Alexis y le dice.
– ¿Vas? –Alexis le da la mano y Dulce se la toma y lo levanta del suelo. Este le agradece el gesto y luego le dice.
– Vamos a desayunar. –Los dos se alejan caminando mientras la brisa se hace sentir en el camino. Al llegar a la sala del comedor, ya estaban la mayoría de los alumnos de la Academia desayunando. Al entrar Alexis busca a sus compañeros mientras Dulce, por alguna razón se pone tímida. Alexis la ve y le dice.
– Si quieres puedes sentarte con mis amigos y yo. –Las palabras de Alexis hacen que la mirada de Dulce se ilumine y tímidamente le da las gracias. Al llegar Amy y Mirilla ven a Dulce, y la primera hace un hueco y la invita a sentarse. Miriya los ve y les pregunta.
– ¿Por qué están con ropa deportiva? –Alexis iba a contestar pero Dulce se le adelanta.
– Bueno porque el director nos inscribió para el torneo de Aurinnis que se hará en unos meses más. –La noticia causó sorpresa en Abraham, Miriya y Amy, y Alexis estaba un poco preocupado y tenso, pero en eso siente un palmazo en su espalda y la voz de alegría de Abraham que le dice.
– ¡Buena Alexis te la tenías escondida! Así que un Aurinista… pero, a ver… para practicar Aurinnis tienes que tener un manejo del aura muy avanzado y tú y Dulce son casi novatos. – Dulce le dice.
– El director nos entrenara todos los días para que podamos aunque sea practicar el Aurinnis en lo básico. –Miriya dice.
– ¿A ustedes dos no más? –Alexis contesto.
– Bueno en realidad es del tipo de clase q me hacen, ya que el director piensa que estamos atrasados en la educación y esto nos colocara al día.
– ¿Ambos? –La pregunta hecha por Amy la contesta Dulce que explica que ella tenía las clases con la profesora Astorga y no se habían topado nunca en las clases unipersonales. –Alexis miraba a Dulce mientras esta hablaba, luego veía a sus amigos que le preguntaban cosas que ya a él le habían preguntado. ¿Cómo eran las clases? ¿Cómo era la profesora Astorga contigo? De pronto se dio cuenta que Dulce, sin ella saberlo, se había integrado muy bien al grupo; y se había dado cuenta, además, o por lo menos lo admitió en su mente que ella era más fuerte que él.
En tanto en el gimnasio de la Academia de las Fuerzas de Defensa de la Tierra Unida. Un gimnasio amplio del tamaño de una cancha de fútbol, una chica corre por la pista atlética, y una voz de hombre, desde el centro del gimnasio, a viva voz le pregunta.
– ¡¿Estas preparada?! –La chica que era nada menos que Susana que vestía de buzo deportivo azul y con su cabello tomado con una cinta roja, lo ve y le levanta el pulgar de la mano derecha diciendo que si. Dicha persona que preguntaba era nada menos que Alex Ceballos, el ex maestro de Kendo de Alexis en los tiempos anterior a los ataques Emuloides. Este al ver la indicación de Susana, decide hacer un “clack” con sus dedos y Susana corre lo más rápido posible y de pronto salta evadiendo una muralla que sale del piso a gran velocidad, después da un giro en el aire pasando a través de dos inmensas cierras eléctricas y después salta evadiendo pilares de cementos q salen del piso con mucha velocidad, pero a pesar de los obstáculos la velocidad de Susana aumenta a tal punto que parece danzar entre todo lo que se le aparece en el camino, hasta que el piso se divide en dos y Susana como si adivinara o sintiera tal suceso, pasa la abertura de 6 metros pisando todos los pilares que salían del fondo para no caer al agua pero de pronto un pilar se atraviesa en su camino y ella no alcanza a evadirlo, chocando de frente al pilar y luego caer al agua. Rato después se asoma Ceballos quien ve a Susana que recién surge del agua y este le pregunta.
– ¿Estás bien Alvarado? –Susana que se despeja el rostro del agua le contesta.
– Un poco, solo me sangra la nariz. –Ceballos ríe y luego Susana le dice desde el fondo.
– No es justo que siempre me coloquen nuevos obstáculos. –Ceballos le dice.
– Pero si no fuera así te aprenderías los obstáculos y los pasarías de memoria, como ahora. –Susana lo mira y luego decide nadar hacia una pequeña escalera. Sube pero a ratos se detenía para limpiarse con el brazo la sangre que brotaba por su nariz. Después es ayudada por Ceballos quien al ver como la sangre brotaba le dice.
– Parece que esta vez te la quebraste. Ten la cabeza hacia arriba. –Susana coloca la cabeza hacia arriba y mientras Ceballos la ayuda a caminar, esta le pregunta.
– ¿Cuánto fue mi tiempo? –Ceballos le contesta de inmediato.
– 4 segundos. –Susana gime negativamente para después decir.
– Ahhhh estoy lenta por 3 segundos. –Ceballos se ríe y ve que Susana a pesar de tener la cabeza en alto, lo ve con algo de seriedad y este le dice.
– No es la lentitud el problema, te estás aprendiendo los obstáculo de memoria y en el momento que hay uno nuevo… caes, siempre tienes que estar atenta, no puedes relajarte ni un segundo, tus sentidos siempre atentos. –Susana gime como si no tuviera excusa y mientras se retiran. Ceballos le dice que esta vez él se queda fuera de la enfermería.
Pasan algunos minutos y Ceballos medita tranquilo al lado de la puerta de la enfermería, en eso la puerta se abre y sale de ella Susana quien luce mejor aunque con dos venditas en su nariz, esta al verlo le dice.
– Estoy lista. –Ceballos le pregunta si está bien, a lo que Susana contesta.
– Sí, no es nada grave, en tres días estaré bien pero tengo que guardar reposo. –Ceballos le dice mientras ambos caminan por el pasillo.
– Me da gusto, bueno como no puedes hacer ejercicio físico por 3 días es mejor que estudies y también…
– Si ya lo sé. –Ceballos muestra una sonrisa tímida ante el rostro ofuscado de su alumna. Al salir a lo que es, parece, una plaza en el centro de la Academia se detienen y este le dice a Susana.
– Bueno tengo clases así que me retiro. –Susana se inclina un poco en forma de respeto y Ceballos se aleja de ella. En tanto Susana ve hacia el cielo, y ve un radiante cielo azul, luego toma el camino hacia la izquierda y mientras camina, piensa en lo que tiene que hacer y no se da cuenta, cuando comienza a hablar en voz alta.
– Demonios, no sé para qué quieren que medite y más encima no me explican. –En eso escucha una voz a lo lejos, ve que es Natalia que esta vestida con el uniforme azul característico en los cadetes, al verla le pregunta.
– ¿Qué te paso en la nariz? –Susana le explica lo sucedido y mientras ambas caminan, Natalia le dice.
– ¿Guau así que te dan duro con el entrenamiento?
– No es que me den duro con el entrenamiento. –Susana pone una mirada de sufrimiento y completa la frase diciendo. –Es un infierno pero no todo es malo…
– ¿Por qué lo dices? –Susana sonríe y luego contesta.
– Dicen que este entrenamiento es para fortalecer mi cuerpo y mi espíritu. Al principio me dijeron que me hará muy bien y hasta ahora les encuentro razón.
– ¿Por qué? –Susana mira hacia el techo y mientras caminan le dice.
– Bueno porque me siento más ágil, claro he tenido muchas magulladuras, lesiones pero gracias a la enfermera se me quitan en días. Pero a lo que voy es que me siento liviana y más rápida, más de lo que estaba cuando estaba en el Instituto.
– Qué bien por ti, además eres la única cadete que peleara en la batalla, allá en Atacama. –Susana baja la cabeza y le pregunta.
– ¿Naty tú por qué crees que me eligieron para esa batalla? –Su amiga le contesta con una gran sonrisa.
– Bueno eres la mejor en todo en la Academia. –Susana le dice.
– Pero voy a pelear en la batalla de Atacama y esa batalla, según sé, será inmensa.
– Si, además será televisada aunque solo los preparativos. –Susana suspira y en una postura casi de derrotada dice.
– Y todo por una mina de cobre. –Natalia la mira y luego le dice.
– Recuerda que esa mina es la de tajo abierto más grande del mundo. –Susana mira seriamente para dónde camina diciendo.
– Y ahora es una colmena de Emuloides. –Natalia sonríe y dice.
– Pero veras a los Emulares, yo solo en libros he visto los emulares.
– Si no es gran cosa, son Emuloides voladores. –Natalia le dice que no, que no son así y le dice además…
– Los Emulares son Emuloides pero de forma biomecánica, se dice que solo están en las llanuras, en tierras planas pero también en las Colmenas y en grandes cantidades. –Susana suspira diciendo.
– Bueno pero me tiene metida el por qué me eligieron a mí… –Ve a Natalia que pareciera le iba a decir lo mismo así que la interrumpe y le dice.
– No creo que solo por eso me eligieron en esa batalla, como tú dices es de las más peligrosas y mi experiencia en batalla no se compara, como por ejemplo a la que tiene Alexis. –Natalia le dice.
– Pero Alexis es un caso especial Susana, él proviene de una familia de magines y magos, por eso tiene ese poder.
– Si lo sé, no es como nosotros o sea nosotras.
– Quizás tú también tienes descendientes y no te lo han dicho. –Susana la mira y le dice.
– No, mi familia es numana 100% me lo dijo el General.
– Bueno pero en si tienes experiencia en batalla mujer. –Susana algo ofuscada le dice.
– Te vuelvo a decir que no es tanto como para ir a esa batalla. –Natalia, también algo ofuscada, le pregunta.
– ¿Entonces por qué vas?
– ¡Porque quiero probarme a mí misma! –La mirada que Natalia veía en los ojos de su amiga eran de una intensa decisión. – Luego ambas se quedan en silencio y luego de unos minutos Natalia le dice.
– ¿Entonces piensas que hay algo más en tu elección? –Susana la mira y sonríe y moviendo su cabeza en forma positiva pero después se enseria diciendo.
– No lo sé, aun no lo sé.
En la noche de Santiago, el cielo se puso muy nublado y con una cara de que pronto se iba a largar a llover. En una de las habitaciones de la Academia, estaba Susana vestida con solo la parte de abajo del uniforme y una camisa blanca. Aparentemente estaba estudiando. Su concentración hacia un leve juego con la luz de la lámpara de su mesa de noche. Todo estaba muy ordenado y limpio y las cortinas eran de un color levemente rosado con blanco. La cama estaba cubierta de libros y algo desordenada, pareciera que llevaba tiempo estudiando.
– Las tácticas representan las acciones que sí podemos realizar con los recursos de que disponemos, para poder interactuar con las circunstancias que estamos viviendo. Habiendo definido los aspectos prácticos de tipo táctico, será más fácil desarrollar una estrategia que se ajusta a la realidad posible. Las estrategias deben ser operativas tácticamente para tener posibilidades de éxito… –En eso por un pequeño parlante ubicado en el rincón del techo, se escucha una voz de una mujer que dice.
– Se pide la presencia de la Cadete Susana Alvarado en la oficina del Director Académico de inmediato. –Susana algo ofuscada suspira hacia el techo, diciendo.
– Y así me piden que no me atrase con mis deberes. ¡Demonios! ¿Para qué me querrán ahora? –La chica ofuscada se coloca sus zapatos, toma la chaqueta de la parte de arriba del uniforme, se la coloca y luego sale al salón principal de su hogar mientras se toma su cabello con la cinta roja. Sale de la habitación y la cierra.
Minutos después llega a la puerta del director principal, a esa hora ya la lluvia había comenzado y un poco de frio se hacía sentir. Susana golpea la puerta y una voz conocida para ella le dice que entre. Esta hace caso de inmediato y entra, y se sorprende al ver…
– General Solabarrieta, ¿Usted acá? –En eso escucha un “Ejem” y ve al director que era una persona sin pelos en la cabeza que usaba lentes y estaba vestido con el uniforme negro de la Armada, Susana al verlo se sonroja y luego atina a saludar en forma oficial al General diciendo.
– Cadete Alvarado presentándose señor. –Solabarrieta que estaba con su pelo corto le dice que descanse. Luego el Director habla, diciendo.
– Cadete Alvarado, el General me ha solicitado su presencia para lo siguiente. –Luego mira al General y este se une a la conversación, diciendo.
– Necesito que me acompañes al último piso de la Academia. –Susana se extraña ante tal petición pero como conocía al General no le prestó importancia y accedió. Luego de la oficina salen, primero Susana y luego el General. Luego caminan hacia los ascensores y en el trayecto ella le pregunta.
– Señor puedo preguntar para que me lleva al último piso de la oficina. –Solabarrieta la mira y luego se ríe diciendo.
– Ja, ja, ja, no te preocupes nada malo te haré. –Susana se ruboriza en demasía y el General agrega.
– Además eres una niña de 10 años. –Susana se ruboriza aún más mientras el General le sigue hablando.
– Aunque no los representas, te diré. Pero bueno ya sabrás. –Susana no se le quito lo roja hasta que tomaron el ascensor, y mientras subían, un denso silencio invadió a Susana mientras que Solabarrieta solo esperaba que el ascensor se detuviera. La chica sentía una gran aura en el General que la hacía sentir muy pequeña y eso, sumado a que se pasaba ideas raras aumentaba su rubor. Luego de unos segundos, se detiene. Los dos salen, primero Susana y luego Solabarrieta. Este último le dice a Susana.
– Ahora camina hacia la última habitación. –Susana se sentía algo insegura, casi temerosa, nunca había estado sola con un hombre y luego se reía inocentemente pensando “Que estás pensando mujer, solo tienes 10 años, no puedes pensar en esas cosas”. Luego, al llegar a la última habitación el General dice.
– Bueno ¿Dónde tendré la llave? Ah, cierto que esta puerta se abre con un código. –Susana en tanto, estaba roja, y muy temerosa. Mientras el General abre la puerta e invita a Susana a entrar primero, al hacerlo, las luces se encienden, unas luces amarillas que dejaban ver una habitación vacía y solo dos cojines sobre una alfombra y nada más en el piso y además de eso, dos cortinas que tapaban el gran ventanal. Luego oye la voz del General que le pregunta.
– ¿Supongo que has meditado todos los días, unos 8 a 10 minutos o no? –Susana le contesta.
– Si lo he hecho señor. –El General camina pasando a su lado para después caminar y llegar al ventanal. Abre las cortinas dejando ver la lluvia que del cielo caía y luego dice.
– Entonces no te costara mucho despertar esta técnica. –Susana le pregunta.
– ¿Cuál técnica? –Solabarrieta le dice.
– ¿Gitsu, y eso que es? –Solabarrieta se acerca a ella y le contesta.
– Gitsu es un conjunto de técnicas que te permitirá despertar y emplear tu aura. –Susana no comprendía bien lo que el general le decía y este, al ver la expresión de ella, le explica. –Tu aura es tu energía corporal la que rodea tu cuerpo, esa energía llamada aura, tú, a través del uso del Gitsu puedes manejarla a tu entero gusto, claro si profundizas el uso de tu aura.
– ¿Por eso la meditación? –Solabarrieta le contesta de inmediato con una sonrisa.
– Así es, te explicare… la técnica Gitsu para controlarla se necesita de mucho tiempo, cosa que tú no tienes por lo que ya sabemos. Entonces haré uso de una técnica en ti y bueno con tu entrenamiento mental no te costara tanto hacer Gen.
– ¿Gen? –Solabarrieta invita a Susana que se siente en la almohada, esta accede y él se sienta frente a ella y luego le dice.
– Gen es la técnica que te permitirá retener tu aura dentro de tu cuerpo, esto te permitirá fortalecer tu cuerpo y mientras más domines Gen entonces tendrás más fortaleza en tu cuerpo. Ahora durante este tiempo aprenderás Gen, Len, Zetsu y Ritsu. Estás técnicas las descubrirás por ti misma, mira… –Solabarrieta saca de su bolsillo unas uvas verdes, y mientras lo hace le dice.
– Estas uvas las saque de la cocina, como vez son unas uvas normales. Mira tócalas, siéntelas y veras que son inofensivas. –Susana toma las uvas y las toca y ve que no hay nada raro con ellas. Después se las pasa al General quien le dice.
– Bueno ahora fíjate. –Solabarrieta toma una uva con sus dedos y luego concentra su mirada en ella, solo un segundo pasa cuando este le dice.
– Ahora mira… –Solabarrieta lanza la uva contra la ventana y esta atraviesa de cuajo el vidrio dejando un agujero en el vidrio. Susana queda muy sorprendida por tal demostración y solo atina a decir.
– Pero es imposible, era una simple uva, ¿Cómo quebró el vidrio así? –Solabarrieta le contesta.
– Porque use Zetso, que es una técnica avanzada de Gen, le di parte de mi aura a la uva por lo cual la fortalecí y eso la hizo más dura y resistente a tal punto que logro pasar el vidrio sin problemas pero lo que hice es una técnica avanzada, tu aprenderás lo básico Gen, Len, Zetsu y Ritsu, a medida que dominas o tienes ya asimilado una de las técnicas podrás pasar a las demás ya cuando tengas dominado lo básico podrás pasar a las siguientes.
– Pero señor, todo esto es muy complicado para mí, además yo no sé si podré hacer lo que usted hizo. –Solabarrieta sonríe y luego le contesta.
– Bueno si no uso en ti Gehou te demoraras años en simplemente usar Gen.
– ¿Gehou? ¿Qué es otra técnica avanzada? –El General le contesta.
– Más bien es una técnica que saca toda tu aura de inmediato. Es un poco arriesgada que la haga cualquier persona, ya que si no lo hace la persona indicada puede matar a la persona a la cual se lo hace. –Susana palidece y Solabarrieta se ríe para después decir.
– Ja, ja, ja no te preocupes, yo se usar muy bien Gehou por eso el Teniente Salas y el Sargento Ceballos no te lo hicieron. Ahora, cuando haga Gehou en ti abriré todos los chacras de tu cuerpo por lo cual tu aura comenzara a salir por todos tus poros, la sensación es de relajo, tibio y rico de sentir, pero tendrás que hacer uso de tu meditación sino a medida que pasan los minutos te sentirás cansada hasta quedarte dormida. Cuando te aplique Gehou, es ahí cuando tienes que tratar de retener tu aura en tu cuerpo, o sea aprenderás Gen por si sola pero necesito que confíes en mí y que estés segura de querer hacerlo sino todo puede salir mal y puedo arriesgar tu vida en el intento. Así que te pregunto ¿Quieres hacerlo? –Susana estaba con temor, sonaba muy arriesgado esto del Gitsu pensó, pero en eso muchas preguntas se le vienen a la cabeza aunque una sale de su boca.
– ¿Esto me ayudara para sobrellevar la batalla? –Solabarrieta muy serio le contesta.
– Te ayudara enormemente. Esto hará la diferencia entre tener una oportunidad de sobrevivir a no tener ninguna. Además cierta persona que conocemos también lo está aprendiendo… –Tales palabras hacen que la mirada de Susana irradie más brillo y siente que algo crece en su interior.
– Por lo que veo estas decidida a hacerlo ¿no? –Susana le dice que sí, entonces Solabarrieta le explica el método a seguir. Le dice que lo mejor es hacerlo de pie, que se pondrá detrás de ella y después sentirá una fuerza que la atraviesa y de inmediato la sensación de que algo muy tibio sale de su cuerpo. Al hacerse presente esa sensación comienza la meditación para tratar de mantener su aura en el cuerpo.
– No te asustes si sientes que no lo logras, solo medita tratando de retener con tu mente tu aura. Y veras que de un dos por tres lo lograras. –Susana de por si sentía nervios pero no por no lograr retener el aura sino a la sensación misma de que una fuerza atraviese su cuerpo. Entonces cierra los ojos y solo espera esa fuerza que la atraviese. Mientras que Solabarrieta se colocaba a distancia de la espalda de Susana para después extender su brazo derecho y luego su mano que no tocaba la espalda de su alumna, más bien la mantenía a distancia. – ¿Estás lista Alvarado? –Susana dice que si, entonces el general toma aire con sus ojos cerrados para después botar el aire, quedarse quieto un instante y repentinamente abre sus ojos y su mano es rodeada en segundos por un aura luminosa la cual desaparece en un instante y luego Susana siente una oleada de energía atravesando su cuerpo la cual desaparece tal cual como llego y de inmediato siente su cuerpo muy liviano y una sensación de calidez que escapa de su cuerpo entonces recuerda lo que tiene que hacer y se concentra en meditar.
Susana abre lentamente sus ojos y ve el techo de su dormitorio luego se sienta en su cama pero siente un mareo atroz y escucha una voz fina y sutil que le dice.
– Ya has despertado Alvarado. –Susana ve a su derecha y ve a una mujer de unos 24 años, de rasgos orientales vestida con un delantal blanco y usaba unas gafas de marco rojo donde se podían ver un par de ojos castaños. La mujer de pelo castaño claro le pregunta.
– ¿Te sientes bien Alvarado? –Susana le contesta.
– Si, si estoy bien pero Señorita Hirose ¿Que hace en mi cuarto? –Yuki Hirose es la joven enfermera de la Academia, esta le contesta con su voz sutil y suave.
– El General te trajo a tu cuarto anoche y me llamo y me ordeno cuidarte, estabas muy pálida y con temperatura pero veo que estas mucho mejor. –En eso entra el General Solabarrieta que estaba solo con una camiseta y la parte de abajo del uniforme y con su pelo recién peinado. Este al verla se alegra diciendo.
– Veo que ya has despertado, me alegra mucho, me tenías preocupado. –Susana se le notaba a simple vista que no entendía nada a lo que Yuki le dice.
– El General estaba muy preocupado por ti, y no quiso irse a descansar así que durmió en el salón principal.
– ¿Y usted señorita, también se quedó a dormir acá? – Hirose la mira de manera muy gentil y le contesta.
– Yo dormí en tu cuarto en ese sofá-cama tan cómodo que tienes. –Susana miro su sofá-cama y ve que estaba muy ordenado, luego ve a la enfermera Hirose y al General Solabarrieta y después pregunta.
– ¿Qué me paso? –Un silencio invade el cuarto. Hirose risueña pero nerviosa dice.
– Voy a preparar té, mientras el General te explica mi niña. –Hirose se va y Solabarrieta toma una silla que estaba en la pared y la coloca cerca de la cama de Susana, quien esperaba la explicación, la cual no tarda en llegar.
– Bueno supongo que recuerdas lo de anoche ¿No es así? –Susana le contesta en forma afirmativa a lo que Solabarrieta pareciera alegrarse ya que suspira como si un peso le hayan sacado de encima y luego dice.
– Realmente te costó muchísimo retener tu aura, tanto así que te demoraste 5 horas en hacerlo y en el instante que lo lograste caíste inconsciente ya que tu cuerpo llego al clímax del cansancio y por eso quizás no recuerdas mucho ni siquiera si lo lograste o no.
– ¿Pero usted me dice que lo logre no es así? –Solabarrieta le contesta.
– Claro, lo lograste, pudiste retener tu aura pero el solo esfuerzo de hacerlo caíste inconsciente. –Susana baja su mirada y se queda en silencio. Solabarrieta no dice palabra alguna mientras que ella dentro de sí trataba de recuperar ese momento cuando lo logro. Hasta que finalmente lo logra. Como si fuera una chispa pequeña, logra recordar ese momento cuando sintió retener su aura totalmente, entonces levanta la mirada la cual estaba radiante y pregunta.
– ¿Y qué hago ahora? –Ese cambio de mirada de Susana hizo que Solabarrieta se sintiera más tranquilo ya que solo el hecho de ver sus ojos, sabía que ya todo estaba bien. Entonces contesta sin dudarlo.
– Bueno te queda un largo camino que recorrer. Lo que lograste anoche se llama Gen que es concentrar tu aura en tu cuerpo pero ahora tienes que fortalecerlo, luego ya cuando lo hayas fortalecido, tienes que pasar a Len que es expandir tu aura más allá de tu cuerpo, y mantenerlo extendido, te costara tiempo hacerlo y luego pasas a Zetsu que es lo contrario de Len, o sea tienes que disminuir tu Aura al mínimo, cosa que sea imperceptible. O sea tu tarea será hacer Gen, Len, Zetsu, que es lo básico del Gitsu. –Susana nerviosa le dice.
– General no entendí nada. –Solabarrieta se le queda viendo y luego se ríe a carcajadas para después decir.
– Está bien, es difícil entender con tal solo palabras, ¿Dime sientes algo ahora? –Susana se queda quieta, lo ve fijamente y luego siente algo, muy leve pero que hace que su mirada cambie.
– Si, siento algo en usted. –Solabarrieta sonríe para decir.
– Lo que sientes se llama Gen. Ahora concentra tu aura en tus ojos y tus ojos en mí al máximo. –Susana lo hace y luego de minutos Susana logra ver algo, muy pero muy leve, ve como algo rodea el cuerpo del General. Este al verla le dice.
– Por tu mirada veo que lograste ver aunque muy levemente mi aura, ¿No es así? –Susana un poco ruborizada le contesta.
– Si pero fue algo muy leve señor. No sé cómo lo hice. –Solabarrieta le contesta.
– Lo que hiciste se llama An que es concentrar el aura en tu mirada lo que te permite ver el aura de otra persona y aunque apenitas lo lograste es un gran avance. Ahora cierra tus ojos y concéntrate. –Susana los cierra y se concentra y de pronto siente una fuerte presencia que la hace abrir los ojos y nuevamente ver una leve aura rodeando al General y además sentir una presión en el entorno.
– Guau, me sorprendes, lo volviste hacer sin problemas y además sentiste cuando hice Len. Veo que tu agotamiento obtuvo sus beneficios. ¿Bueno y ahora sientes algo? –Susana se sorprende ya que esa leve presión en el aire ya no se siente en lo más mínimo.
– Lo que hice se llama Zetsu.
– Ya lo veo que sí, no siento ni siquiera su presencia en la habitación y aunque lo veo, no siento que este aqui.
– Que observadora eres Alvarado, bueno lo que has presenciado es Gen, Len y Zetsu, además de An, tu tarea será desarrollar Gen, Len y Zetsu y practicar An. Creo que en 5 meses lo lograras. Seguirás con tu entrenamiento físico y la meditación que haces 3 veces al día la combinaras con esto.
– ¿Y cómo sabré que lo estoy logrando? –Solabarrieta le contesta de inmediato.
– Lo sabrás de acuerdo a lo que avances. Y te sugiero también que combines esto con tus ejercicios físicos. –El general se pone de pie y coloca la silla donde estaba, mientras lo hace le dice.
– Bueno me tengo que ir, y tú hoy no tendrás clases, necesitas descansar, tu mente está bien pero tu cuerpo necesita recuperar toda la energía perdida. Nos vemos en Febrero para ver tu avance. Mientras tanto cuídate mucho y te felicito ya que hoy avanzaste mucho en el aprendizaje del Gitsu. –Susana le pregunta.
– ¿General tiene algo que ver mi desmayo con mi avance? –Solabarrieta se queda pensando y luego le dice.
– Buena pregunta Alvarado, quizás cuando lograste retener tu aura y caíste inconsciente, inconscientemente tu quedaste todavía en tu meditación y quizás eso hizo que hayas avanzado en el Gitsu aunque la otra probabilidad es que pasaste por un momento de vital importancia para tu vida y eso hizo el avance de hoy ya que hacer An es un gran trabajo, no es fácil. –Susana sonríe ante las palabras del General y le dice.
– Gracias General.
– No hay de que Alvarado, buenas tardes. –Luego sale de la habitación. Susana vuelve a acostarse mirando el techo y luego cierra sus ojos pero no para descansar sino para entrenar.
Y así Susana lentamente, convierte en rutina el meditar tres veces al día y terminar con un entrenamiento físico muy duro y exigente. Estudios, meditación, entrenamiento y después estudios nuevamente la convierten en una chica muy ocupada, y pese a que sus amigos comprenden el por qué hace todo esto, la extrañan. Aun así algunos se ofrecen a ayudarla y ella acepta gustosa. Sabe que ellos la apoyan y eso hace que se esmere en perfeccionarse aún más. Lo mismo pasa con Alexis y Dulce que todos los días entrenan el Aurinnis, y los ratos libres meditan aunque por separados. Alexis ya no se juntaba tanto con sus amigos e igual Dulce que en los últimos días era una más del grupo. Ambos después de los estudios iban a su entrenamiento personal con el propio director quien ya les había explicado los conceptos básicos del Gitsu evadiendo eso sí los modos avanzándos salvo el An que según Ludendorff era una herramienta para ver si estaban mejorando o no, incluso hizo que la aprendieran. En cuanto al Aurinnis, aun entrenaban con raquetas normales por lo tanto aún era un simple juego de Tenis y no un juego de Aurinnis en su totalidad, después cenaban en el gran comedor junto a todos el colegio como era normal en Rosswood, ahí aprovechaban de ponerse al tanto, en especial del tema a lo cual el grupo estaba insertado en su tiempo libre.
– Es imposible. –Después de decir eso, Abraham muy cansado toma un sorbo de jugo natural y después sigue diciendo.
– Esa oficina realmente no sé dónde está. –Miriya más calmada que Abraham dice.
– Yo he tenido más suerte que este niñito. Pude descubrir la ubicación de la oficina del director pero ese lugar está vigilado no cualquiera puede entrar.
– ¿Y dónde queda ese lugar? –Pregunto Amy a lo que Miriya le contesta.
– En el cuarto piso, ala sur del castillo. –Todos se quedan viendo exceptuando Dulce que tomaba jugo. Alexis después le dice a Miriya.
– Pero es lo mismo que mi tía alcanzo a decirme. –Miriya sonríe y después le dice.
– Lo sé pero lo que viene ella no te alcanzo a decir pero bueno es en el ala sur en el cuarto piso cerca de la escultura de La Bruja Dorada.
– ¿La Bruja Dorada? ¿Y quién es esa bruja? –Una voz conocida contesta.
– Es una bruja muy conocida en el mundo mágico, se dice que estaba al mismo nivel que el famoso mago Merlín. –Alexis ve que atrás estaba su hermano mayor.
– ¿Y tú qué haces aquí? –René le contesta.
– Nada, solo pasaba cuando escuche a la Bruja Dorada. –Alexis le pregunta.
– Pero es primera vez que oigo a esa tal bruja. –René se ríe diciendo.
– No me extraña que lo sepas. La Bruja dorada fue opacada por el machismo que había en ese tiempo y por el mismo Merlín y este como era hombre se hizo tan conocido que abarco el mundo numano. Al contrario de ella que solo es conocida en el mundo mágico antiguo. Ya te dejo porque me llaman, chao hermanito. –René se va y Miriya sigue…
– Bueno, cerca de la estatua hay que pisar una baldosa pero de ahí no sé más.
– ¿Y por qué? –Pregunto Abraham a lo que Miriya contesta algo avergonzada.
– Porque la profesora me pillo y me mando de vuelta al primer piso.
– Entonces habría que intentarlo de nuevo. –Lo que dijo Alexis hizo que Miriya lo mire con intensidad y le diga.
– Claro pero será difícil, no prometo nada, ahí veo con Abraham como lo hacemos, ¿Y ustedes, alguna novedad? –Alexis mira a Amy quien también lo mira a él. El primero piensa que con las prácticas y la meditación no ha ayudado mucho a Amy pero esta luego de cerrarle el ojo le dice.
– Como Alexis ha estado ocupado, fui a la biblioteca para saber algo de las catacumbas y calabozos pero no encontré mucho que me sirva así que le pregunte al profesor que nos pillo en esa oportunidad y le pude sacar el lugar donde nos vio ese día y bueno fui a ese lugar pero no pude entrar por donde salimos. –Abraham le pregunto el motivo a lo que Amy ruborizada le contesta.
– Porque me quebré una uña. –Ambos hombres se echaron en la mesa y Amy les dice.
– Pero es que mis uñas son importantes, además me dolió y ese pedazo de piedra es muy pesado para mí. –Miriya le dice.
– Te entiendo, quebrarse una uña es muy doloroso. –Alexis se une diciendo.
– ¿Y por donde caímos esa vez? – Todos se le quedan viendo y pareciera que nadie sabía hasta que…
– No se puede, taparon el hoyo que habían dejado. –Todos miran a Dulce y esta al ver que todas las miradas estaban hacia ella, termina diciendo.
– Cuando me contaron la historia, fui a ver y bueno todo está igual que siempre, parece que ese mismo día el hoyo fue tapado.
– Entonces debe haber otra entrada. –Dijo Abraham a lo que Alexis dice.
– Claro que tiene que haber otra, pero sin un mapa del castillo no lo sabremos, además sabemos dónde está una de las entradas o salidas.
– Pero ir los 5 será demasiado sospechoso, además solo pueden haber estudiantes de segundo año.
– ¿Por qué dices eso Amy? –Esta al ver que nadie sabía mira al cielo como clamando un milagro y después les dice. –Los primeros ocho pisos, cada uno pertenece a una generación, por lo tanto si hay un alumno de un año que difiere al del piso debe estar autorizado o porque tiene clases en una de las salas. O sea, nosotros no podemos estar caminando libremente por los pisos salvo los fines de semana pero hay cierto resguardo.
– Pero si el Salón Vanscint está en el tercer piso, ¿Acaso tenemos que estar autorizados para estar ahí? –La pregunta hecha por Abraham hace que Amy les explique.
– No, a ver… Las reglas son que cada alumno puede caminar libremente por los 8 pisos salvo las zonas donde no tiene acceso. Para nosotros el primer piso es de libre acceso, el tercer piso levemente accesible, hay zonas donde no tenemos acceso alguno, y en los otros pisos los accesos son más restringidos. Quizás esa sala donde nos aparecimos estaba con acceso restringido.
– ¿Entonces como lo hacemos, como llegamos a esa sala? –Pregunta Abraham a lo que Alexis contesta.
– Dulce y yo lo haremos. –Dulce casi se atraganta con lo que tomaba en ese momento, los otros quedan boquiabiertos y Miriya así muy bromista le dice.
– Eaa Alexis no pensé que fueras así tan aprovechador. –Alexis extrañado no entiende a lo que va su amiga hasta que se da cuenta y su mirada se abre y luego se ruboriza diciendo.
– ¿No cómo crees? Ella y yo podemos estar ahí sin que se den cuenta.
– ¿Y cómo? –Alexis le cierra un ojo a Amy y luego dice.
– No les puedo decir jeje pero me llevara meses hacerlo. Eso sí no recuerdo donde era la sala en la que estuvimos. –Amy le contesta.
– Deben tomar la escalera que está cerca del Salón principal llegas al segundo piso y luego doblas a la derecha y estarán en el pasillo. La sala es la 217 B.
FIN CAPÍTULO 18
El Capítulo 19 “La Falsa Bruja Dorada” se estrenará el 11 DE ENERO DEL 2016. Se puede adelantar solo si se logran 900 visitas antes de la fecha establecida.
Dejen sus comentarios y sugerencias sera de gran ayuda, no sean tímidos. Espero les guste la lectura escrita por mi. Sigan leyendo e invitando a quienes les guste una buena lectura.
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Crónicas del Magín Milenario episodio 1 (c)
2014
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