#32 Frase de lunes

Publicado el 18 enero 2016 por Kevinmancojo

Tercer lunes del año, sé que me salté el de la semana pasada, pero bueno. Imagino que me lo perdonaréis.

Sea como sea, hoy sí traigo una y me gusta bastante. Es una de las que llevo muy a rajatabla:

“Vive como si fueras a morir mañana; aprende como si el mundo fuera a durar para siempre.” – Mahatma Gandhi

Y así es como vivo yo, al menos eso es lo que intento. Trato de hacer cada día las cosas que me gustan y a la vez intento avanzar hacia mis objetivos. Y durante todo este camino siempre me esfuerzo en aprender, bien sea emocionalmente o profesionalmente.

Recuerdo que antes de meterme en la fundación de RafaPuede, yo no tenía ni idea de la existencia de las impresoras 3D. Hoy día sé cómo funcionan y la de utilidades que puede llegar a tener. Y si hablamos de un aprendizaje emocional, la última entrada es un claro ejemplo sobre ello.

La primera parte de la frase sé que es algo complicada. Hay quién lo lleva al extremo y se pasa la vida de fiesta en fiesta sin recordar lo que hizo y hay quién se tira metido en casa mirando lo bonita que es la pared de su cuarto mientras dice que su vida es aburrida. Todo está bien en su justa medida.

Para mí tiene un valor inmenso las horas que paso con la familia y los amigos o los momentos que estoy a solas dando una vuelta, también el disfrutar de lo más simple como el amanecer. Siempre que lleve a cabo alguna de estas cosas (entre muchas otras), mi día será de 10. No necesito mucho para poder decir que podría morir mañana.

Pero lo más importante es que no lo debemos hacer por los demás, lo debemos hacer por nosotros. Si algún día llegamos a ser unos ancianos sentados en una silla de ruedas y miramos hacia atrás, tendremos que sentirnos orgullosos de lo que hicimos, debemos estar satisfechos de haber llegado a esa silla de ruedas o mejor aún, que la causa de terminar ahí sea el agotamiento de haber construido constantemente nuestro camino disfrutando cada día y habiendo aprendido con cada ladrillo que colocábamos. Hagamos que nuestros nietos quieran escuchar nuestras aventuras.