BBC Tecnología
La campaña para impulsar la enseñanza de habilidades informáticas, particularmente relacionadas con la programación, en las escuelas está tomando fuerza en varios países.
Por ejemplo, en el Reino Unido, empresas líderes del sector tecnológico como Google y Microsoft están brindándole su apoyo a las conclusiones que arrojó un informe que llevó por título: Next Gen (Next Generación: Próxima Generación).
El documento plantea que el Reino Unido podría ser un centro global para el desarrollo de videojuegos y para la industria de los efectos especiales, pero sólo si se cumple una condición: que el sistema educativo participe en el esfuerzo.
Las estadísticas sobre el número de personas que se han inscrito en la universidad para estudiar computación dejan mucho que pensar.
En 2003, alrededor de 16.500 estudiantes se inscribieron para seguir estudios informáticos en el servicio británico de admisiones universitarias, conocido como Universities and Colleges Admissions Service (UCAS, por sus siglas en inglés).
En 2007, las cifras disminuyeron a 10.600 y aunque se recuperó un poco el año pasado al alcanzar los 13.600 inscritos, la caída en el porcentaje de estudiantes que quieren dedicarse a estudiar computación fue de 5 % a 3 %.
El estereotipo de que las ciencias de la computación son carreras para "cerebritos" se ha reforzado. El aumento en el porcentaje de solicitudes de ingreso de hombres en ese periodo se incrementó de 84 % a 87 %.
Escuela
Pero el problema, de acuerdo con las organizaciones que impulsan el cambio, empieza en la escuela y con una materia en específico: Tecnología de la Información y las Comunicaciones (ICT, por sus siglas en inglés: Information Communications Tecnology).
Se trata de una materia que es vista por sus detractores como la enseñanza de habilidades de oficina más que por una comprensión real por entender lo qué es la computación.
Pareciera que ese mensaje también lo están recibiendo los niños, pues el número de quienes estudian informática ha caído.
La respuesta, de acuerdo con las empresas y las organizaciones que promueven la campaña, es incorporar la ciencia de la computación en la forma de programación en el pensum escolar.
Y han encontrado lo que podría ser considerado un buen lema: "Programar es el nuevo latin", señaló Alex Hope, coautor del informe Next Gen.
"Necesitamos darles a los niños una comprensión adecuada sobre las computadoras si quieren competir por todos los tipos de trabajos".
Hope es un ferviente creyente de que una combinación de la high technology o última tecnología y las industrias creativas es la mejor esperanza que tiene Gran Bretaña para crecer.
Su opinión tiene una base muy sólida.
Su compañía de efectos visuales, Double Negative, es una historia de gran éxito. Ha estado detrás de películas como Harry Potter, Batman e Inception, ésta última se alzó con un Óscar.
La empresa empezó en 1998 y ahora tiene una fuerza laboral de cerca de mil personas.
Matemáticas
Alex Hope señaló que su compañía necesita una mezcla rica de talentos: "Estamos buscando eruditos: gente con conocimientos en ciencias de la computación, matemáticas, física o arte. Esas personas pueden prosperar".
De acuerdo con el experto, es complicado reclutar personas que tengan una sólida formación en ciencias duras.
"Simplemente no estamos produciendo suficientes graduados con habilidades en informática o en matemáticas".
Como muchos que piden que haya un enfoque diferente hacia la enseñanza de la computación, Hope recuerda que en la década de los ochenta aprendió a programar a través de un programa de la BBC.
Hoy en día, se le unirán el ingeniero líder de Google en el Reino Unido y el director de educación de Microsoft en ese país para que la exhortación por un cambio de paradigmas no se quede en meras palabras.
"El gobierno está buscando oportunidades para crecer", indicó Hope.
"Por eso, necesita entrenar a programadores que empresas creativas y de última tecnología necesitan para crecer".
Gobierno
El gobierno parece ser receptivo al mensaje.
Hace un par de semanas, le pregunté al primer ministro británico, David Cameron, sobre la educación informática.
El líder admitió: "no estamos haciendo lo suficiente para educar a la próxima generación de programadores" y dijo que se llevarían a cabo medidas.
Las expectativas son grandes y hay optimismo de que habrá un compromiso real por incluir la informática en el pensum escolar.
Pero lo que podría ser más importante es cambiarle la cara a la materia.
Mientras "la programación es el nuevo latín" podría ser un buen mensaje para enviarlo a los padres y a los políticos, algo un poco más sexy se necesitará para convencer a los escolares de la ciencia de que la computación es chévere.