Desde el silencio
te amo en la distancia
con mi palabras.
No sé quién eres,
princesa de mis sueños
y mis poemas.
Sé que persigo
tus pasos en la arena
con mi farol.
Y es el silencio
testigo de mis actos
y mi cariño.
Porque te busco,
persigo un imposible
entre la niebla.
Bruma profunda,
de plata y de misterio
donde tú estás.
Tierno silencio
que acudes en la noche
y que me abrazas.
Dame la luz
del faro y del destino
hacia buen puerto.
Y sí, la quiero,
aunque sea en silencio
y sin palabras.
Rafael Sánchez Ortega ©
08/04/21