#48 LIMPIEZA DE SANGRE (Alatriste#2) de Arturo Pérez-Reverte

Publicado el 18 abril 2013 por Anuca @ideaspalabras

LIMPIEZA DE SANGREArturo Pérez-ReverteAlatriste#2Editorial Alfaguara264 páginasISBN: 978-84-204-8359-7
A punto de incorporarse a su antiguo tercio en Flandes, Diego Alatriste se ve envuelto por mediación de su amigo don Francisco de Quevedo en otra peligrosa aventura. Una mujer ha aparecido estrangulada en una silla de manos frente a la iglesia de San Ginés, con una bolsa de dinero y una nota manuscrita: Para misas por su alma. El enigma se complica con los sucesos misteriosos que ocurren tras las paredes de un convento, cuando Alatriste es contratado para rescatar de allí a una joven novicia. En el azaroso y fascinante Madrid de Felipe IV, entre lances, tabernas, garitos, intrigas y estocadas, la aventura pondrá en juego la vida de los amigos del capitán, haciendo surgir del pasado los fantasmas de viejos enemigos: el pérfido secretario real Luis de Alquézar, el inquisidor fray Emilio Bocanegra y el siniestro espadachín italiano Gualterio Malatesta.

Como ya os comenté en la reseña de la primera entrega de esta saga, este año me he propuesto que el Capitán Alatriste deje de estar en mi lista de pendientes, así que... para no perder el ritmo, vamos a por una nueva aventura de tan singular personaje.
En Limpieza de sangre, nuestro capitán se ve envuelto en un nuevo peligro empujado por la amistad que le une a Don Francisco de Quevedo. Dispuestos a rescatar a una novicia de un convento, que más lugar de retiro espiritual parece el sitio perfecto para perder cualquier tipo de virtud, cuando están manos a la obra descubren que alguien les ha tendido una trampa. Una trampa que traerá consigo consecuencias muy graves para nuestros amigos, especialmente para uno (me guardo cuál es^^). ¿Conseguirán salir adelante indemnes de esta nueva aventura? ¿Quién puede querer ajustar cuentas con nuestros amigos? Podréis averiguarlo si os animáis a acurrucaros bajo el abrigo de esta prenda.
Como ocurre con cualquier saga, es inevitable comparar este segundo volumen con el primero, y bajo mi punto de vista, este sale mejor parado, o al menos a mí me ha gustado más.
En El Capitán Alatriste resultaba mucho más importante que la acción el presentarnos a los protagonistas de esta serie, es decir, a quienes nos acompañarán a lo largo de todas las entregas; y también era fundamental situarnos en el Madrid de aquella época, lograr una buena ambientación que permitiera al lector viajar en el tiempo para quedarse, y que supiera manejarse por ella como un testigo más de las aventuras que allí se sucederán. En Limpieza de sangre la acción gana protagonismo porque el lector ya puede volar solo en algunos aspectos, ya conoce la gama de colores que van a predominar en este patchwork de historias. Y la acción me ha gustado mucho, la verdad. Me ha gustado mucho por dos razones fundamentales: la primera, que la Inquisición española forma parte de las distintas madejas con que se teje esta prenda y... ¡amigos míos!, la inquisición siempre trae consigo peligros, miedos... ¡a mí se me pone la piel de gallina sólo al pensar que forma parte de nuestra Historia! Y en segundo lugar porque a pesar de que la acción es nueva no es del todo independiente de la que se nos presentó en la primera entrega, e ir descubriendo la evolución de ciertos personajes y sus intrigas me ha empujado a que querer avanzar y desear seguir probándome lo que esta saga aún tiene por ofrecerme.
Por lo demás, seguimos disfrutando de la forma en que está escrita, de esa prosa con tintes de otro tiempo; y también de los personajes, aunque en esta entrega hallaremos menos "cameos" que en la primera. También iremos conociendo un poco mejor al capitán que tan difícilmente se quita la coraza y se entrega. Cierta sensibilidad va abriéndose paso entre la dureza y, de nuevo, la anteposición de su honor en momentos de lo más comprometido será algo indiscutible que esperemos no acabe pasándole factura. 
«Eso era lo desconcertante del capitán: podía batirse por una causa en la que no creía, emborracharse con un enemigo, o morir por un maestre de campo o un rey a los que despreciaba»
Otro de los atractivos de esta saga que sigue manteniéndose es la lección de Historia que nos regala, independientemente de que puede verse pringada de opinión (pues es inevitable salvo que consultes un manual e incluso a veces ni ahí). Conocer detalles del momento, satisfacer curiosidades... siempre es un punto a favor de la lectura, al menos bajo mi punto de vista.
En definitiva... ¡Señores! Solo puedo decirles que con la Iglesia hemos topado y no será asunto sencillo. ¿Qué será lo próximo? Yo ya tengo mi arcabuz cargado, y la pluma afilada para dedicarle un soneto si es menester.

«En cuanto a nosotros, fuimos hombre de nuestro siglo: no escogimos nacer y vivir en aquella España, a menudo miserable y a veces magnífica, que nos tocó en suerte, pero fue la nuestra. Y ésa es la infeliz patria -o como diablos la llamen ahora- que, me guste o no, llevo en la piel, en los ojos cansados y en la memoria»
---«Eso era nuestra España: mucho rigor y ceremonia, mucho esclavo preventivo, mucha reja y mucha fachada -en plenos desastres en Europa, las cortes de Castilla discutían sobre el dogma de la Inmaculada Concepción-, mientras los clérigos apicarados, las monjas sin vocación, los funcionarios, los jueces, los nobles y todo hijo de vecino cardaban la lana bajo cuerda, y la nación dueña de dos mundos no era sino patio de Monipodio, ocasión para el medro y la envidia, paraiso de alcahuetes y fariseos, zurcido de honras, dinero que compraba conciencias, mucha hambre y mucha bellaquería para remediarla»
---«Y seguía mirándome, enigmática, al decir aquello. Pero al mismo tiempo asomó a su boca de niña una sonrisa tan hermosa, tan perfecta, tan llena de toda la luz de aquel cielo español inmenso como el abismo de sus ojos, que deseé morir en efecto en ese instante, acero en mano, gritando su nombre como allá en Flandes mi padre había gritado el de su rey, su patria y su bandera. Y a fin de cuentas, pensé, quizás todo ello fuera la misma cosa»

LIMPIEZA DE SANGREArturo Pérez-Reverte


¿Qué os parece? ¿Os llama más el primero o este?Soy toda ojos para leeros ;)