La tarde gris,
las nubes dormilonas
y calma tensa.
Es un preludio
de lluvias y tormentas
que está anunciado.
Hay una ausencia
de notas y colores
en estas horas.
Pequeños guiños,
guirnaldas encantadas
y algunos versos.
Es la alegría,
la esencia de la vida:
"las mariposas"
Porque sus alas
no aceptan, de la lluvia,
los tibios besos.
Besos y llantos
que bajan de las nubes
desperdigadas.
Quizás mañana,
el sol salga de nuevo
y ellas regresen.
Yo las preciso,
requiero su silencio
y su candor.
Así los sueños
se envuelven en un manto
de fantasías.
Rafael Sánchez Ortega ©
06/07/22