Se ve una luz
brillando en la ventana
de tu casita.
Cierro los ojos
y voy hasta tu lado
en pleno bosque.
Está en un árbol
la casa, donde habitas,
y que es tu hogar.
Algo de magia
se escapa de la estampa
que ahora contemplo.
Es un suspiro
en medio del follaje
y de la selva.
Se ven ventanas
y largas balconadas
entre las ramas.
No sé si sueño
o el sueño es un producto
de tanta magia.
Pero sonrío.
Te pienso y adivino
tras sus paredes.
Y me pregunto,
si quieres, mariposa,
venir conmigo.
Iremos juntos
a ver desde los cielos
tan bello bosque.
Y en una nube,
al sol le robaremos
unas caricias.
Rafael Sánchez Ortega ©
13/08/23