Besé la lluvia
llegando de los cielos
desde tus labios.
Y pensé en ti,
mi linda mariposa,
hoy tan distante.
Estás muy lejos,
noté con amargura,
en la mañana.
Te necesito,
me dice el corazón
y los sentidos.
Y es la verdad.
Preciso tu mirada
y tu palabra.
Esos latidos
que salen de tu pecho
y me dan vida.
El tibio beso
que tomo de tus labios
y que me ofreces.
La eterna paz
que dejas en mi alma
con tu presencia.
Y es que te amo,
te quiero y necesito:
"mi mariposa".
Rafael Sánchez Ortega ©
07/08/24