1. El derecho de decidir por ti mismo.
No dejes las llaves de tu crecimiento y felicidad en los bolsillos de alguien más. Las relaciones no se basan en autoridad u obediencia; se basan en acuerdos de amor y respeto. No puedes vivir el resto de tu vida siendo la fantasía de alguien más. Debe existir compromiso y el espacio para hacer lo que consideras apropiado, incluso si alguien querido está en desacuerdo. Entrega, pero no permitas que te usen. Escucha a quienes amas, pero nunca dejes de poner atención a tu voz interior.
Nunca te disculpes por lo que sientes y lo que no sientes; de esta manera estarías traicionándote a ti mismo. No importa cuántos consejos recibas, a veces tienes que sentir las cosas por ti mismo, tomar decisiones por ti mismo. Experimentando cosas como primer paso para construir tus propios conceptos.
2. La necesidad de ser entendido.
No hay nada más íntimo que ser entendido y entender al otro. Incluso cuando existan diferencias, toda relación sana contiene esta mutua comprensión.
Recuerda escuchar sin defender, y habla sin ofender. La comunicación, no sólo constituye una parte importante de una relación, es la relación completa. Hay sólo una regla para llegar a ser un buen comunicador: La voluntad de escuchar a otros. No siempre necesitamos alguien que hable sin cesar, sino un corazón que escuche.
3. La libertad de amar.
El amor es la fuerza creativa del universo. Es tan importante para la vida, como el oxígeno lo es para poder respirar. Cuando el amor está presente en nuestras vidas nos sentimos más felices, más optimistas y satisfechos. Sin amor en nuestras vidas, nos volvemos gruñones, cínicos, resentidos y críticos con nosotros mismos y con otros. Finalmente aplaca la grandeza que existe en nosotros.
Abre tu corazón y da amor. Ama a la gente, ama experiencias y amate a ti mismo. Aléjate de los que traten de detenerte.
4. El coraje y la determinación de experimentar en la vida.
Para vivir una vida increíble, debes perder el miedo a equivocarte. Recuerda que hacer algo y equivocarte es al menos diez veces más productivo que simplemente no hacer nada. Incluso cuando las cosas no resulten, al final, ganas experiencia. Y la experiencia es, a menudo, la cosa más valiosa que tienes para dar.
No dejes que alguien te intimide para avanzar. Todo en la vida es un experimento. Mientras más experimentos realices, mejor. Hay dos opciones, o aciertas, o de todas maneras aprenderás del error.
5. Disfruta.
Nunca dejes que algo o alguien se interpongan en tu felicidad. Vive una vida que se acomode para hacerte reír cada día. No querrás darte cuenta mañana que tu vida se reduce a un cúmulo de deberes y promesas vacías.
Así que adelante…Canta en tu carro a viva voz, baila en el living de tu casa, pinta las paredes de tu casa del color que te plazca, disfruta de una botella de buen vino o un pastel de chocolate. Si así lo quieres, haz una fiesta, pinta, escribe poesía y lee libros tan buenos que te hagan perder la noción del tiempo. Simplemente sigue viviendo y disfrutando…
6. Otras relaciones importantes, incluyendo la relación que tienes contigo mismo.
Si una relación te está aislando del mundo, es tiempo de liberarte. Después de todo, una parte fundamental del amor es la libertad.
Así que no culpes a tu actual relación de interferir en otras relacione importantes, o que te roban tu autoestima y libertad personal. No, no culpes al amor. No es amor, es posesión, manipulación, confusión. El amor no tiene nada que ver con esa situación. Por amor no se cierran las puertas de la felicidad y libertad, más bien se abren de par en par.
Igualmente si alguien espera que seas quien no eres, da un paso al lado. Es más sabio perder una relación por este motivo, que mantenerla intacta pretendiendo ser alguien que no eres. Es más fácil curar un corazón roto y conocer a alguien nuevo, que comenzar a cuestionar quien eres en realidad.
7. Tu tranquilidad y paz Interior.
No importa qué hagas o cuan increíble seas, a pesar de todo esto hay gente que te molestará, te faltará el respeto y te tratará mal. Déjalos ser, deja que el karma sea el que se encargue de las cosas crueles que han hecho. El odio y la negatividad llenaran tu corazón y tu mente, consumiéndote a ti y a tu potencial. Comenzarás a sanar y a madurar emocionalmente cuando dejes atrás esas heridas del pasado, perdonando a la gente que te ha dañado y perdonándote a ti mismo por los errores cometidos.
Aprender a ignorar a ciertas personas o situaciones es uno de los mejores caminos para la paz interior. Deja ir lo que debas dejar ir, déjalos ser, así podrás estar en paz.
8.Tu imperfecta magnificencia.
No es difícil encontrar a alguien que te diga que te ama, lo realmente difícil es encontrar a alguien que de verdad lo sienta. Eventualmente lo encontrarás, así que no te enamores precipitadamente. Encuentra a alguien que no se avergüence de decir que te extraña. Alguien que acepte el hecho de que no eres perfecto, sino que te ame tal como eres. Alguien que te entregue completamente su corazón. Alguien que te diga: “te amo” y se esfuerce en demostrarlo cada día.
Para la gente que realmente te ama, eres magnifico. No porque tengan la incapacidad de ver tus defectos, sino porque ven claramente la belleza de tu alma. La gente que se preocupa por ti, te acepta con tus defectos y virtudes al mismo tiempo.
Vía Phrónesis