Y aquí me tienen terminando la semana 33 y empezando mi licencia por maternidad. Creo que estas últimas tres semanas fueron las más bizarras de todo el embarazo. No sólo por las cosas que me sucedieron (muchas) sino por las conjeturas y el pánico general ante un parto prematuro inminente fundado en...que estoy muy panzona, ponele? Estos fueron los comentarios que llegaron al podio:
1º Puesto: "No llegas al 15." Leasé de Diciembre. Momento en el que detenía mis actividades laborales. Todo esto era acompañado por un movimiento de cabeza a ambos lados con un dejo de pena en la mirada.
2º Puesto: "Andá a tu casa. Vas a tener el pibe acá."
3º Puesto: "Ese chico no llega a término."
El último era bastante alentador comparado con los otros. Insisto que todo esto estuvo basado en nada porque mis ecografìas no hablan de parto prematuro, estoy bien de peso, no tengo retención de líquido y estoy bastante ágil. Recalco la agilidad certificada por el chino de mi cuadra que quiso alcanzarme la leche que me había olvidado y cuando volví me dijo:"Ute caminar rápido. Salir y ya no taba."Calculo que a la ansiedad de mis allegados, padres, amigos y compañeros se le sumaron las altas temperaturas, los cortes de luz (que no ayudaron en absoluto), fin de año (juro que en un momento me vi pariendo en plena Nochebuena con todos a mi alrededor en un estado de pánico profundo), la nube tóxica (sí, tuvimos una nube tóxica), las inundaciones y el hecho de que no tengo una pancita mini. Los que todavía no parecieron enterarse de mi estado y claramente piensan que me comí una sandía entera o estoy hinchada (ponele) son algunos de los viajeros del bondi nuestro de cada día. Les regalo uno de los tantos momentos maravillosos que vivo cada mañana.Situación: El bondi iba con todos sus asientos ocupados y una persona parada en el fondo del mismo. En el primer asiento iba una señora con una nena de unos siete años aproximadamente que llevaba su mochila escolar. Como nadie atinó a cederme un asiento, le pregunto a la mujer si me lo podría dar y obtengo la siguiente reacción: Escaneo de todo mi cuerpo y cara de interrogación. Le explico a la señora que estoy embarazada por si no le había quedado claro después del escaneo corporal y de ver mi panza de 7 meses. La misma me contesta: "Es que no puedo dejar a la nena sola...No sé..." Bueno, gracias señora. No importa. Encaro para las señoras cincuentonas de la segunda fila de asientos que se estaban haciendo las distraídas cuando la dama en cuestión se levanta y finalmente me cede su lugar. Sin embargo, esto no termina ahí. A las dos cuadras la señora se levanta con su hija. Yo pensé que era una obse, en fin. Fue. Pero a mitad de camino se sube una chica embarazada , pelea por su asiento y las susodichas del segundo asiento dicen "Qué barbaridad! Nadie se levanta eh!" ( Y ustedes, lindas????). A tan sólo dos cuadras de bajarme sube una mujer con un nene en brazos, todos haciéndose los zonzos, el colectivo lleno hasta la manija y una embarazada (yo) le da el asiento a la señora. Realmente no sé si hay mujeres que no fueron madres y les importa un rabano, si hay hombres que nunca tuvieron una embarazada en la familia o todos somos tan individualistas que nos resbala lo que le pase al de al lado. Para un lado o para el otro lado, everybody went bananas!
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8 meses: Everybody went bananas.
Publicado el 15 diciembre 2012 por CassandracastroTambién podría interesarte :