No pocas veces me he derrumbado con tanto exceso de información y teorías literarias, aplastada bajo un sentimiento de culpa, o despersonalización, o estado alterado de conciencia al mirar el sector editorial. Todo depresivo calculando años de publicación, edad cronológica o número de empresas que no estaban antes y que, si hubieran estado, las cosas serían distintas. Llegar a destiempo con el dominio propio en la era pre-blog y llegar a destiempo de nuevo en la era post-blog, tantos años sin espacio propio, bla, bla, bla, bla.
Bla, bla, bla, bla. Qué más da. Que es demasiado largo y va a parecer una nueva retahíla de lloros y lamentos.
Seis frases. Borra-cambia-borra-cambia-cambia-siete y media-borra-cambia-borra-cero.
Acabo de atascarme un poco al intentar resumir el estado de contradicción mental que presidía los minutos dedicados a redactar un post tras otro en este hueco. Y los accesos de rabia. La versión siete frases y media había quedado como una charla entre Jodorowsky y Paulo Coelho borracho. Quita, quita. Lo resumo.
Intento definitivo:
Es muy gracioso ser 100% uno mismo escribiendo cosas por la red (siempre lo he hecho y lo seguiré haciendo) y que la audiencia lo confunda con una pose, autopromo o similar. Por eso estoy tan obsesionada desde hace dos décadas con lo de ser escritora, porque soy de verdad en la hoja y ninguna vez ha existido el folio en blanco. En la vida real... hago como que no pienso o no tengo imaginación. Excepto con la gente de confianza, esas saben que pienso demasiado. Con lo cual se entra en una espiral filosófica de Arte, Literatura, inspiración, profesión-mercado de la que se puede hablar horas sin llegar a nada. Otro día.
En su momento no me tomé en serio la tarea. Lo dejé estar para más adelante y entré en un mutismo forzado. Hasta que volví a interesarme por escribir con este maltido blog (el primero de temática personal) y acabé repentinamente desquiciada, llena de rabia. La gente "normal" sufre de envidia, que Fulano publica y yo no, y el de más allá y etcéteras varios. Lo mío era una rabia efervescente. Contra mí.
Ahora empiezo a vislumbrar respuestas y he llegado a un nirvana de relax. Por cada post publicado aquí, hay un promedio de 2 que se quedaron en borrador y unas 10 páginas de diario que hablan de otro centenar de cosas. A quien le gusta escribir, lo hace hasta mientras caga en el water.
¡Relax, juerga y guasa everybody!
Ya veréis que dejo de
P.D. Echevarría perdóname. Pero es que no entiendo que no entiendas Internet.