El pinsapo es un abeto endémico de algunas Sierras Béticas Occidentales, ( Sierra de Las Nieves, Grazalema, Sierra Bermeja). Es una especie más de esos abetos del Mediterráneo Occidental , con caracteres comunes y compleja taxonomía. Así al otro lado del estrecho, en el Rift , y a penas cien kilómetros de los pinsapares andaluces aparecen otras especies , A. numidica, A. tazaotana y A. marocana , considerándose los dos últimos por algunos autores como subespecies del A.pinsapo (Farjon 1990). (3)
Se cría entre los 1000-1700, donde las condiciones microclimáticas y de humedad lo permiten, ya que requieren como mínimo unos 1000mm de precipitación anual. Es en las umbrías de la cara Norte de las montañas calizas donde alcanzan su máximo desarrollo. En su piso basal convive con encinas, quejigos y pinos, y en su cotas superiores puede aparecer disperso sobresaliendo entra las sabinas rastreras ( Juniperus sabina) , matorral almohadillado y junto al peculiar quejigo Quercus alpestris .
Quien iba a esperar que en el sur Peninsular, “mediodía español”, se desarrollasen estos bosques de abetos más propios de los Alpes y la Europa boreal, y el pasar por el interior de uno de ellos en estas latitudes como ocurre durante el ascenso al Torrecillas ( Sierra de las Nieves) desde los “Quejigales”, a más de uno nos surgen extraordinarias sensaciones que nos trasladan en el espacio y el tiempo.
En un interesante artículo sobre este árbol sus autores dejan clara la particularidad de estos bosques relictos propios de otras épocas más frías y húmedas para el sur Peninsular. Su título lo dice todo: “El pinsapo, abeto endémico andaluz, O, ¿ Que hace un tipo como tu en un sitio como este?” de Linares J.C y Carrreira J.A en 2006 (4).
Actualmente se atribuye a Clemente el descubrimiento botánico del pinsapo que lo conoció en 1809 durante su viaje por la Serranía de Ronda, (dicen que andando) en sus escritos que durante mucho tiempo se creyeron perdidos así lo recogía: “..Entramos en el pinar en el que hay algunos quejigos y todo lo demás pinsapos. Se parecen algo estos, vistos desde cierta distancia al ciprés por lo oscuro y su forma cónica…”. ( 6)
Los pinsapares están protegidos a través de la legislación ambiental y normativa de espacios naturales protegidos de Andalucía , por directivas europeas y recientemente como reserva de la Biosfera. El pinsapo está catalogado como especie en Peligro (EN) en la Lista Roja de Flora Vascular Amenazada de Andalucía. Pero a veces el que un espacio posea tantas figuras y distintivos de protección también implica el poner de acuerdo a más personas en su gestión .
Actualmente aunque los pinsapares gozan de una mejor salud que en épocas pasadas, habiendo pasado de unas 450 Ha en 1940 a las más de 3000 actuales, todavía se enfrentan a varias amenazas como los incendios, el sobrepastoreo , fuerte competencia intraespecífica, y como no, el reto del cambio global sobre estos ecosistemas de montaña mediterránea.
Referencias bibliográficas:
- Boissier Ch. E. Viaje botánico al Sur de España durante el año 1837. Granada-Málaga, Fundación Caja Granada, Universidad de Málaga, 1995.
- Cabezudo B. El viaje botánico de Edmond Boissier al Sur de España ( 1837-1987) .Acta Botánica Malacitana 12: 3-26.
- Guzmán Álvarez J.R . Los pinsapos de la otra orilla del estrecho. Quercus 275 ,Enero 2009.
- Linares J.C y Carrreira J.A. El pinsapo, abeto endémico andaluz, O, ¿ Que hace un tipo como tu en un sitio como este?. Ecosistemas(AEET).Septiembre 2006 pg171-191.
- Becerra Parra ,M .Guía Botánica de la Serranía de Ronda. La Serranía 2008.
- Clemente Rubio, Simón de Rojas. “Viaje a Andalucía. Historia Natural del Reino de Granada. 1.801-1.809”. Editado por Antonio Gil Albarracin en el año 2.002. GBG Editora. Almería.
- López Gonález G. Los Árboles y Arbustos de la Península Ibérica y Baleares TomoI Mundiprensa 2006.
- Rodríguez Gonzalez ,A.” ¿ Quien descubrió el pinsapo Boissier o Clemente Rubio?” en laserranianatural . Enero 2008.