“Todo puede arrebatarse a una persona excepto una cosa, la última de las libertades humanas: elegir la actitud vital ante cualquier circunstancia, elegir su propio forma de hacer las cosas...
Al final el ser humano no debería preguntarse acerca del significado de su propia vida, sino más bien debería reconocer que es la vida quien le pregunta a él. En otras palabras, la vida hace una pregunta a cada ser humano, y éste sólo puede contestar a la vida con su propia vida"
Viktor E. Frankl, "El hombre en busca de sentido"