Rosa Parks, 1955
El concepto de activismo o militancia se puede generalizar como la dedicación intensa a una dada línea de acción en la vida pública, ya sea en el campo social, político, ecológico, religioso u otro. También se entiende por activismo la estimación primordial de la acción,1 en contraposición al quietismo.
Hoy en día cualquier mamarracho quiere recibirse de activista saliendo a la calle a gritar un rato o cortando una ruta.
Parece haberse puesto de moda parecer politizado y denunciante, con suspicacia paranoica y sin fundamentos.