Hoy quería hablarte de los recuerdos,
de esa gente que dice
que no se puede vivir de recuerdos
y al final la vida,
está compuesta de eso.
Quería decirte
que me hubiese gustado
que no te hubieses ido,
que te hubieses atrevido
a vivir de locuras
y de bipolaridades,
de hacerte el amor
mientras te saboreo por dentro.
De decirte que soy
de las que te calma y te vuelve loca
al mismo tiempo,
de las que sale a correr
para encontrar historias
con las que soñar,
de vivir con sonrisas
y de llorar sin acumular las penas.
Quería recordarte
que nunca has querido adentrarte,
que ser sincero
quizá te hubiese llevado
a volar en otro infierno.
Por último,
darte las gracias.
No he perdido el tiempo
con cobardes.