La piel advierte y te advierte
advierte el sexo y tu pudor
la pasión y tu rabia pero no te advierte del adiós de la noche encapotada nunca el mundo te advierte ni la vecina del cuarto que se la pasa espiando ni los gritos agudos de esa vieja puertani la consabida muerte nadie te enseña como sufrir ni siquiera como vivir y así sin advertenciassin labios que te besen las manos, los huesos, la pasiónsin cielos que te adviertan de los lugares donde embolsar tus huesos así inadvertidos un día vemos pasar la vida la fe y la razóny por la vereda de enfrente muerte disfrazada sol.Rubén Callejas