Lo agotador de la vida no es vivirla ni sentirla. Es caminar sin rumbo fijo a los sueños.
Lo agotador de la vida es vivirla tirado en el sofá mirando la caja tonta continuamente. Es no soñar ni crear nuevos mundos y realidades. Ni caminar. Estancarse en alguna parte del pasado y ya. Sin avanzar más. Nunca más.
Continúa, no importa lo exhausto que te pueda parecer que te ves. Nada importa si continúas avanzando, soñando, viviendo y creando.
¿Dormir? Nunca lo olvides, porque sueñas y creas, y ya se sabe, las mejores ideas, nacen de lo inimaginado, de lo absurdo y los imposibles.
No dejes que la visa te agote antes de que la agotes tu a ella. Prueba. Ve. Vuelve. Sueña. Crea. Canta. Baila. Vive. Vive todo lo que puedas hasta agotar todas y cada una de las experiencias que te pida el cuerpo. Haz todo lo que desees, que para aburrirte, tendrás toda una eternidad bajo tierra en la que nada habrá que hacer.