Vivir al final de la calle 118 no es fácil. La madre de Valeria y Raven las abandonó hace años sin dar explicaciones y ambas han tenido que aprender a ganarse la vida. Mientras Valeria tiene un insignificante trabajo como modelo, su hermana patea la ciudad en busca de hombres a los que seducir para pagar el alquiler a cambio de sus servicios.
Valeria pensaba que todo seguiría así para siempre… hasta que escucha la música de aquel chico al final de la calle, junto a su casa, y sus miradas se cruzan. Desde ese momento, una serie de curiosas coincidencias llevará a los personajes de esta novela a cambiar sus vidas como nunca se hubieran imaginado.
La verdad es que tenía muchas expectativas puestas en este libro. Es algo que normalmente intento no hacer, pero en esta ocasión ha sido imposible. Muchas personas de mi círculo habían leído versiones anteriores de la historia y me habían hablado maravillas sobre ella, por lo que temía que me decepcionara. Sin embargo, no ha sido así en absoluto: aunque tiene sus fallitos, esta novela ha logrado conquistarme por completo.
Hay algo que llama la atención de esta novela desde el momento en que comienzas a leerla, y es su prosa. No voy a entrar en comparaciones como en la contraportada del libro porque no soy muy amigo de ellas, pero sí que diré que su estilo destaca desde el principio por ser tan cuidado y personal, un estilo que ya quisieran tener autores más experimentados y con más novelas en el mercado. Clara Cortés tiene una narración que absorbe y emociona, tanto que sorprende recordar la edad que tiene. Sí, tiene algunos momentos algo más flojos que podrían haberse pulido un poco, pero el conjunto es muy bueno.
Los personajes son otro de los puntos fuertes de la novela. Valeria está tan bien construida que realmente cuesta creer que no sea real, y creo que eso es lo mejor que se puede decir de un personaje. Es fuerte y vulnerable al mismo tiempo, decidida pero insegura, y tiene tantas facetas que solo puedo felicitar a la autora por su trabajo. Bravo, Clara. Así es como se crea a una protagonista.
Otro personaje de quien también quiero hablar es Simon. Es cierto que al principio puede parecer el típico chico cuqui que aparece para ayudar a la protagonista, y de hecho lo es, pero he de decir también que Clara Cortés logra darle personalidad, hacer que sea menos un estereotipo y más un personaje de carne y hueso, tan real como los demás.
No quiero hablar de la historia para no revelar nada, pero sí que quiero mencionar el final, aunque no os preocupéis, que no habrá spoilers. He visto opiniones en algún otro blog y en Goodreads quejándose por él, porque les parecía precipitado y fuera de lugar, y la verdad es que es algo que no entiendo. Sí, comprendo que cada uno tiene sus gustos, pero a mí el final no es solo que me haya gustado, sino que objetivamente me ha parecido de lo mejor de la novela, lo que termina de convertir una historia muy buena en una historia prácticamente brillante. Resulta un tanto precipitado, sí, pero, ¿qué puedo decir? C'est la vie.
Como parte negativa, aparte de lo que comentaba al principio, tengo que decir que hubo un momento concreto que no acabé de creerme, y para no estropearos la trama simplemente diré que se trata de algo que se descubre acerca del nuevo jefe de Valeria. Es algo que me pareció un tpoco cogido con pinzas, y creo que podría haberse solucionado mejor añadiendo alguna explicación más coherente. En cualquier caso, no es algo que me haya molestado demasiado ni estropee la historia en absoluto.
Poco más puedo decir salvo esto: Felicidades, Clara. Si sigues por este camino estoy seguro de que te espera un futuro brillante, y estoy deseando verlo. Ahora, por favor, date prisa en seguir escribiendo y, si no te importa, no vuelvas a romperme tanto el corazón. Aunque sé que no vas a hacerme caso.
Lo mejor: Valeria y Raven.Lo peor: Ese momento que no me acabé de creer.Te gustará si... quieres leer una historia dura y preciosa al mismo tiempo.