Este año se ha celebrado la 44º edición del festival de cortometrajes de Alcalá de Henares, ALCINE y hemos sido jurado de público en las sesiones del certamen nacional. La calidad de los cortos mostrados ha sido notable y el nivel de gestión de este año ha sido sobresaliente. Expongo aquí los 12 cortometrajes que destaqué con las máximas puntuaciones en mis votaciones entre todas las sesiones del certamen:
- Soy tan feliz (de J.Gautier) Una gran interpretación femenina y una historia de superación entre el deber y el vivir
- Fieras (de L.E. Pérez Cuevas) Los tremendos terrores cotidianos contados de una forma muy visual y con una final para la reflexión.
- Eladio y la puerta interdimensional (de M. Giráldez y M. Provencio Quesada) Historia un tanto surrealista con humor y muy bien rodado.
- Todo un futuro juntos (de P.Remón Magaña) Genial plano secuencia de un diálogo muy sabroso y esperpéntico. Se llevó el primer premio del palmarés oficial.
- Foley Artist (de T.Bestard Rosselló) Encantadora historia con elementos muy cinéfilos ayudándonos a conocer el universo sonoro del cine
- Un día cualquiera (de N. Sanz Fuentes) Tremenda historia sobre la crueldad de la bulimia en una chica. Gran y dura interpretación de su protagonista
- Nena (de A. ruiz de Azúa) Divertido y original guión de la dualidad entre los sentimientos e intenciones en dos etapas de la vida.
- (Re)construcción (de J.M Carrasco Fuentes) Muy buen experimento visual con varios niveles de interpretación separando entre los personajes, los actores y las personas.
- El iluso (de R. Sorogoyen) Divertida historia de un día en la ilusionante vida de su protagonista. Con toques cinéfilos parodiando un poco a "Los ilusos" de Jonás Trueba.
- Café para llevar (de P. Font) Muy bien rodado, muy buenos actores. Una historia de amor perdido que emociona.
- Alex (de L. García Alonso) Buen seguimiento subjetivo de la chica en busca de su madre biológica.
- Bikini (de O. Bernàcer) Genial y divertida recreación de una conversación histórica a tres bandas entre Franco, Carmen y el alcalde de Benidorm