En la reserva Cootes Paradise, entre las ciudades de Hamilton y Burlington, hay una abundante vida animal. El zumbido de insectos y grillos es constante, pero en el bosque uno también puede escuchar diferentes aves y reconocer el agudo chillido de las ardillas. Más cerca del agua, el croar de sapos y ranas, el trompeteo de los gansos y el zumbido de las libélulas.
Hay otra fauna más silenciosa - el buitre, Cathartes aura - enorme, de planeo magestuoso, que se descuelga de las alturas y vuela en círculos bajo el cielo del verano. Abajo, pueden ver algunos posados en torres eléctricas. En el bosque está el chipmunk, Tamias striatus, gracioso pariente de la ardilla, vivaracho y rápido, te observa desde lejos, pero se acerca si cree que le has traído maní o nueces. Logré captar uno más abajo: