Dicen que es inofensiva, pero que si un hombre las ve a los ojos fijamente queda hechizado para siempre y jamás se le vuelve a ver.
Lo que más me llama la atención de este personaje de nuestra cultura es que tenga los pies volteados, al revés, es interesante y a la vez atemorizante.
Cuando mi abuela nos contaba esas historias, especialmente en noches oscuras, cuando se iba la luz, nos dominaba el miedo y la curiosidad y luego era difícil poder dormir.
Claro, imagínense una mujer con los pies volteados, a ver si no se asustan O.o