«Solo Lewis Carroll nos ha mostrado el mundo tal y como un niño lo ve, y nos ha hecho reír tal y como un niño lo hace.» Virginia WoolfQuién no tiene un recuerdo en su memoria infantil, de Conejos Blancos corriendo con chaleco y reloj en mano, de orugas fumando con narguiles, del Gato de Cheshire con su eterna sonrisa, de ratas, peces... un sin fin de animales parlantes que conviven con sombrereros que por no limpiar las tazas del té ponen una mesa inmensa en la que van cambiando de lugar para encontrar tazas limpias... Alicia es conocida por todos y a la vez la gran desconocida. Porque Alicia en el país de las maravillas es mucho más de lo que vemos en el cine, a pesar de todas sus versiones. La novela de Carroll, es una obra de arte en sí, desde los juegos de palabras que abundan durante toda la historia que serían la envidia de cualquier obra del teatro del absurdo a las conversaciones de Humpty Dumpty, propias de un manual de lingüística.
Alicia en el país de las maravillas traspasa el umbral que separa la realidad del sueño y se adentra en un territorio sin leyes ni normas, donde todo es posible. Triunfo de la imaginación y del ingenio, esta narración recrea un mundo de escenarios y criaturas insólitos, y cuestiona todos y cada uno de los postulados lógicos en que se basa el mundo convencional. La continuación de este relato, "A través del espejo" , y el hilarante poema "La caza del Snark" se encuentran completos en esta edición ilustrada.
Alicia en el país de las maravillas, comienza como todos sabemos con Alicia persiguiendo al Conejo Blanco, la niña cae por la madriguera y a partir de ahí comienza la historia: Alicia cambiara de tamaño muchas veces, conversará con animales y estará a punto de perder su cabeza por capricho de la reina de corazones.
Alicia es una niña bastante especial, tiene una gran capacidad para hablar de cosas comprometidas, sin contar con que es capaz de beber/comer cualquier cosa sin pensar en las consecuencias.
Alicia en el país de las maravillas, podríamos decir que es una fábula, ya que la mayoría de los personajes son animales, pero intentar catalogarla en casi imposible. Dentro de ella encontramos cuentos, historia, canciones y un precioso caligrama de la cola de un ratón.
Hay escenas tan memorables como la merienda con el Sombrerero loco o la conversación con el Gato de Cheshire, en el que éste muy cuerdamente le dice que en Wonderland están todos locos.
"-Pero yo no quiero andar entre locos -observó Alicia.En A través del espejo: Alicia se encuentra en su casa pensando cómo será la vida al otro lado del espejo de su casa, para su sorpresa descubre que puede pasar a través de él. Al hacerlo se encuentra en una sala en la que las piezas de ajedrez parecen estar vivas.En la sala encuentra un libro de poesía invertida, el Galimatazo, el cual sólo puede leer al ponerlo delante de un espejo.En A través del espejo, ya no hay tantos animales parlantes, aquí hablan las plantas, los huevos...No aparecen los personajes exactos de Alicia en el país de las maravillas, sino que se crean nuevos a partir de los viejos, El Sombrerero Loco se transforma en Hatta (cuya pronunciación en inglés suena muy parecido a hatter, sombrerero) y La Liebre de Marzo se transforma en Haiga (cuya pronunciación en inglés suena como hare, liebre) Otra diferencia con respecto a Alicia en el país de las maravillas es que si allí teníamos cartas vivientes, aquí tenemos piezas de ajedrez.Si en Alicia en el país de las maravillas he destacado a el Gato de Cheshire, aquí he de hacer lo mismo con Humpty Dumpty:
-¡Ah!, no podrás evitarlo -dijo el Gato-: aquí estamos todos locos. Yo estoy loco. Tú estás loca.
-¿Cómo sabes que estoy loca? -dijo Alicia.
-Tienes que estarlo -dijo el Gato- o no habrías acudido aquí"
"_Esto es mucho significado para una sola palabra -dijo pensativamente Alicia.La edición que he manejado, recoge también, un poema bastante sin sentido, La caza del Snark (Agonía en ocho espasmos), que cuenta: "con humor infinito, el viaje imposible de una tripulación improbable, para hallar a una criatura inconcebible" una historia que toma elementos del poema Jabberwocky, de Alicia a través del espejo.Sin duda es una historia que recomiendo a todos aquellos que quieran pasar un buen rato riendo y pensando a la vez, ya que aunque a veces su forma sea cómica, el contenido de las palabras de Carroll en las historias de Alicia, puede ser muy profundo.
-Si exijo a una palabra un redoblado esfuerzo -sentenció Humpty Dumpty -le pago siempre extra.
-¡Ah! -exclamó por todo comentario la desconcertada Alicia.
-¡Cómo me gustaría que las vieras acudir a mí, el sábado por la noche! -dijo Humpty Dumpty, meneando con gravedad de un lado a otro su figura-. En busca de su paga, naturalmente"
Si después de esta reseña, seguís sin leer Alicia en el país de las maravillas, no hay nada más que pueda decir, a parte de (emulando a la Reina de Corazones):
¡Qué les corten la cabeza!